EL-SUR

Viernes 19 de Abril de 2024

Guerrero, México

Opinión

Política y políticos

Florencio Salazar

Agosto 31, 2021

Mi carrera política en realidad había empezado como la búsqueda de un lugar donde encajar.
Barack Obama.

La bibliografía sobre la política como ciencia y arte y de los políticos como profesionales, es abundante. La organización política se ha desarrollado a partir del gregarismo humano. El propósito de estas notas, a las que he tratado de darles una presentación lógica, es compartir algunas reflexiones de autores contemporáneos, que pudieran ofrecer pautas y remitir a los interesados a los textos correspondientes. Debo hacer hincapié en la necesidad de que el político comprenda el universo del que forma parte. Y para ello, debe poseer la armadura de las ideas centrales sobre el estado, las formas de gobierno, las instituciones democráticas, la ciudadanía y el poder.
El político tiene una visibilidad superior a cualquier otro profesional, porque su oficio es adquirir y administrar el poder, es decir, influir sobre la vida de otros. No se desea un político filósofo, pues no es garantía de buen gobierno, como está acreditado con José López Portillo; pero el político debe estar informado –leer, oír– y saber tomar decisiones. Azorín recomienda leer memorias, biografías, historia, para saber cómo, ante condiciones similares, asumir decisiones apropiadas. Desde luego, es en el ejercicio de la política donde mejor se conoce la condición humana.
Max Weber: Hay dos formas de hacer de la política una profesión. O se vive para la política o se vive de la política. La oposición no es en absoluto excluyente. Por el contrario, generalmente se hacen las dos cosas, al menos idealmente; y, en la mayoría de los casos, también materialmente. Quien vive para la política hace de ella su vida en un sentido íntimo; o goza simplemente con el ejercicio del poder que posee, o alimenta su equilibrio y su tranquilidad con la conciencia de haberle dado un sentido a su vida, poniéndola al servicio de algo (El político y el científico, Colofón, 2013).
Agustín Yáñez: Es el político el que tiene que regir a la realidad, y modificarla en aquello que es inadecuado a la tesis política que se sustenta. Este es el aspecto falso de lo que malamente han llamado el realismo político: dejarse guiar habitualmente por circunstancias transitorias; y peor, cuando se hace por inercia, por pereza, por conveniencia personal, por temor o por desconocimiento de la realidad, que hace imprevisibles las consecuencias. Conocimiento de la realidad, es decir, conciencia que actúa con un conocimiento profundo de esa realidad; que actúa sobre esa realidad para superarla (La formación política, Ediciones para la cultura política en Guerrero, 1996).
Harold D. Lasswell: La vida política, en el sentido más estricto de la expresión, es una vida de conflicto, y presupone hombres que pueden llegar a una relación activa con su medio. Deben exteriorizarse los impulsos sobre el medio humano. Una personalidad política plenamente desarrollada combina ciertos motivos con ciertas especializaciones, fundiendo la capacidad emocional de exteriorizar impulsos con habilidad suficiente para asegurar el éxito (La política como reparto de influencia, Aguilar, 1974).
Manuel Alcántara Sáenz: Los políticos surgen del seno de la sociedad en la que viven, están marcados por los valores reinantes en la misma que comparten, por lo que en gran medida no dejan de traducir las propias señas de identidad que la definen. Los legados históricos, sociales y culturales tienen que ser siempre tenidos en cuenta, pero es también evidente que los políticos como profesionales pueden estar dotados, o no, de ciertos atributos que contribuyan hacer de su trabajo uno de una calidad diferenciada. Cierto que un político de calidad de nada sirve si no hay un contexto determinado en el que puede insertar en combinación venturosa (El oficio del político, tecnos, 2013).
Fernando Savater: La primera obligación de los jóvenes es la misma que tienen los más adultos y hasta los viejos, si me apuras: aprender. Quien no sabe puede tener arrebatos pero no aciertos; y confundirá la buena intención reformadora con la retórica desquiciada de los truculentos. Todos los ideales políticos son progresivos: cuando se alcanza un nivel que antaño hubiera parecido maravilloso, lo que aumenta no es la satisfacción sino las exigencias. Y está muy bien que sea así: el gobernante que ante las reivindicaciones ciudadanas responde peor estábamos antes hay que decirle bien alto que precisamente por eso ahora podemos querer más (Política para Amador, Paidós booket, 2007).
