En política, la unidad se construye con las acciones y no con discursos. En política, usualmente los que hacen los llamados a la unidad son aquellos mismos que provocan la división.
Guerrero es un estado donde normalmente los actores arrancan antes de tiempo. Resulta que en Morena cada semana nos amanecemos con la novedad de un nuevo actor que se pronuncia por la “unidad” y se declara listo para contender por la gubernatura.
Pero de todos aquellos que hasta ahora han expresado abiertamente sus intenciones, todos han sido gobierno y todos han tenido resultados irregulares en sus gestiones. La mayoría no apoyó a López Obrador en el 18 e incluso en conversaciones hacían cuentas alegres sobre como su candidato Anaya se alzaría con el triunfo.
Algunos se acercan a Morena porque intuyen que ganará con holgura en 2021. Quieren cosechar lo que otros sembraron. Se escudan en decir que ellos apoyaron a Andrés Manuel en 2006 y en 2012. Ahora aparecen aliados a morenistas en su mayoría ex perredistas que nunca pudieron liderar allá y tampoco podrán hacerlo acá. Los actores políticos tienen cada uno el peso especifico que les corresponde. Burócratas de partido, busca plurinominales y profesionales de la política están expectantes y buscan colocarse en torno a los posibles candidatos en la lógica de lograr prebendas y recompensas en caso de un eventual triunfo. Son los mismos de siempre. Oportunistas, achichincles, cargadores de maletas se aprestan a cambiar de amo.
Ignoran que Andrés Manuel todo lo ve y todo lo sabe. Conoce Guerrero mejor que muchos que se ufanan de ser de aquí. Sabe qué clase de personajes son unos y otros. Evalúa el trabajo que estamos haciendo los que tenemos alguna responsabilidad pública.
Otro más, fiel a su exótico estilo, prefirió hacer un baile encabezado por los Yonic’s en el Centro de Convenciones donde se repartieron tamales, aguas y tortas. Nada serio se puede esperar de quien ha hecho de la ocurrencia y la broma su forma de vida.
Precandidatos y precandidatas, vayamos a tierra. Comencemos a proponer soluciones a los grandes temas de Guerrero. La gente quiere escuchar propuestas y quiere ser escuchada. La elección de 2021 no la va a venir a ganar Andrés Manuel de la mano de su candidato o candidata. La ganará aquel o aquella que logren estimular a los jóvenes de las regiones, a las mujeres y a los hombres de trabajo; será aquella persona que logre comunicar con precisión y mensaje claro y preciso.
Será quién logre unir y no dividir, pero no a Morena o a los Morenistas sino a la mayoría del pueblo de Guerrero. Guerrero es mucho mas que las guerritas intestinas de actores de reparto. Guerrero necesita acciones concretas no ocurrencias ni improvisaciones. Guerrero necesita armonía, concordia, paz y unidad, pero no solo entre los grillos de siempre sino con todos y entre todos.
Los eventos con acarreados en los mismos salones de siempre no sirven para nada. Lo único que sirve es la propuesta, el proyecto, la estrategia y el carácter para alcanzarlo.
Estoy convencido de que en los próximas semanas surgirán propuestas nuevas que harán ver a los grillos de siempre como lo que son: politicastros caducos, matraqueros del viejo régimen, profesionales del acomodo político y expertos en el cochupo, el acuerdo en lo oscurito y la negociación al calor de las copas. A eso es a lo que el pueblo de México y de Guerrero dijo: “¡Basta!” en la pasada elección.