EL-SUR

Sábado 12 de Octubre de 2024

Guerrero, México

Opinión

Morena, lo que sigue

Arturo Martínez Núñez

Septiembre 06, 2022

Con la elección de los cargos ejecutivos en el consejo estatal de Morena, termina una etapa marcada por un proceso electoral sucio, lleno de prácticas denostables como el corporativismo, el clientelismo y el acarreo. Los beneficiarios de estas prácticas podrán argumentar todo lo que quieran pero siempre estarán manchados por haber comido de la manzana de la discordia. “No somos iguales” dirán algunos y en efecto, no, no son iguales, son peores que los priistas. Cómo malos son muy buenos.
Hoy las tribus ganaron la presa que querían tener. No les importó ensuciar el legado del que dicen es su líder y ejemplo. Su líder jamás se hubiera prestado a estas prácticas, sépanlo. En su conciencia lo llevarán. No me corresponde a mi juzgar a nadie.
A lo largo y ancho del país se repitió el mismo modelo: chifló más el que comió más pinole. Hoy tienen al partido que querían. Un movimiento secuestrado con la fuerza del dinero. Cómo en los viejos tiempos.
En lo que se equivocan muchos es en creer que la gente es tonta. Lo dice nuestro presidente todo el tiempo: tonto es aquel que piensa que el pueblo es tonto.
La política tiene reglas que prácticamente no han cambiado en miles de años. Tampoco es momento de llamarnos a engaño ni darnos golpes de pecho. La política es así. Hoy las estructuras le ganaron a los liderazgos reales. Casi todos, salvo honrosas excepciones, ganaron sus cargos y tienen sus encargos, gracias a la enorme popularidad del Presidente de la República. Por eso no hay que engañarnos. Lo qué hay es lo que el diseñador del modelo quiso que hubiera. Pareciera que se prefiere un partido con mucho cuerpo y poca cabeza.
Los que venimos de antes, de antes incluso de que hubiera democracia burguesa, sabemos que las luchas son de eternidades. No nos espantan las estrellas fugaces ni las flores de un día. Entendemos que la historia se construye a golpe de décadas no de sexenios ni de trienios.
No seremos quienes golpeen ni a Morena ni a la izquierda. Comprendemos que el partido es como un adolescente o más bien como un niño rebelde y berrinchudo. Aquí nos quedaremos porque siempre estaremos en la izquierda aun cuando muchos no entiendan qué significa ello.
La tarea es seguir haciendo y siendo pueblo. La tarea sigue siendo recorrer casa por casa generando organización y conciencia. La tarea es hacer gobiernos diferentes y eficaces cuando nos toque la responsabilidad. La tarea es seguir siendo necios y no transformarnos de la noche a la mañana en aquello que decíamos combatir.
En México y en Guerrero hay mucho pueblo y más temprano que tarde volverán al basurero de la historia los enanos que no supieron estar a la altura de las circunstancias ni de los momentos históricos.
La transformación nacional no acepta reclamos personales. Los agravios se perdonan y la ropa sucia se lava en casa.
Es momento de estar unidos y de avanzar a la siguiente etapa de esta lucha. Hoy Morena nos necesita más que nunca. La izquierda de Guerrero nos necesita más que nunca para poder contrastar entre la verdadera izquierda socialista y los nacional revolucionarios que no son otra cosa que priistas light. Es momento de ser estratégicos y aliarnos primero con los de casa y luego con los de fuera. La 4T necesita al menos 24 años para poder dar resultados profundos. En el camino habrá anomalías que debemos de administrar, pero estas no deben de desviarnos de nuestro objetivo superior que es la transformación de la vida pública de México.