Hannah Arendt: La política, se dice, es una necesidad ineludible para la vida humana, tanto individual como social. Puesto que el hombre no es autárquico, sino que depende en su existencia de los otros, el cuidado de ésta debe concernir a todos, sin lo cual la convivencia sería imposible. La misión y el fin de la política es asegurar la vida en el sentido más amplio. El cuidado de la existencia sólo puede tener lugar mediante un estado que posea el monopolio de la violencia y evite la guerra de todos contra todos (La promesa de la política, Paidós-BOOKET, 2016).
Isaiah Berlin: La política –el arte de vivir en la polis– no es una actividad de la que puedan prescindir los que prefieran la vida privada; no es como navegar o esculpir, casos en los que quienes no desean hacerlo pueden, simplemente, abstenerse. La conducta política es intrínseca al ser humano en cierto estadio de civilización, y lo que demanda es intrínseco a una vida humana realizada (Contra la corriente, FCE, 1983).
Jesús Reyes Heroles: Libertades para la actividad plena del hombre. Sin ellas las ideologías se convierten en dogmas; la ciencia en secta de pocos; la técnica en instrumento sin finalidad; la política en negociación minúscula y acomodo estrecho; el arte se esteriliza y es simple mecánica; la moral se encanija; el nacionalismo resulta privilegio exclusivo de los fuertes; las divergencias se transforman en discordia; la convivencia en conformista sumisión (Los caminos de la historia, UNAM, 2002).
Daniel Innerarity: El objetivo de la política es conseguir que la voluntad popular sea la última, pero no la única, que el juicio de los expertos se tenga en cuenta, pero que no nos sometamos a él, que las naciones reconozcan su pluralidad interior y se abran a redefinir y negociar las condiciones de pertenencia. La política no puede seguir siendo lo que afirmaba Groucho Marx, el arte de hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados.
Fernando Escalante Gonzalbo: Es difícil y demasiado costoso, procurar atraerse a todos y contentarlos. No sería de extrañar que hubiera quien simulase una oposición con el solo fin de hacerse acreedor a algún beneficio. No tener enemigos, además de caro, es también sospechoso. La prudencia en el trato con los amigos y los enemigos es la mayor virtud. Y digo que un político debe ejercitarse en las virtudes propias de su estado, y olvidar y combatir algunas buenas inclinaciones, si las tiene, cuando éstas puedan ponerlo en riesgo (El Principito o Al político del porvenir, Cal y Arena, 1995).
José Francisco Ruíz Massieu: El aprovechamiento cabal del tiempo político, recurso escaso y no renovable, para la toma de decisiones, es uno de los grandes propósitos de todo gobernante. Ese aprovechamiento exige que el gobernante domine el arte de la oportunidad bajo la doble óptica de estar alerta a la oportunidad que se configure sin su voluntad, y de ser capaz también de propiciarla deliberadamente para que sus decisiones rindan los resultados deseados. Así, el manejo político del tiempo de un gobierno reclama astucia, destreza, pulso, resistencia y carácter, pues siempre hay el riesgo de que las decisiones sean prematuras, o no se den nunca. El gobierno es más ritmo que velocidad. (Ideas de José Francisco Ruíz Massieu, MAPorrúa, 2018).
Raymond Aron: Uno de los problemas de la democracia reside en saber cómo seleccionar a los líderes políticos con miras a incluirlos en el sistema de competición. En definitiva, los regímenes políticos valdrían lo que valen los hombres que ejercen el poder. Habría una manera de evaluar a los regímenes políticos según la calidad de los hombres que llegan al poder (Introducción a la filosofía política, Página Indómita, 1997).
Giovanni Sartori: El político escucha, cuando menos interpela, al economista. ¿Por qué no interpela, o interpela bastante menos, al politólogo? El politólogo está siempre inmensamente más adelante que el político. El drama reside en un difundido, colosal y en verdad culpable analfabetismo politológico. Nuestra clase política está compuesta de animales antediluvianos, que saben tan poco, o en verdad nada, que ni siquiera saben que existe la ciencia política. Se necesita un saber para aplicarse; y se necesita cada vez más (La Política, FCE, 2012).
Gaetano Mosca: Las clases políticas declinan inexorablemente cuando ya no pueden ejercer las cualidades mediante las que llegaron al poder, o cuando no pueden prestar más el servicio social que prestaban, o cuando las cualidades y sus servicios que prestaban pierden importancia en el ambiente social donde viven (La clase política, FCE, 2004).

* Algunos párrafos han sido compactados con el propósito de contener las ideas centrales o concluyentes, pero en todos los casos se ha respetado la literalidad de los autores.

[email protected]
@florencio_ad
FB: Florencio Salazar Adame