EL-SUR

Jueves 18 de Abril de 2024

Guerrero, México

Opinión

Renace el antisemitismo del PAN

Humberto Musacchio

Mayo 12, 2016

Para escoger a tres consejeros honorarios, la Comisión de Derechos Humanos de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal entrevistó a 13 candidatos y después de una amplia discusión hubo consenso en favor de Tania Espinosa Sánchez, Ileana Hidalgo Rioja y Salomón Achar Achar. Sin embargo, a la hora de emitir el dictamen formal a favor de la mencionada terna, intervino Jorge Romero Herrera, coordinador de la diputación panista y miembro de la citada comisión, y se produjo un hecho vergonzoso.
Romero Herrera llegó a la sesión acompañado por las diputadas perredistas Rebeca Peralta y Beatriz Olivares, integrantes de la Comisión, a la que también pertenecen la priista Mariana Moguel y Luciano Jimeno Huanosta, del Partido Humanista, quien preside el citado órgano. Romero Herrera le pidió a Jimeno salir al pasillo y le comunicó que él y las tres comisionadas habían decidido cambiar su voto para sacar de la terna a Achar, al que el panista insistentemente llamó “judío” y en cierto momento “pinche judío”, según la versión ampliamente difundida en la prensa.
Jimeno Huanosta se mantuvo en lo acordado días antes y votó solitario por la propuesta inicial, en tanto que los comisionados restantes eligieron a la panista Tania Espinosa, a la perredista Ileana Hidalgo y a un tal Juan Luis Gómez Jardón, priista que entró a ocupar el lugar que se había acordado fuera para Achar. De esta manera, PRI, PAN y PRD revalidaron la firme alianza que han mantenido desde que acordaron eliminar del reparto de comisiones a Morena, el partido mayoritario en el DF, lo que implica ignorar la voluntad ciudadana.
Se supone que las comisiones de la ALDF gozan de autonomía, pero en este caso, después de adoptado un consenso a favor de ciertos aspirantes, la decisión se modificó sin esgrimir argumento alguno. Desde luego, las normas permiten una modificación, pero en este caso fue sin discusión previa y sin exponer razones.
Más grave es que el empleo insistente del término “judío” y la expresión despectiva “pinche judío” se usen para cerrarle el paso a una persona calificada para un cargo, así sea honorario. Por supuesto, el diputado Jorge Romero negó después que se hubiera expresado de esa manera y el líder de su partido, el PAN, salió en defensa de Romero, lo que no es extraño si recordamos que en la fundación del PAN confluyeron notorios propagandistas de los gobiernos nazifascistas de Europa.
Lo cierto es que hay testimonios de que Romero es aficionado a las marchas hitlerianas y los saludos nazis. Igualmente, se le señala como cabeza –le dicen “führer” o “patrón”– de un grupo furiosamente misógino llamado Los Ocean, mismo que tiene ritos de iniciación en los que participan sólo hombres en parejas que saludan a su jefe con el brazo derecho extendido al frente, lo que por supuesto también va a negar Romero Herrera.
El tipo es un mentiroso contumaz. Durante varios años se ostentó como “licenciado” por la Escuela Libre de Derecho, pero Libre del Sur, una publicación de internet, demostró que no se había titulado, por lo que el funcionario primero acusó a ese órgano de “desinformar”, pese a que el ahora diputado no figura en las listas de graduados. Para todos los efectos, no es más que un destripado, lo que ha tenido que aceptar, pues ahora sólo dice que estudió en la Libre, sin mayor precisión.
De acuerdo con Edgar González Ruiz, riguroso conocedor de la ultraderecha, a su paso por la delegación Benito Juárez (el Benemérito se ha de haber retorcido en su tumba ante tan nefasta ironía) se mencionó con insistencia que Romero cobraba cuotas ilegales a restauranteros, dueños de otros negocios y vendedores ambulantes. Igualmente se habla de que recibía pagos en efectivo o en especie por autorizar la construcción de edificios en zonas saturadas, lo que quizá pueda confirmarse por el absurdo permiso para la construcción de un torre de 50 pisos en el pueblo de Xoco, obra que la protesta popular detuvo.
También se recuerda que Rafael Medina y Sergio Eguren, un par de porros al servicio de Romero, entonces jefe delegacional, durante dos meses estuvieron presos en Brasil por agredir salvaje y cobardemente a una pareja durante la Copa del Mundo de Brasil de 2014.
En internet, SDP Noticias informó de audios en los cuales Romero Herrera y sus amigotes insultan a mujeres y profieren expresiones homofóbicas y racistas. Más grave es la denuncia hecha por Anonymus, según la cual el ahora diputado tiene una relación de negocios inmobiliarios con Miguel Ángel Yunes Linares y –¡asómbrese!– con Miguel Ángel Mancera.
Por lo menos una cercana amistad sí existe entre Mancera y el antisemita, pues en 2013 el jefe del gobierno capitalino fue uno de los invitados de honor a la boda de Romero, a la que también fueron Mauricio Tabe, compinche de Romero; Adrián Rubalcava, priista que como delegado en Cuajimalpa contaba con un nutrido grupo de golpeadores; el perredista Hugo Romo, de ingrata memoria en Miguel Hidalgo, y el sinuoso Héctor Serrano, operador político de Mancera y cabeza de la fracasada campaña electoral del PRD en 2015. ¿Coincidencias ideológicas?