EL-SUR

Viernes 19 de Abril de 2024

Guerrero, México

Opinión

Números

Arturo Martínez Núñez

Mayo 15, 2018

El domingo por la noche tuve el gusto de convivir con un grupo de amigos de Atoyac en La Pasadita que comanda el Capitán Radilla. Entre los platos de carne de cuche, arroz, frijoles, queso y crema, la conversación giró en torno al deporte nacional en estas épocas: la predicción de resultados electorales.
El motivo de la reunión fue un cumpleaños. Entre los asistentes habían simpatizantes del PRI, del PRD y de Morena. La percepción unánime es que Andrés Manuel López Obrador va a arrasar en la elección presidencial. Ese tema está fuera de discusión. Priistas y perredistas lo dan por un hecho.
Los priistas apuestan a que su estructura los va a mantener a flote y les dará algunos triunfos, mientras que los perredistas apuestan al voto cruzado a favor de sus candidatos locales. Ambos saben, en el fondo, que sus apuestas carecen de sustento lógico. Ambos se dirigen aceleradamente a un acantilado profundo y parecen no enterarse.
Con el ánimo de contribuir al realismo, esa noche intenté dar una explicación basada en las matemáticas y no en las artes adivinatorias.
Tomemos como base para nuestro calculo, la encuesta que apareció ayer en El Financiero que le asigna a AMLO 46% de la intención al voto para la Presidencia de la República. Anaya, candidato de la alianza contra natura PAN-PRD tendría 26% y José Antonio Meade candidato ex ciudadano del renacido PRI, 20%.
Este porcentaje cambia en la misma encuesta, cuando se divide en regiones geográficas. Así, en la zona Sur, AMLO obtendría 54%, Anaya 23% y Meade 18%. En 2012 la participación total electoral fue de 63.34%.
Utilizando estos datos, podríamos proyectar que AMLO obtendrá en Guerrero, cuya lista nominal es de 2 millones 524 mil 225 electores, votarían un millón 599 mil 477 personas. De estas, 863 mil 717 votarían por AMLO, 367 mil 879 por Anaya y 287 mil 905 por Meade.
La ventaja de López Obrador es de tal magnitud que deja sin efecto cualquier intento de manipulación política.
El PRD intenta confundir a los electores, llamando claramente a votar por quién quieran pero pidiendo el voto para sus candidatos locales. Saben que la gente va a votar por López Obrador y no quieren perder todo. Muy pocos candidatos locales del Frente están llamando a votar por Anaya. Saben que eso sería su tumba instantánea.
El PRI intentará atrincherarse en su voto duro y apostará a algunas posiciones fuertes como Acapulco y Chilpancingo donde puede dar la pelea.
Desde luego que esto no está escrito. Los votos deben de ser promovidos, movilizados, emitidos, contados y contabilizados. Se debe de redoblar el esfuerzo en cada una de las secciones electorales, llegar a cada una de las casa y tratar de convencer a cada uno de los ciudadanos.
Los partidos tradicionales apostarán a su estructura. Aunque saben que la mentada estructura no sirve de nada ante el impacto de un Tsunami como el que significa Andrés Manuel López Obrador.
Las matemáticas no mienten. Los datos duros no son manipulables. En política no hay sorpresas, solamente sorprendidos. El 1 de julio veremos cosas inéditas. Lo dijimos en este espacio: si López Obrador lograba romper el techo de los 45 puntos, todo era posible.