EL-SUR

Martes 23 de Abril de 2024

Guerrero, México

Opinión

Taller en Tlapa

Héctor Manuel Popoca Boone

Abril 15, 2017

Estuvimos en la región de la Montaña dando un taller de capacitación política. Los asistentes fueron dirigentes medios de Movimiento Ciudadano. Llegaron de ocho municipios de la región. Convenimos que en la actualidad el voto es de quien lo trabaja o de quien lo compra. Razonaron sobre una democracia mercantilizada donde las conveniencias casi siempre pesan más que las convicciones. Las primeras alimentadas por el dinero, las dádivas, concesiones y apoyos de todo tipo. Las segundas nutridas de principios, valores y una agenda comprometida con la ciudadanía.
El voto de convicción o el de identidad partidaria es el que toma en cuenta los ideales corroborados con la congruencia en las acciones. Junto con un programa de gobierno atractivo, realista y reivindicador del pueblo. Adicionada la buena fama, el arraigo popular y la presencia territorial que tenga el candidato o candidata.
De ganar el candidato que compró el voto, amoldará su gobierno a quién adineró su campaña y candidatura. De ahí lo entreverado del poder público con los intereses de los grandes empresarios, poderosos politicastros o temibles malandros. En cambio, el candidato que obtiene el voto por convencimiento ciudadano orientará su gobierno a las demandas más ingentes de la gente. Acudirá al respaldo popular para contrarrestar los intereses creados desde antaño por sucesivos gobiernos corruptos e ineptos.
Con todas sus deformaciones a superar es la democracia electoral la única vía para acceder al poder por la vía pacífica. Es el cauce para tener gobiernos de alternancia sin derramamiento de sangre. Sobre todo, cuando los que administran la cosa pública no satisfacen los anhelos del pueblo. Importa que la ciudadanía tome consciencia de ejercer su voto soberanamente para refrendar la democracia como sistema de gobierno. Vigilar que no intenten comprárselo, desvirtuárselo o robárselo. Porque ejercer el voto en un marco de corrupción e impunidad institucional deriva manipulación y fraude electoral de los que detentan el poder. Hoy lo constatamos en el Estado de México. Ahí los gobierno federal y estatal están dispuestos a todo con tal de no perder las elecciones. Prostituyendo al electorado en lugar de enaltecer su participación cívica.
Guerrero está mal porque durante mucho tiempo ha tenido malos gobiernos, en términos generales. Los que llegan solapan las pillerías de los que se van para concitar después reciprocidad. No hay voluntad de llamar a cuentas. Ni perseguir al delincuente de cuello blanco. Mucho menos que devuelva lo que robó. Eso es impunidad. O sea, alienta más corrupción cimentadora de los siguientes gobiernos. “Así no sacaremos al buey de la barranca y permaneceremos como bueyes de los vivales que usan y disfrutan el poder para beneficio propio y de sus grupos”. Por eso no progresamos. Por eso no avanzamos socialmente. Por eso no tenemos bienestar familiar, ni seguridad pública ni privada. Todo es simulación, farsa y mentira gubernamental. Es demagogia que trata de ocultar nuestra pobreza moral y material.
En el taller analizamos las clasificaciones del voto electoral. Como lo es el voto por partido. Por la persona. Por el dinero o la dádiva. Por conveniencia. Por coalición política. El voto cruzado. El voto por prerrogativas. El voto independiente. El voto de castigo. El voto útil y el nulo.
Sabedores los participantes que no acudirán a comprar el voto ciudadano Tendrán que trabajar mucho y con constancia todo el tiempo legalmente permitido. Casa por casa. Para convencer a la población de que son diferentes a los partidos políticos ya existentes. Que son honestos, progresistas, transparentes y eficaces. Reivindicadores y comprometidos con las causas populares.
En las próximas elecciones, los electores manifestarán su irritación, decepción o repudio hacia el PRI. También se desgranarán muchos votos del PRD porque tampoco escapó del desencanto popular. Alguien tendrá que capturarlos. En el horizonte de Guerrero solo oteamos a Movimiento Ciudadano y Morena.

PD. Las desapariciones forzadas tienen que investigarse y castigar a los culpables no importando los años que hayan pasado. Son crímenes de lesa humanidad. Imprescriptibles.