EL-SUR

Jueves 25 de Abril de 2024

Guerrero, México

Opinión

Si el voto del pueblo me favorece…

Anituy Rebolledo Ayerdi

Mayo 20, 2021

 

(Tercera parte y última)

Anituy Rebolledo Ayerdi

Lamentamos profundamente el deceso de nuestro querido amigo Amín Zarur Ménez, alcalde de Acapulco (1981-1983). D.E.P. Nuestra solidaridad para familiares y amigos.

Pueblo globero

Basilio Bache Valencia fue un pícaro de siete suelas nacido en Tecpan de Galeana, quien como el célebre Martín Garatuza, usó mil rostros para engatusar incautos y también a listos. Durante sus correrías usurpará lo mismo el uniforme de general que la ropa talar de un obispo. Se hará pasar como político, ingeniero urbanista, diplomático, periodista e incluso mago.
Pronunciado un día un discurso en una plazuela pueblerina, aspirando entonces a una diputación, El Bache será interrumpido en el clímax de su fogosa oratoria. Ello cuando su auditorio le dé la espalda para seguir el itinerario de una docena de globos de gas, escapados de las manos del vendedor. La algarabía de los niños, que hacían numerosa la reunión, será ruidosa al emprender la persecución de aquellas esferas de colores. Entonces, convencido de que ya nadie lo atiende, el orador, notoriamente encabronado, lanza un sonoro: ¡Pinche pueblo globero!
La misma reacción pero en versión histórica e intelectual se adjudica al maestro José Vasconcelos. Habría ocurrido en la Alameda Central de la Ciudad de México, él como candidato presidencial. Ora que la airada calificación de “pueblo globero” se seguirá escuchando, incluso hasta nuestros días, destinada a auditorios distraídos sea por globos o por el rotundo derriere de alguna dama de no malos bigotes. Con otra, los globos sueltos suelen ser armas efectivas de políticos para romper mítines de opositores.

La auscultación priista

Líder nacional del PRI, el tabasqueño Carlos Albero Madrazo decide que para la selección de candidatos a cargos de elección popular, el partido realizará auscultaciones de “la periferia al centro”.
El notable epigramista Pancho Liguori, no se medirá:

En el jarocho parlar
una metáfora encuentro:
las nalgas acariciar;
luego apuntar
¡y pa’ dentro!
Eso se llama auscultar
de la periferia al centro.

Diputado al agua

–¡Señor presidente, señor presidente –interrumpe el secretario particular del primer magistrado de la Nación– ¡hay problemas en Acapulco! El vicealmirante Gabriel Lagos Beltrán, comandante de la Octava Zona Naval del puerto, exige la comandancia Nacional de la Armada de México (luego Secretaría de Marina), prometida por usted en campaña, señor. ¡¿Qué hacemos, señor?!
–¡No me acuerdo, pero si sabe manejar, que le den un barco y ya! –responde El Supremo ocupado en una llamada telefónica calentona.
–No creo, señor, que acepte el yate Sea Cloud que es lo único que tenemos disponible en Acapulco. ¡Se trata de un vicealmirante, señor!
–¡Entonces que lo hagan diputado federal y ya, carajo, déjame de molestar!
Y así se hará. El vicealmirante Gabriel Lagos Beltrán es nombrado candidato del PRI a diputado federal por un distrito de Acapulco, para proceso electoral del 2 de julio de 1961. Vestido de civil, irreconocible, inicia su campaña por la Costa Grande.
En Atoyac de Álvarez el marino disimula como buen Popeye el nerviosismo que lo engarrota al pronunciar su primer discurso tierra adentro. Abre:
–¡Hermoso y querido pueblo de Tecpan de Galeana!
El lapsus no quedará en un murmullo sordo y prolongado, los rostros de asombro, la risitas burlonas e incluso las francas carcajadas. Y una voz tan potente como anónima que ubicará geográficamente al náufrago:
–¡Estás en el heroico pueblo de Atoyac de Álvarez; usa tu telescopio, viejo hueco!”.
La dirigencia priista en torno al marino, sorprendida y francamente descontrolada, arropa a su candidato y algo le aconseja para reparar el entuerto. Luego vuelve al micrófono.
–Como digo hermoso y valiente pueblo heroico de Tecpan de Galeana, puedo decir pueblo hermoso y heroico de Atoyac de Alvarez; pueblo hermoso y heroico de San Jerónimo de Juárez ; pueblo hermoso y heroico de Petatlán; pueblo hermoso y heroico de Zihuatanejo; pueblo hermoso y heroico de La Unión; pueblos heroicos y hermosos todos que se engarzan para formar esta histórica, rica y hermosa región de la Costa Grande…
La misma voz anónima no le permitirá continuar su perorata:
–¡Además de hueco, viejo pendejo! –esta vez se escucha lejana, como si subiera el primer escalón de la sierra de Atoyac.
Lagos Beltrán compartirá escaños con Salvador Castro Villalpando, Simón Guevara y con el senador Caritino Maldonado y Carlos Román Celis.

