EL-SUR

Viernes 23 de Mayo de 2025

Guerrero, México

Opinión

SOS de la Orquesta Carlos Chávez

Humberto Musacchio

Enero 27, 2025

Para Margo Glantz en sus primeros 95.

SOS de la Orquesta Carlos Chávez

La orquesta Carlos Chávez es, obviamente, un conjunto artístico, pero es también una escuela que depende del Sistema Nacional de Fomento Musical que dirige Roberto Rentería Yrene. Los integrantes, seleccionados entre los jóvenes músicos más talentosos, reciben una beca mensual y, para no perderla y seguir en la institución, deben mantener un promedio mínimo de 8.5 de calificación. Lamentablemente, la escuela nunca ha contado con una sede fija y debidamente acondicionada. Actualmente sólo dispone de espacios insuficientes y no apropiados en el Complejo Cultural Los Pinos, por lo cual los alumnos se ven obligados a ensayar al aire libre, lo que afecta el aprendizaje, el estado de los instrumentos, la salud de los ejecutantes e incluso su seguridad. En el mejor de los casos, logran acomodarse en otras escuelas o en la casa de sus maestros, lo que de ninguna manera resulta apropiado. Otro aspecto que requiere de urgente solución es el pago irregular a los profesores, lo que afecta sus derechos laborales y la calidad académica. Los muchachos exigen también que se les facilite la compostura de sus instrumentos, pues los programas Tengo un Sueño y OSIM disponen de especialistas. Asimismo, piden que no se modifiquen los horarios en forma precipitada y confusa. Esperan los jóvenes que las autoridades culturales atiendan sus peticiones.

Leer en Libertad: 15 años

Se dice pronto, pero la Brigada para Leer en Libertad cumple ya 15 años de una labor encomiable, que es llevar el libro a los grupos sociales marginados de la cultura y sus beneficios. El proyecto fue ideado por Paco Ignacio Taibo II y Paloma Saiz, la que sigue al frente. Son ya tres lustros de conseguir libros baratos para venderlos a precios irrisorios, de regalar volúmenes que recibe la Brigada en forma de donaciones y de obsequiar obras realizadas por escritores profesionales que renuncian a recibir sus derechos de autor. Los brigadistas organizan ferias del libro y en ellas ofrecen conferencias, lecturas y mesas redondas de autores conocidos y reconocidos. En muchas barriadas se han organizado grupos que demandan contar con bibliotecas accesibles. La Brigada les regala enciclopedias, obras literarias y de otro orden con el fin de incentivar la lectura y responder a la necesidad de contar con una aceptable variedad de obras y autores. El resultado ha sido poner en contacto con el libro a miles de personas y satisfacer de este modo la necesidad de acceder a la cultura. Y todo es fruto de ese equipo entusiasta, incansable y hasta heroico que encabeza Paloma Saiz. ¡Grandioso!

Expoventa de Ernesto Azcárate

Del 5 al 9 de febrero, para aquellos que no quieran gastar mil 900 pesos para acceder al pabellón de Zona Maco, hay una oferta nutrida de cosas interesantes de arte y diseño. Destaca la exposición en el estudio de Ernesto Azcárate (Eje Central # 423, Col. Narvarte Poniente). Azcárate, quien vende principalmente en California, trabaja con madera, bronce y piedra para crear piezas escultóricas. Además de las sillas, mesas y espejos de Azcárate, los interesados podrán ver también la obra de otros diseñadores que van abriéndose rápido camino en este mercado, como Aldo Álvarez Tostado, Ángela Damman, Popdots y Peca. Y no sólo se trata de un festín visual, del 6 al 8 de febrero, el recinto de Eje Central contará con piezas sonoras de Manuel Rocha, Mike Sandoval y Quique Rangel, el músico de Café Tacuba.

Ensayo sobre la revista Así

El próximo miércoles, de 11 a 13 horas, en el auditorio del Instituto de Investigaciones Históricas de la UNAM, Edwin Barrera, Gregorio Ortega y la querida Malena Mijares presentan un libro de Antonio Sierra de largo pero elocuente título: 40 entrevistas. Memoria e historia del periodismo mexicano a través de la revista Así 1940-1945 (Ed. UNAM, 2024). La lista de reporteros la encabeza Gregorio Ortega Hernández, padre de su homónimo, también periodista y ahora presentador del libro, quien cita a su progenitor, quien solía decir: “si el entrevistado te ve tomar nota, si lo colocas frente a un micrófono, ya no dirá lo que tiene ganas de declarar, al menos nunca con las palabras que en un principio consideró las adecuadas. Yo no tomo nota, no uso grabadora, y nunca nadie me desmintió”. Los tiempos cambian y las técnicas evolucionan, pero se trata de una muy buena y necesaria lección.

100 años de Ernesto Cardenal

Antes de abrazar la carrera sacerdotal, el poeta Ernesto Cardenal estudió en la Facultad de Filosofía Letras de la UNAM, que entonces tenía como sede el bello edificio de Mascarones. El nicaragüense era parte de la tertulia que sesionaba en el café de la escuela, con Tito Monterroso, Rosario Castellanos, Wilberto Cantón y otras futuras celebridades. Cardenal solía asistir en compañía de Conchita Mantecón, chica bellísima, de “pelo muy largo muy rubio” y grandes ojos azules, pero terminó el romance y un día ella se acercó a la mesa y le dijo a Cardenal: “¡Adiós, enemigo!”. Todos reímos, escribió el poeta, “y yo reí derretido de amor, orgulloso de ella y enternecido. Pero el pasado no volvió…”.