EL-SUR

Lunes 15 de Abril de 2024

Guerrero, México

Opinión

¿La extrema derecha llegará al poder en Brasil?

Gaspard Estrada

Junio 06, 2018

Desde el inicio de la transición a la democracia en Brasil, en los años 1980, se decía que los políticos de aquel país tenían una tendencia a auto posicionarse a la izquierda, aunque en la práctica algunos de ellos, como los miembros del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), encarnen las políticas llamadas “de derecha”. Según las encuestas de opinión, tal parece que esto llegó a su fin. En efecto, el día de ayer, el portal informativo Poder 360 reveló una encuesta de opinión que arrojó números inéditos para la campaña presidencial que está comenzando en Brasil: por primera vez, Jair Bolsonaro, ex coronel del Ejército brasileño, diputado federal desde hace ocho legislaturas (se autoriza la reelección de los parlamentarios en Brasil) rebasó el umbral del 20% de los votos, para llegar al 25% en el caso de no participación del ex presidente Lula. Hasta ahora, todas las mediciones demoscópicas habían dado cuenta de un estancamiento del candidato del Partido Social Liberal (PSL), en una franja de entre 15% y 20% de los votos. En un contexto de gran fragmentación de la oferta política, es decir, de un número elevado de candidatos con bajos niveles de intención de voto, es posible que un candidato como Jair Bolsonaro pase a la segunda vuelta. Lo más impresionante en esta encuesta es que en todos los escenarios en los cuales Lula no está en la boleta, la segunda vuelta podría ser ganada por Jair Bolsonaro. Además  de esto, los números mostrados por la encuestadora DataPoder muestran que el candidato de extrema derecha del PSL, que tiene un discurso abiertamente racista, xenófobo y contrario a la agenda de promoción de los derechos humanos, tiene el mayor nivel de cristalización del voto de todos los candidatos en disputa: de tal manera que lo que parecía ser una hipótesis improbable en la historia política de Brasil, ver a un candidato de extrema derecha en condiciones de llegar al poder, parece volverse una posibilidad real. Claro está, según la propia casa encuestadora, esta encuesta fue levantada durante la cúspide de las huelgas del sector camionero que paralizaron a Brasil hace unos días, por lo que es posible que estos resultados sobre representen a un cierto tipo de elector, más proclive a declarar una intención de voto a favor de Jair Bolsonaro.
Sin embargo, las tendencias no son del todo positivas. Otra encuesta de opinión, realizada en el mismo momento político por la casa encuestadora IBOPE a pedido del gobierno federal y revelado ayer por el periódico Folha de São Paulo, muestra resultados preocupantes. Según esta encuesta, 30% de los brasileños apoyarían una intervención militar, y otra tercera parte sería favorable a la organización de elecciones presidenciales ya, sin esperar al mes de octubre, cuando ese escrutinio se debe realizar según el calendario electoral. De tal manera que dos terceras partes del electorado brasileño desean cambios en profundidad en el sistema político, al tiempo que la oferta política no los convence. En efecto, los candidatos que encarnan la continuidad, es decir, que representan a los partidos que hacen parte de la coalición actualmente en el gobierno, como el Movimiento Democrático Brasileño (MDB), o el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), no llegan individualmente al umbral del 10% de los votos. Dentro de este escenario de gran incertidumbre, y de aumento de las protestas y de los movimientos sociales, cabe de nueva cuenta preguntarse por qué las elites políticas y económicas de Brasil continúan apoyando el encarcelamiento injusto del ex presidente Luis Inacio Lula da Silva, que fue condenado sin pruebas. En este contexto de polarización política, económica y social, Lula encabeza las encuestas de opinión, y sería capaz de ganar la elección desde la primera vuelta. Paradójicamente, la solución para evitar la polarización política y la llegada de la extrema derecha al poder en Brasil, está hoy en día en la cárcel.

* Director Ejecutivo del Observatorio Político de América Latina y el Caribe (OPALC), con sede en París.

Twitter: @Gaspard_Estrada