El nopal y el buey

Hay conmoción en el pueblo costeño porque un enorme nopal ha surgido de la noche a la mañana en la cúpula de la parroquia de la Virgen de Los Remedios. Escuece el dictamen del nuevo alcalde en el sentido de que estaría en riesgo la integridad del inmueble.
La solución al gravísimo problema queda por supuesto en manos del propio señor presidente municipal, asesorado por su compadre el jefe de Obras Públicas. A este le apodan El Capichocho porque, como el pájaro de ese nombre, ha construido su casita con puros objetos robados. A los pocos días, ambos presentarán mediante una maqueta la solución al problema. Consiste en un complicado andamiaje de madera que parte del piso y se eleva hasta la cúpula del templo. Se anticipa que la obra será cargada al Ramo 69, de “gastos eróticos”, detallándose a los pobladores:
–¡Por esta rampa se subirá un buey a la cúpula de la iglesia y allá quedará amarrado hasta que se coma todo el nopal!
–¿Y quién limpiará las miadas y las cagadas del toro en la cúpula de la casa de nuestra Santa Patrona? –pregunta con vozarrón masculino la representante de las beatas del templo que han seguido los trabajos día y noche.

Renato Leduc

Renato Leduc, periodista, poeta, epigramista, compositor y bohemio irreverente, logró con su ironía, su ingenio y su crítica el reconocimiento de la cultura de la cantina.

El señor diputado

Con la boca reseca reseca
y el cabello erizado erizado
corretea de la seca a la Meca
el presunto señor diputado

Trasudando sufragio efectivo
caga sangre el señor diputado
al pensar que pudiera
algún vivo comerle el mandado

Ya en la paz del Congreso descansa
triunfador, el señor diputado
bien repletos el bolsillo y la panza
y en la boca fruncida un candado.

Favorecido con un solo voto

El telegrafista de Acapulco Jesús Chucho Muñoz Vergara, hermano de El Amigo Víctor, citado en la entrega anterior, se entera antes que nadie sobre la amenaza de un ciclón sobre Acapulco. Se le anticipa como devastador. Enterado por su misma condición de que la esposa del presidente Lázaro Cárdenas y su hijo Cuauhtémoc vacacionan en el puerto, Muñoz no lo piensa dos veces y se lanza a alertarlos. Doña Amalia Solórzano y su pequeño hijo no se hospedan en ningún hotel, lo hacen en el campamento de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas, SCOP, localizado en la playa Manzanillo. Y hasta allí llega al telegrafista , agitado y ya empapado.
El personal del Estado Mayor Presidencial que custodia a la familia Cárdenas Solórzano actuará rápidamente para ponerla a la salvo . Lo lograrán antes de que el fenómeno tome cuerpo y haga volar por los aires aquellas frágiles instalaciones de madera. Ya segura, con su hijo durmiendo, la primera dama se volcará en manifestaciones de gratitud para el telegrafista.
Pero no todo quedará en el abrazo de gratitud. Días más tarde, Chucho Muñoz es convocado a la residencia oficial de Los Pinos. Lo atiende doña Amalia Solórzano de Cárdenas quien le explica que lo ha llamado porque el señor presidente deseaba saludarlo personalmente, pero que ha tenido que salir fuera de la ciudad.
–No obstante, el señor general me ha encargado trasmitirle su emocionado agradecimiento y nuestro deseo de materializarlo. Es por ello, señor Muñoz, que me atrevo a preguntarle su más caro deseo en este momento y que no puede alcanzar por sus propios medios. ¿Acaso un ascenso en Telégrafos? ¿Tiene casa propia? ¿Becas para los hijos? ¡Con confianza, don Jesús, con confianza!
–Yo, señora de todos mis respetos –se atreve finalmente luego de un largo silencio–, estoy convencido de que sólo cumplí con un deber elemental, por lo que me siento pagado con el agradecimiento del señor presidente, el de usted y el del pequeño… Ahora que, si usted insiste, señora, quisiera comentarle un sueño de toda la vida… el sueño de llegar a la Cámara de Diputados. Ser diputado federal, señora, para hacer algo por mi pueblo…
Y el sueño de Jesús Muñoz Vergara se hará pronto realidad. El 1 de septiembre de 1940 estará rindiendo protesta como diputado al Congreso de la Unión, integrado desde luego al grupo de legisladores por Guerrero: Rubén Figueroa Figueroa, Amadeo Meléndez, Alfredo Córdova Lara, Antonio Molina Jiménez y Mario Lasso.
–¡No sean cabrones, díganme señor diputado y no Chucho, el telegrafista! –pedirá Muñoz Vergara a sus amigos cuando departa con ellos en las cantinas del puerto.

Sentencias

* Las elecciones son el cheque en blanco que todos firman gustosos para aceptar la mentira y el saqueo.

* Un político rico y exitoso es a menudo simplemente alguien que engañó a más votantes que otro también mentiroso pero pobre.

* En lugar de revelar la voluntad del pueblo, los resultados de las elecciones son a menudo sólo una instantánea de un día de ilusiones pasajeras de las masas.