A pesar de lo concentración poblacional en algunas ciudades, el territorio guerrerense es en su mayoría rural. En sus diversas regiones podemos apreciar una especialización de actividades: la región Norte y Tierra Caliente son el granero del estado; en la región Centro se ha desarrollado la producción de hortalizas y el mezcal, mientras que en las dos costas prevalece la producción de coco, mango, frutales diversos y ganado; en las partes serranas contamos con producción de café y amplios recursos forestales.
La mayoría de familias campesinas vive en condiciones de pobreza, de ello se ha valido el PRI para mantenerse en el poder. El voto verde, como le dieron en llamar, era siempre determinante para ganar las elecciones, era un voto seguro porque se acostumbró a la gente a depender de las migajas que los programas de gobierno le otorgaban; la coacción del voto y la compra era más fácil de realizarse en razón de lo alejado de las comunidades y por ello, el fraude en las urnas y en el recuento de votos también se daba más fácilmente.
Ante ello, un conjunto de dirigentes campesinos se dieron a la tarea de construir una plataforma que permitiera coordinar a la mayor parte de organizaciones rurales del país. Fue así como surgió el Movimiento Campesino Plan de Ayala Siglo XXI (MCPASXXI) que aglutina a cerca de 100 organizaciones, a partir del cual se plantea hacer un pacto con el entonces candidato Andrés Manuel López Obrador, mismo que se suscribió el 10 de abril de 2018 en Jerez, Zacatecas y se denominó Plan de Ayala Siglo XXI para el rescate del campo y la soberanía alimentaria de México.
En un primer punto, López Obrador reconoce el esfuerzo de unidad de las organizaciones campesinas, indígenas, afromexicanas, de jornaleros agrícolas, de migrantes, de profesionales del agro y del magisterio rural para poner por encima de sus intereses particulares los intereses colectivos superiores de México y su determinación para participar como protagonistas en la Cuarta Transformación de nuestra historia y en el rescate de la nación, del campo y de nuestra soberanía alimentaria. Asimismo, reconoce su iniciativa y capacidad para construir el Plan de Ayala Siglo XXI, mismo que representa una agenda para la transformación de las condiciones de vida y de trabajo de los hombres y mujeres del campo mexicano.
El Plan de Ayala Siglo XXI establece un nuevo pacto político con el Estado mexicano, con carácter estratégico y de interés público, para impulsar una nueva era de revalorización plena del campesinado sobre la base del reconocimiento de los siguientes derechos: 1) Derechos de los campesinos a la tierra; 2) Derechos del trabajo asalariado rural; 3) Derechos de la mujeres; 4) Derechos de los jóvenes del campo; 5) Derechos de los pueblos originarios; 6) Derecho a la alimentación y la soberanía alimentaria; 7) Derecho campesino a una alimentación segura y de calidad; 8) Derecho a un vida buena y servicios públicos de calidad; 9) Derecho al territorio y a los recursos naturales como bienes colectivos; 10) Derecho a una naturaleza sana y a tecnologías respetuosas de la vida; 11) Derecho a la vida y la seguridad; 12) Derecho a una política integral para el campo; y, 13) Derecho a la libertad y a la verdadera democracia.
En contrapartida, el MCPASXXI reconoce que Andrés Manuel López Obrador representa la única alternativa para gobernar el país y con ello salvar al campo y a la nación. Con él lograremos el bienestar de la gente, la disminución de la desigualdad y la pobreza, la realización de todos los derechos para todos, la paz y la seguridad para toda la población, el cuidado de la naturaleza, el derecho a no migrar, la honestidad y la austeridad republicana y la solidaridad con las siguientes generaciones de connacionales, siempre bajo los criterios éticos indeclinables de buscar en todo momento la verdad y la justicia.
Y con base en ello, las organizaciones del MCPASXXI se comprometen a empeñar todos sus esfuerzos y capacidades para la promoción, movilización y defensa del voto rural en favor de la candidatura presidencial de López Obrador en las 25 mil secciones electorales rurales y mixtas del país en estrecha coordinación con la estrategia de movilización y defensa del voto de Morena.
Finalmente, se establece que al triunfo de la elección presidencial, ambas partes se comprometen a mantener su alianza y un diálogo sistemático y permanente para la concertación y corresponsabilidad en el diseño y puesta en ejecución del presente Plan de Ayala Siglo XXI en el sexenio 2018-2024.
Las organizaciones campesinas pusimos nuestras estructuras, infraestructuras y tiempo completo a disposición de la campaña, primero formando comités campesinos por sección, después ubicando y capacitando a responsables de casillas y finalmente en la elección y defensa del voto. En Guerrero, la meta propuesta en las mil 879 secciones rurales fue de 183 mil 288 votos para completar 5 millones adicionales a nivel nacional en las 25 mil secciones rurales. Los resultados fueron impresionantes, gracias al hartazgo de la gente, el trabajo permanente de Lçoez Obrador y nuestra labor, en el Guerrero rural votaron 439 mil 753 ciudadanos por el cambio.
Como movimiento campesino hemos entrado a un gran cambio de terreno, de estar por décadas a la defensiva y siempre demandando y presionando al gobierno, hoy contamos con un contexto que nos permitirá construir con menos esfuerzos y tiempo el país que necesitamos. Pondremos todo el empeño por capitalizar los logros obtenidos y colectivizar nuestras experiencias a fin de aportar desde abajo al cambio verdadero. Nuestro reto es lograr la coordinación campesina en cada una de las regiones y desarrollar nuevos modelos organizativos comunitarios; con ello, estaremos en condiciones de cogobernar y lograr la transformación de nuestro país.