Debate cultural en TVUNAM

Fue un acierto de TVUNAM reunir a los representantes culturales de los tres candidatos a la Presidencia y dejar fuera al Bronco (engendrito de quienes esperaban quitarle votos a Andrés Manuel López Obrador, aunque ahora todo indica que le puede arrebatar 20 o 30 sufragios a los abanderados del PAN y el PRI). Por AMLO asistió Alejandra Frausto, por el candidato no priista del PRI José Antonio Meade estuvo en el estudio César Moheno y por el panista Ricardo Anaya asistió el creador de la FIL de Guadalajara, Raúl Padilla. Alejandra se movió en el ámbito que mejor conoce: el del trabajo a ras de tierra como promotora cultural; Moheno empezó muy articulado al desplegar sus ideas sobre política cultural, pero se fue diluyendo en la segunda parte del programa, exactamente al revés de Padilla, que comenzó con intervenciones un tanto rutinarias y acabó por desplegar su amplísima experiencia en los temas que se abordaron en las dos horas del programa que condujeron Ricardo Raphael y Rosa Beltrán.

Las propuestas discutibles

Por supuesto, la mayor parte de las propuestas y proyectos son plausibles, como impulsar la organización comunitaria, la autogestión, el apoyo a los profesores, más tiempo de pantalla para los filmes mexicanos, vinculación con los mexicanos de Estados Unidos, impulso a los jóvenes, seguridad social a los trabajadores de la cultura y cosas así. Pero también se expusieron algunas ideas con sesgos discutibles. Por ejemplo, Alejandra Frausto, quien prometió defender el sindicalismo del medio cultural, no hizo referencia al charrismo ni a la proliferación de “sindicatos” en el INBA, los que en varios casos son negocitos de liderzuelos sinvergüenzas. Moheno también salió en defensa de los trabajadores, pero no mencionó que la mitad o más están por honorarios, sin base ni derechos elementales como servicio médico, jubilación, Fovissste, etc. Padilla fue enfático al demandar una mayor participación privada, pero sin mencionar que para obtener fondos bastaría con un régimen fiscal menos injusto. El ex rector de la Universidad de Guadalajara también propuso suprimir la categoría de “jóvenes creadores” en las becas del Fonca, con el argumento de que los buenos lo son desde chiquitos. En fin, un debate positivo y propositivo.

¡Qué rico mambo!

Se inauguró en la Fonoteca Nacional una exposición dedicada al gran Dámaso Pérez Prado, el celebérrimo Rey del Mambo, con motivo de haberse cumplido en diciembre pasado el centenario de su nacimiento. El Carefoca vino a México en 1949 y cuenta Iván Restrepo que Gabriel García Márquez escribió del músico: “dio un golpe de Estado contra la soberanía de todos los ritmos conocidos”. Aquí, donde puso a bailar a todo mundo, mereció condenas desde los púlpitos, pues el mambo se llegó a considerar una música diabólica. Sus temporadas en el teatro Margo hicieron época y los meseros del café que estaba en Pensador Mexicano y Aquiles Serdán (hoy Eje Central) nunca olvidaron sus propinas de cien pesos, que entonces eran como quince días de salario mínimo. Pacato, el gobierno de Adolfo Ruiz Cortines lo expulsó del país en 1953, pero la gente siguió bailando mambo. El músico mantuvo su paso triunfal en otros países y hasta se dio el lujo de componer un concierto sinfónico. Igor Stravinsky dijo que el mambo era “una explosión musical, sólo digna de un genio como Pérez Prado”, quien volvió en 1964 y murió entre nosotros en 1989. El próximo jueves, a las 19 horas, también en la Fonoteca (Francisco Sosa 383, Coyoacán), Iván Restrepo y Pável Granados hablarán del genio en presencia de María Victoria. Iremos.

Declina Lidia Camacho

Inteligente, Lidia Camacho, directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes, decidió renunciar a su candidatura por el PRI a senadora plurinominal suplente. Como se produjeran críticas por el hecho de que estando en funciones en el INBA apareciera como candidata, lo que incluso se consideró ilegal, declaró: “con apego a la ética con la que siempre me he conducido, es mi decisión declinar la invitación formulada”. Así, ante la segura derrota de su partido, se baja oportunamente de un tren que viaja a ninguna parte y que seguramente se descarrilará el próximo primero de julio. ¡Felicidades!

Breviario…

Mañana se entregan los Arieles a lo mejor del cine mexicano. Muy vivo, Ernesto Contreras, presidente de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas, metió su película y a su gente con la ventaja de ser juez y parte. Que su gremio se lo demande. @@@ Se anunció que el Museo Tamayo construirá un teatro isabelino para 500 personas, al aire libre y con 22 metros de diámetro para que lo disfrute la afluencia dominguera de Chapultepec. Muy bien, pero valdría la pena aclarar si el coso se levantará en este agónico sexenio o se la van a heredar a la próxima administración, como el tren a Toluca y el nuevo aeropuerto. @@@ Apareció la convocatoria para el Premio de Periodismo Walter Reuter con el tema “Elecciones 2018: ¿Una prueba de fuego para la democracia mexicana?”. Mayores informes en el teléfono 5454 3372 de la ciudad de México o en el correo electrónico [email protected].