EL-SUR

Martes 30 de Abril de 2024

Guerrero, México

Opinión

Nuevo pacto social

Florencio Salazar

Enero 29, 2024

A mi nieto Jorgito, a quien deseo todas las fortalezas de la vida.

Los modos de hacer política son tantos como los grupos humanos. De su práctica depende su riqueza conceptual, los valores que trasmite y su ética. Son sus actuales formas de ejecución motivos de los ciudadanos para alejarse de la política y que la democracia ya no sea satisfactoria.
Según Daniel Innerarity el objetivo de la política es que la voluntad popular sea la última palabra, pero no la única, que el juicio de los expertos se tenga en cuenta, pero que no nos sometamos a él, que las naciones reconozcan su pluralidad interior y se abran a redefinir y negociar las condiciones de pertenencia. Siempre ha habido problemas, pero ahora –afirma el pensador español– estamos perplejos, porque “el cálculo del futuro es especialmente incierto”.
En el año 2008 se publicó el libro Una mirada a nuestro mundo. 50 años en el futuro. Contiene las respuestas a la pregunta que el periodista Mike Wallace hizo a 60 “de las mentes más brillantes del mundo”. Los breves textos contienen la visión cultural, ambiental, científica y política de los participantes, de acuerdo con su especialidad. En términos generales, las respuestas son poco alentadoras: la población llegará probablemente a 9 mil millones de personas (ya somos 8 mil millones); el efecto invernadero descongelará Groenlandia; los alimentos serán insuficientes para satisfacer la demanda y avanzará la desertificación; la posibilidad de habitar la Luna o algún otro planeta es improbable; no obstante, se intentará y las naves espaciales contaminarán el espacio con óxido de nitrato afectando más la capa de ozono. Faltan 34 años para llegar al 2058. De hecho, ya padecemos algunos de esos tremendos efectos.
Contribuyen, además, a la construcción del indeseable escenario la protesta social, la violencia, el crimen organizado, el terrorismo, la migración, las guerras y la amenaza nuclear, el poder fáctico de las grandes corporaciones de comunicación digital y la incipiente autonomía de la inteligencia artificial. Este conjunto de factores está haciendo al Estado menos competente. Las estructuras del poder legal y la legitimidad de los gobernantes están en crisis e inclusive los organismos internacionales, como las Naciones Unidas y la Unión Europea, que no han sido eficaces en la solución de los conflictos en Ucrania y Gaza.La idea idílica de que el hombre pueda ser ciudadano del mundo se ha convertido en una triste utopía. Millones de seres humanos, en muchas naciones, están siendo reducidos por el miedo, la exclusión y la falta de derechos. Explica porqué los pueblos apoyan a líderes populistas, que surgen del hartazgo y la necesidad. La gente va a creer en la política cuando los políticos inspiren confianza y haya resultados de estabilidad y bienestar.
La pasividad no ayuda. Debemos explorar diversos mecanismos de entendimiento político. Gabriel Zaid (Reforma, 28/1/24), propone fórmulas para aprovechar “las ventajas de la monocracia y reducir sus peligros, desde la monarquía parlamentaria hasta el presidencialismo acotado por otros poderes soberanos y organismos autónomos. Las distintas fórmulas tienen elementos comunes: régimen de derecho, prensa libre, elecciones creíbles y un tiempo limitado en los cargos, con rendición de cuentas”.
En la pugna por la sucesión presidencial no se han abordado la Reforma del Estado y la posibilidad de promulgar una nueva Constitución democrática y republicana, temas en los que fue insistente Porfirio Muñoz Ledo. Se requieren cambios estructurales. Nuestro sistema político es disfuncional y la Constitución cada vez menos observada. Para afrontar los viejos y nuevos problemas nacionales y globales, necesitamos un nuevo pacto social. El actual ya no da para más. Hay que volver a la política.