EL-SUR

Jueves 02 de Mayo de 2024

Guerrero, México

Opinión

Mujeres poetas del Sur

Anituy Rebolledo Ayerdi

Enero 19, 2023

Las escritoras Khiabet López Morales y Brenda Ríos Fotos: Tomadas de internet

 

(Tercera parte)

Las escritoras Khiabet López Morales y Brenda Ríos Fotos: Tomadas de internet

Hilda Latabán Morales
San Marcos
Jornalero

¡Jornalero!
Sembrador de esperanzas
¿Dónde estás, jornalero?
¿Abonando la tierra con tu grata presencia?
¿Amoldando en tus manos la semilla del tiempo,
o surcando en las nubes
la simiente de afectos
al trillar en el cielo la cosecha de siempre?
En la savia amorosa
del sendero trazado
nos dejaste un legado
de ejemplares acciones,
el respeto a los hombres,
el amor al trabajo
el amor a lo honesto,
el respeto a la vida.
Jornalero de afectos,
sembrador de esperanzas;
¿Dónde estás jornalero?
Tú estarás con nosotros
y nosotros contigo.
Con el Sol de la tarde.
o en las noches más frías.
Con la fe inquebrantable,
con pasión redimida, esperamos
La cita a reunirnos contigo.

Brenda Ríos
Acapulco de Juárez
Vecinos

La pared de mi cabecera es la pared de cabecera de mi vecino. Escucho su televisión y él escucha la mía.
Dormimos cabeza con cabeza, separados apenas por un muro blanco.
Su balcón es mi balcón
Nunca lo he visto. La entrada a su departamento es por otra puerta. No sé su rutina
En las noches la luz se asoma de su recámara
Nuestras cabezas tan próximas y, unidos por la intermitencia del televisor,
la luz oblicua, la constancia de nuestra proximidad
somos más hermanos que otros,
saber que está aquí al alcance de mi mano (si toco el muro quizá el toque el muro)
por algún motivo hace que la noche siga
con su ritmo aletargado de noticiero
esas voces eléctricas que suplen nuestras invisibles conversaciones
¿a qué miras?
Somos más amigos que otros:
nos une un espacio en el mudo
y las palabras que no hemos cruzado.

Emilia Deloya
Chilpancingo de los Bravo
En el campo

Las lindas flores se mecían tranquilas
La tarde declinaba;
murmurando el riachuelo me decía
lo que mi pobre corazón soñaba

y esas flores que duran solo un día
al sol incandescente
le enviaban un adiós enternecido
al verle moribundo en occidente

Todo imitaba a la dichosa calma
del triste corazón,
un suspiro exhalaba conmovida
y una muda plegaria alzaba a Dios

Khiabet López Morales
Acapulco de Juárez
Costas lejanas

Llegué de costas lejanas
donde un hombre se hundía
en los ríos de la locura

El gemido del tiempo
taladra la frente del recuerdo

El diablo se ha metido en la cabeza
y perfora su mente hasta el hartazgo

Yo soy el producto de un acto de violencia
voy disfrazada con ropas que encuentro
en los roperos del silencio

El diablo tienta y el hombre juega

Mi sentir es el trono
de fantasmas que beben
ausencia y olvido en licor

No soy igual a los demás,
acepto que juego a las escondidas
con la suerte

Soy un ángel que busca
el puerto perfecto

Un balcón frente al mar
donde arrojar el temor
donde mi voz sea canto

Ethel Bello Solís
Petatlán
Ansiedad

Busco sin encontrar respuestas
a esta ansiedad palpitante,
esta necesidad de encontrar la verdad
en las paredes del recuerdo,
en las sombras de los cuerpos
en el umbral de una mirada
y en las luces de la noche,
de una ciudad desconcertada.

Busco un sendero
que conduzca a mi ser a sus entrañas
que me atrape en su red de laberintos
y revuelque mi cuerpo en las estrellas ,
busco en el anochecer
la luz de tu aura,
para encontrarme
en el fulgor de tus ojos

Y pido al amanecer
respirar al compás de tu cuerpo
sentir sus colores en la suavidad de tu piel
y en el aire fresco, saborear tu aliento

Busco más allá del infinito
y seguiré buscando
siempre buscando, hasta encontrar
la paz, la armonía y el equilibrio
en el amor que tanto necesito.

Profa. Elena Girón
Huitzuco de los Figueroa
Vivir sin esperanza

Triste de mí, que ya en edad temprana
mi alma perdió la dicha y venturanza,
sintiendo de mi vida en la mañana
vivir sin esperanza

Triste de mil, que falta ya de calma
en mi pecho se abrigan los enojos,
triste de mí, que siendo joven mi alma
camina por abrojos

Huyen de mí, cual ave pasajera,
tranquilidad, consuelo y alegría,
sucediendo a mi dicha lisonjera
la cruel monotonía

¡Cómo es triste pasar siempre llorando
de nuestra vida los primeros años!
¡Qué terrible es vivir, siempre probando
amargos desengaños!

¡Cuánto lloro al sentir en mi alma ardiente
Cuando se pierde el sol en occidente
ocultando la luz en lontananza.
vivir sin esperanza!

Llega la noche y sigo suspirando
entregada al dolor y al desconsuelo,
y la aurora sorpréndeme regando
con lágrimas el suelo.

Y sin consuelo a mi dolor profundo,
desgarrándome yo mi propia herida.
¡Cuánto mi corazón detesta al mundo!
¡Cuánto odio ya la vida!

Yo quiero el silencio de la fosa,
pues así ocultará mi sepultura
recuerdos de una vida pesarosa,
de llanto y amargura.

Ma. Eugenia Soberanis Nogueda
Acapulco de Juárez
Te vas a quedar ciego

Y te vas a quedar ciego de tanto no querer ver
La verdad en la que vives, pues no la quieres saber.

Y te vas a quedar ciego por creer con necedad
que sólo con tus deseos cambiarás la realidad

Y te vas a quedar ciego y ya no podrás elegir,
la ruta que te lleve a donde siempre quisiste ir

Y te vas a quedar ciego sin poderme ya mirar
porque tu ceguera al fin a mí también me va a borrar

Y te vas a quedar ciego te lo puedo asegurar,
ese fatal día en que a tu lado no pueda ya estar.

Y te vas a quedar ciego…
¿Quieres saber por qué?
Porque el día en que yo me vaya,
al fin que no los usas,
¡tus ojos me llevaré!

Pomposa Estrada
Chilpancingo de los Bravo
Recuerdo

Lentas transcurren las horas
y con las horas que pasan,
tristes se alejan los días
dejando en pos de su ausencia
lúgubre y triste el recuerdo,
triste el cielo y triste el alma.