El Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) rindió este martes, 9 de febrero de 2016, un informe científico respecto de la supuesta “verdad histórica” que divulgó el gobierno de Enrique Peña Nieto, por conducto del entonces titular de la Procuraduría General de la República (PGR) Jesús Murillo Karam, el 27 de enero de 2015, en donde afirmó categóricamente que los 43 estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, habían sido incinerados en el basurero de Cocula, que esa era la “verdad histórica” y, en consecuencia, el caso debería cerrarse.
1.- A partir de esa supuesta “verdad histórica”, Peña Nieto, todo el gobierno, los medios, periodistas y grupos de poder a su servicio, se dedicaron a promover que el caso de los 43 alumnos sujetos de desaparición forzada debería superarse, que México no podía quedarse atrapado en ese asunto, en fin que se le diera carpetazo al tema. Hay que recordar que desde que ocurrieron los hechos el 26 y 27 de septiembre del 2014, Peña Nieto le dio poca importancia al asesinato de seis personas y a la desaparición de los 43 normalistas, ya que decidió que era un problema menor que deberían atender las autoridades locales de Guerrero.
2.- El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que ha estado participando en la investigación de los hechos, fundado en normas internacionales y en un acuerdo de colaboración técnica con el Estado mexicano, contrató al especialista José Torero, quien con base en un estudio científico que expuso en un informe el GIEI el 5 de setiembre de 2015, llegó a la conclusión de que los 43 estudiantes normalistas sujetos de desaparición forzada no fueron calcinados en el basurero de Cocula, como lo afirmó el gobierno de Peña Nieto, ya que con las pruebas recabadas era imposible que eso hubiera ocurrido.
3.- Ahora, los especialistas argentinos, con el apoyo de más de 30 expertos en arqueología, criminalística, entomología y botánica forense, así como balística, dinámica de fuego e interpretación de imágenes satelitales, entre otras, después de más de un año de trabajos de investigación y con evidencias científicas han concluido también que los 43 alumnos de Ayotzinapa no fueron incinerados en el basurero de Cocula, ya que encontraron restos de huesos de 19 personas, de los cuales ninguno corresponde al ADN de los estudiantes normalistas y que, de acuerdo con imágenes satelitales, en ese basurero han existido incendios al menos desde el año 2010.
4.- 0tras contribuciones importantes del informe de los especialistas argentinos se refieren a graves irregularidades en la investigación de la PGR, en donde señalan que: los 20 perfiles genéticos de los familiares de los estudiantes desaparecidos enviados por la PGR al laboratorio de la Universidad de Innsbruck de Austria eran diferentes a los remitidos por los expertos argentinos, aún cunando se trataba de las mismas personas; que cuando se recolectaron las evidencias en el basurero de Cocula no fueron avisados y no estuvieron presentes a pesar de que habían acordado trabajar conjuntamente, y en esa ocasión fueron localizados 42 casquillos debajo de una piedra que había sido revisada un día antes sin haberse encontrado nada; hay contradicciones en las declaraciones de los detenidos respecto de la forma en como supuestamente se pudieron haber colocado los restos de los estudiantes, las llantas, los troncos y el resto del material; que se encontraron 132 casquillos, entre ellos de armas largas cuyos calibres en su mayoría no corresponden a los que dicen los presos haber disparado.
5.- La reacción del gobierno de Peña Nieto ante este nuevo dictamen científico que destruye su supuesta “verdad histórica” de que los normalistas fueron incinerados en el basurero de Cocula, mientras expertos con evidencias comprueban que no ocurrió así, ha sido de darle poca importancia y largas al asunto, diciendo a través de la PGR que hacen falta más estudios; por otra parte, Peña Nieto ha hecho todo lo posible para que los padres de familia de los normalistas desaparecidos no se entrevisten con el Papa en su inminente visita a México para impedir que pueda hacer un pronunciamiento al respecto; lo cierto es que ha quedado al descubierto una vez más que Peña Nieto ha mentido sobre el destino de los 43 alumnos sujetos de desaparición forzada, y por ello se hace necesario que se reactive la exigencia popular para que el gobierno de Peña Nieto presente con vida a los 43 normalistas de Ayotzinapa.

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