Lennon bajo el sol de José Adiak Montoya (Managua, 1987) es una novela que me gustaría regalarle a todo el mundo; en especial a mis papás, tíos y amigos, que aman el rock de los 60; a quienes tienen como piedra fundamental de su vida esa música que quiso cambiar el mundo.
Es un libro que a cualquiera de ellos, y por supuesto a mí, me hubiera gustado escribir.
También es un regalo fundamental, un libro preciso para todas las personas que hayan tenido la sensación de que la vida, la suya en específico, sucede en otra parte.
Es un libro que interpela a cualquiera que haya crecido con el rock desde un lugar marginal y quien haya soñado con tocar en un grupo o con escribir, y en tardes de ocio, se toma la licencia de preguntarse, qué pasaría si… ¿Qué hubiera pasado si acaso Los Beatles, Los Rolling Stones o Los Kinks, hubieran nacido en el mismo lugar que yo, Oaxaca o Managua, por ejemplo?, ¿habrían llegado a ser tan famosos? ¿Habrían sido los mismos?
Lennon bajo el sol comienza con un John Lennon maduro, entrando a los 40 años en la playa de Nicaragua. Es un hombre muy similar al que conocemos de Liverpool, es un músico de rock famosísimo, tiene un compañero al que ama y odia que se llama Paulo y tocó en una banda de rock, Los Escarabajos, que cambiaron el mundo, de un día para otro y para siempre. Sólo que es de Nicaragua y desde allí tocó su música.
Sin duda el libro es una parodia, sólo que recordemos que el primer sentido de este estilo es el del homenaje. José Adiak Montoya es un narrador sencillo y genial, pues en unas cuantas pinceladas nos plantea el juego sumamente divertido de imaginar a Los Beatles como nicaragüenses. Pienso que habría sido imposible si hubieran sido de este país, que hubieran llegado a ser tan famosos, pero esta no es más que una suposición mía.
Me fascinan los libros que plantean la posibilidad de pensar un pasado diferente y lanzarse a ideas descabelladas como que los nazis hubieran ganado la Segunda Guerra Mundial, de Philip K. Dick, o éste, que plantea que Los Beatles hubieran sido centroamericanos.
Me gustan este tipo de libros porque nos recuerdan que la ficción no sólo nos da la posibilidad de vivir diferentes vidas, no sólo ser otras personas en otros tiempos en este universo, sino imaginar que la historia de la humanidad ha sido otra.
Es también fascinante este ejercicio de ucronía porque es una apropiación absoluta de la Historia. Porque en cuanto más descabellado es un pasado, se puede escribir sobre el presente de una manera delirante.
Mientras sitúa a Los Escarabajos en Nicaragua, José Adiak recuerda la historia de la dictadura que por esos días oprimía al país. ¿Cómo habrían tratado los Somosa a aquellos músicos?
La broma es sumamente divertida y cruel a la vez, pues la novela, al jugar con otra realidad, nos cuenta una historia cruda y terrible de un país.
También la novela en menos de 200 páginas recrea desde otro continente, el opuesto al europeo, la hermosa historia del inicio del pop. Es un libro que no necesita apropiarse de Los Beatles porque la banda inglesa dejó de pertenecer a Liverpool y fue adoptada por el mundo.
Sorprende que las canciones pudieron haber sido compuestas en cualquier lugar porque fueron escuchadas en todo el mundo, y mostraban a la periferia, el centro, y viceversa.
Quizá lo definitivo en Los Beatles es que no se necesitaba tener nada más para escucharlos que ganas de vivir y el romanticismo suficiente para tener ganas de cambiar el mundo. Y así, los jóvenes de Centro y Sudamérica vieron su mundo caer mientras Los Beatles brillaban y denunciaban los abusos de los poderosos.
(José Adiak Montoya, Lennon bajo el sol, Ciudad de México, Planeta, 2019. 173 páginas).