Cien años de la revolución rusa

Mañana se cumplirán 100 años de la Revolución  rusa, el gran sacudimiento político, económico, social y cultural del siglo XX. El movimiento encabezado por Lenin y Trotski despertó grandes expectativas en todo el mundo, las que se mantuvieron incluso durante la sangrienta dictadura, no del proletariado, sino de José Stalin. El socialismo, para Carlos Marx, debía ser un fenómeno mundial para verse coronado por el éxito. Sin embargo, “el socialismo en un solo país” acabó autoconsumiéndose por varias razones, la principal de ellas fue la productividad decreciente de la economía, pues no se puede suprimir sin consecuencias eso que llamamos la “iniciativa privada”, una fuerza que puede generar abusos sin cuento, pero que también genera riqueza empresarial y social, crea empleos, eleva la productividad, alienta el desarrollo tecnológico y mejora la vida de las personas y de los países. De la revolución rusa queda el empujón formidable que dio a las organizaciones sindicales del mundo, la educación universal, las instituciones de seguridad social y el surgimiento de nuevas corrientes artísticas, como fue el caso del muralismo y otros hechos culturales. Murió eso que era –decían– “el socialismo real”, pero subsiste en la humanidad el sueño de una sociedad sin excluidos, con iguales oportunidades para todos. Es un sueño, sí, pero los sueños son el combustible de los grandes cambios.

Coloquio internacional de filosofía

Gabriel Vargas Lozano es autor, entre varias obras más, de Filosofía ¿para qué?, un pequeño gran libro que trata de los desafíos que enfrenta la llamada ciencia de las ciencias en el siglo XXI. La obra se consigue en las librerías de la UAM y hay que buscarla porque aborda temas olvidados, pero de mucha actualidad. El mismo Vargas Lozano está promoviendo el Coloquio Internacional sobre el Significa-do de la Filosofía en la Educación, que se celebrará los días 15, 16 y 17 en el auditorio Pedro Ramírez Vázquez de la rectoría general de la Universi-dad Autónoma Metropolitana, los dos primeros días, para concluir en el Senado de la República. Los interesados pueden entrar a www.cefilibe.org.

El huapango y Baqueiro Foster

Gerónimo Baqueiro Foster escribió en la Revista Musical Mexicana, en 1942, que a la palabra “huapango” se le da comúnmente el significado de “sobre el tablado”, pues se le considera una derivación del vocablo nahua cuahpanco, que se compone de cuahuitl, que significa leño, madera; ipan, en él o sobre, y co, lugar. “Cierto es –decía aquel musicólogo– que la tarima, entablado o estrado tiene una importancia indiscutible en el Huapango (género de arte popular integral), puesto que en él, simultáneamente, se toca, se canta y se baila”. Sin embargo, para quien fuera crítico musical de El Nacional, nada tenía de extraño que la palabra fuera “resultado de sincopar o abreviar la expresión Huaxtecas de Pango”, expresión que se refiere a los antiguos huaxtecas (huastecos, diríamos hoy), habitantes de las riberas del río Pango, palabra que corrompieron los conquistadores para dejarla en Pánuco. Valga, pero sigamos bailando huapango sobre un tablado.

México en El País de Uruguay

En El País Cultural, excelente suplemento que dirige en Montevideo László Erdelyi, se publica cada semana la columna Poéticas, del mexuruguayo Eduardo Milán, pero en el número más reciente de esta publicación aparece una crónica de Álvaro Pérez García sobre El terremoto en México. Los rostros de la inclemencia, así como una reseña del libro Malayerba, de Javier Valdés, el periodista sinaloense arteramente asesinado a plena luz del día y en una transitada calle de Culiacán. Un número que habla de las desgracias mexicanas con un aire solidario que debemos agradecer.

Bailando por un riñón

La editora Deborah Holtz invita “a salvar una vida bailando”, y para ese fin promueve el segundo Gran Baile por un Trasplante, a beneficio de personas de escasos recursos que requieren un riñón, las que en México suman más de 130 mil y están en una lista de espera de tres años, si bien les va. El bailazo será en el Salón Los Ángeles el próximo 11 de noviembre, pero los boletos ya se pueden adquirir llamando al teléfono 52555804 o comunicándose al correo electrónico [email protected].

Breviario…

Como parte de los festejos por los 75 años de El Colegio de México, esta institución publicó Memoria de José Moreno Villa, textos autobiográficos de ese personaje, en edición preparada por Juan Pérez de Ayala. Moreno Villa fue uno de los fundadores del Colmex, centro escolar al que sirvió hasta su muerte. @@@ En su número de octubre-noviembre, Ibero, la revista de la Universidad Iberoamericana, se ocupa de los 43 muchachos de Ayotzinapa a tres años de su “desaparición”, como si fuera posible que 43 seres humanos se esfumaran así nomás. Bien por la revista, que tiene al poeta Juan Domingo Argüelles como director editorial. @@@ El próximo jueves, en el Palacio de Minería, recibirá Leonardo Padura el doctorado honoris causa por la UNAM. Un día antes, el autor de El hombre que amaba a los perros tendrá un encuentro con estudiantes en la sala Miguel Covarrubias.