EL-SUR

Jueves 25 de Abril de 2024

Guerrero, México

Opinión

Todos contra Morena

Arturo Martínez Núñez

Diciembre 08, 2020

Con la suscripción del acuerdo de coalición entre el PRI, el PAN y el PRD para ir aliados en más de 150 distritos electorales federales, se comprueba la vieja hipótesis que se tenía en el sentido de que todos los partidos tradicionales son iguales y solamente buscan perpetuarse en el poder, mantener el status quo, el estado de las cosas, no perder prebendas, y que México siga siendo el país de unos cuantos privilegiados, mal llamados clase política.
El objetivo es uno solo: que Morena no alcance la mayoría simple de 50 por ciento más 1 en la Cámara de Diputados. La idea es detener a toda costa el cambio de régimen que ha emprendido el presidente López Obrador.
Para la construcción de esta mega alianza, que no es sino un refrito del Pacto por México, los partidos tradicionales no tuvieron empacho en hacer a un lado viejos agravios y diferencias históricas, ideológicas y políticas. El único objetivo es tratar de detener la consolidación de la Cuarta Transformación nacional.
Queda claro que el PRIANRD está dispuesto a renunciar a sus principios, a su historia, a su ideología y a sus ideas fundacionales con tal de intentar detener el proceso de cambio.
Sin duda una mega alianza en contra de Morena, Todos Unidos contra Morena, pudiera sonar como un desafío interesante desde el punto de vista electoral; de un lado tendremos a los partidos tradicionales, a los políticos que han hecho del servicio público su modus vivendi y que no quieren terminar de perder sus prerrogativas; y del otro lado al pueblo organizado a través del amplio movimiento que encabeza Morena y su líder Andrés Manuel López Obrador.
Sin caer en excesos, ni en soberbia, que en política es la peor consejera, tengo la convicción de que lejos de sumar, la gran alianza anti natura le habrá de restar votos a los partidos coaligados.
¿Cómo harán para explicarle a un panista de Chihuahua que ha luchado durante toda su vida en contra del PRI, que ahora será su gran aliado? ¿Cómo le explicarán a un perredista de Guerrero que toda la represión en su lucha contra el PRI de nada sirvió porque ahora son sus nuevos aliados? ¿Cómo le explicarán al electorado que un partido de derecha, como el PAN, que está en contra de los derechos de la comunidad LGBTTTI y de los derechos reproductivos de las mujeres, ahora será aliado del PRD, que en sus documentos básicos promueve exactamente lo contrario?
Es tal el miedo y la desesperación de los partidos, de algunos grupos empresariales y de diversos actores políticos que simplemente no entienden que su ciclo ha terminado, que están dispuestos a cualquier cosa con tal de derrotar a Morena en el 2021.
Creo que este experimento será un rotundo fracaso. Para Morena será mucho más sencillo hacer campaña explicándole a la gente que lo que antes era una teoría, hoy es una realidad y que el PRI, el PAN y PRD, tristemente son la misma cosa, representan lo mismo, no tienen ideología definida o más bien están dispuestos a hacerla a un lado, con tal de intentar detener el cambio verdadero.
En un acto de desesperación los partidos tradicionales van a convertir la elección del 2021 en un plebiscito alrededor del Presidente de la República, lo que tanto deseaban evitar con la revocación del mandato que el propio López Obrador propuso para el 2021 y que la oposición prefirió postergar para el 2022.
En el 2021 solo habrá de dos sopas, estar con Morena y el Presidente López Obrador o volver al viejo régimen representado por los partidos tradicionales.
En lo personal, respeto al priísmo de base, a esa poderosa organización que ha sido permanentemente despreciada por los acuerdos cupulares; admiro la lucha de los panistas que durante décadas pregonaron la llamada “brega de eternidades”; a mis ex compañeros del PRD, a los que hasta el día de hoy tienen en usufructo el registro del Partido Comunista Mexicano y que durante décadas fue el partido al servicio del pueblo, les deseo que su encuentro con la realidad no sea tan traumático como al parecer será. A pesar de los pesares a lo largo y ancho de Guerrero quedaban grupos de perredistas de base, fieles a su partido, al partido por el que expusieron su tiempo, su patrimonio, su libertad y su vida a cambio de la lucha democrática. Para todas y todos ellos mi reconocimiento y mi deseo de que reflexionen y se acerquen a Morena en donde estamos ya la mayoría de los que estábamos al momento de la fundación del PRD.
Los ejércitos comienzan a alinearse de cara a la batalla del 21, está claro que dicha batalla se resumirá en un simple dilema: continuar con el proceso de transformación nacional o regresar al viejo régimen que fue derrotado apabullantemente en las urnas en el 2018.