EL-SUR

Viernes 19 de Abril de 2024

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Opinión

Todo puede suceder en la primera vuelta en Francia

Gaspard Estrada

Abril 12, 2017

A poco menos de dos semanas de la primera vuelta de la elección presidencial en Francia, todo puede suceder. Como lo hemos venido comentando en este espacio desde hace varios meses, esta elección se está caracterizando por su imprevisibilidad, de la misma manera que lo pudimos constatar en el Reino Unido con el Brexit y en Estados Unidos con la elección de Donald Trump en 2016. En primer lugar, el presidente de la República, François Hollande, decidió a principios de diciembre pasado no buscar la reelección, lo cual constituyó un terremoto político. Por su parte, los candidatos de los dos principales partidos políticos del país, Los Republicanos y el Partido Socialista, elegidos mediante el mecanismo de primarias, han estado envueltos en polémicas que les ha hecho perder impulso político, al grado en que la suma de intención de voto de estos candidatos no rebasa el 30%. Este hecho ha propiciado que los candidatos con un discurso “anti-sistema”, es decir Jean-Luc Mélenchon por la extrema izquierda, Emmanuel Macron, por el “extremo centro” (la formulación es del autor de estas líneas), y Marine Le Pen, por la extrema derecha, estén en condiciones reales de llegar a la segunda vuelta electoral, con un desenlace totalmente imprevisible.
Esta campaña electoral ha estado marcada por la desconfianza de los franceses hacia su clase política. La acumulación de revelaciones sobre el manejo turbio de recursos públicos por parte del candidato del partido Los Republicanos, el ex primer ministro François Fillon, ha contribuido a deslegitimar su candidatura. Si bien mantiene una base electoral estable, de alrededor del 20% de los votos en las encuestas de opinión, más de la mitad tienen 65 años y más. En el seno de la población activa, Fillon difícilmente llega al 10% de los votos, lo cual evidencia su dificultad para aumentar su caudal electoral en aras de llegar a la segunda vuelta.
Sin embargo, la existencia de presuntos actos de corrupción también han hecho daño a la candidatura de Marine Le Pen, del partido Frente Nacional. Desde el inicio de la campaña, las encuestas habían ubicado a la candidata de extrema derecha en el primer lugar, con amplias posibilidades de llegar a la segunda vuelta. Hoy en día, la situación no parece tan cómoda. Desde principios de enero, su intención de voto ha ido a la baja, hasta situarse en 24%, en un empate técnico con el candidato independiente Emmanuel Macron. Este último, que esperaba también poder aprovechar los problemas de François Fillon, ha sido incapaz de crecer más allá del 25%. Al tratarse de una figura pública reciente (hasta hace poco menos de tres años, Macron no era conocido por la opinión pública francesa), su imagen no ha sido cristalizada hasta ahora, lo cual se traduce en una baja tasa de adhesión hacia su persona: es decir, su imagen tiene pocos negativos, pero tampoco dispone de muchos puntos positivos. Su principal éxito en el plano de la estrategia electoral reside en su capacidad de atraer un voto útil tanto de electores de izquierda como de centro derecha. Sin embargo, nada dice que el día de la elección, estos mismos electores que declaraban un voto a favor de Macron decidan votar por un candidato de su familia política tradicional, ya sea de izquierda como de derecha.
En las últimas semanas, Jean-Luc Mélenchon ha dado la sorpresa, pasando del quinto lugar al tercero, en empate técnico con François Fillon. Hoy en día las encuestas dicen que se trata del único candidato con una dinámica electoral a la alza, lo que permite suponer, al menos, que Jean-Luc Mélenchon tiene una posibilidad real de llegar a la segunda vuelta de la elección presidencial. Esto ya ha asustado a los mercados financieros, lo cual se ha visto evidenciado por un aumento del riesgo-país de Francia por parte de las agencias calificadoras. Pero hoy en día es casi imposible saber quién disputará a ciencia cierta la segunda vuelta de la elección presidencial.  

* Director Ejecutivo del Observatorio Político de América Latina y el Caribe (OPALC), con sede en París.

Twitter: @Gaspard_Estrada