Sigue grave el comandante Camacho Millán; el sábado sufrió un infarto




El fiscal regional de la Procuraduría General de Justicia del Estado, Enrique Gil Mercado, informó que el coordinador de Costa Azul de la Policía Investigadora Ministerial (PIM), Alfredo Camacho Millán, sobrevivió el sábado a un paro cardiaco, pero que sigue delicado de salud.
De acuerdo con algunas fuentes consultadas, los médicos del hospital Magallanes –donde está internado Camacho Millán– no tienen un pronóstico favorable para el policía que fue atacado el jueves por la mañana por sicarios encapuchados, en la encrucijada que forman las avenidas Cuauhtémoc y Farallón de la colonia la Garita, donde murió uno de sus tres escoltas.
Por su parte, fuentes del Ministerio Público del fuero común del sector Garita y de la PIM indicaron que las investigaciones continúan, pero no precisaron ningún dato.
El pasado sábado Gil Mercado explicó que las investigaciones siguen y que esperan los resultados de los peritos.
Los estudios a que se refiere el fiscal, según peritos consultados, son de criminalística de campo que sirven para conocer la mecánica del crimen.
Uno de ellos es el de rodizonato de sodio, que se realiza para saber si el policía asesinado –Hugo Sergio Lara Valle– y los sobrevivientes repelieron la agresión; además, de fotografía forense y dactiloscopía, que sirven para identificar huellas.

No han visto al grupo especial que enviaría Cabeza de Vaca, dicen en la PGR




Aunque durante este fin de semana se observó una intensa movilización de policías federales, estatales y municipales, fuentes de la Procuraduría General de la República (PGR) aseguraron que, hasta ayer, no habían visto a ningún agente del grupo especial que el procurador general de la República, Daniel Cabeza de Vaca, presuntamente enviaría a Acapulco para reforzar la lucha contra las organizaciones criminales que se disputan la plaza.
Luego del ataque en contra del coordinador de la Policía Investigadora Ministerial, Alfredo Camacho Millán, en el que murió una de sus tres escoltas, este fin de semana se intensificaron las operaciones de policías de los tres niveles que participan en el programa México Seguro.
Como ha ocurrido en los días posteriores a otros hechos de violencia similares, agentes de las policías Ministerial, Preventiva Municipal, Preventiva del Estado, Federal Preventiva, y de las Fuerzas Federales de Apoyo –los menos– el sábado instalaron retenes en varios puntos de la ciudad, como en la avenida Cuauhtémoc, frente a la tienda Gigante, donde fueron detenidos varios camiones urbanos con el objetivo de revisar a sus pasajeros, principalmente a los hombres.
Por otro lado, el pasado viernes, en una nota publicada por el periódico de circulación nacional El Universal, firmada por los reporteros Silvia Otero y Alberto Magallón, se informó que –durante un gira de trabajo por Colima– Daniel Cabeza de Vaca anunció el envío a Acapulco de un grupo policiaco especial, para reforzar el combate en contra de las organizaciones criminales que se disputan esta plaza.
En la nota se indica que Cabeza de Vaca precisó que: “En el caso concreto de los hechos del puerto de Acapulco hemos enviado un grupo especial que va a tener que hacer acciones más definitivas y más contundentes”.
Además del anuncio, Cabeza de Vaca comentó que “es muy importante que las autoridades locales nos ayuden a revisar a sus policías, que realmente veamos una capacitación, una preparación, una depuración, una investigación, para ver realmente qué grado hay de involucramiento. Es así como vamos a poder combatir este fenómeno todos en conjunto”.
Según la nota, el grupo estaría integrado por policías federales y agentes ministeriales públicos.

Nada sobre el atentado a los turistas en Zihuatanejo ni al jefe policiaco: Chavarría

 

El secretario general de Gobierno, Armando Chavarría Barrera, dijo ayer que todavía “no tiene conclusiones” para informar sobre el móvil del ataque con armas de alto poder que sufrió un grupo de ocho jóvenes turistas en Zihuatanejo la madrugada del viernes.
Indicó que tampoco tenía datos sobre el caso del comandante de la Policía Investigadora Ministerial (PIM), Alfredo Camacho Millán, –baleado el jueves 25 en La Garita en Acapulco, y muerto en ese lugar su escolta Sergio Lara Valle. “Se están haciendo las investigaciones, sería adelantado opinar sin elementos”, dijo el funcionario.
Más adelante respondió a los empresarios de Acapulco que la actual administración sí está haciendo lo que le toca pero que “ha habido varios acontecimientos que escapan de las manos del gobierno”.
La madrugada del viernes 26, ocho jóvenes que salían de un bar en Zihuatanejo fueron atacados con armas AK-47; tres de ellos resultaron heridos. Un día antes, en La Garita, en Acapulco fue baleado el jefe policiaco Camacho Millán, y uno de sus escoltas murió en el ataque.
Ante esos hechos, el jueves pasado empresarios del puerto, en conferencia de prensa señalaron que el gobierno estaba fallando en su obligación de brindar seguridad y dijeron que ninguno de los hechos delictivos se ha resuelto.
Entrevistado por teléfono al respecto, Chavarría contestó que respeta la opinión de los empresarios, “tienen toda la razón cuando expresan su preocupación; es legítima, pero quiero decirles que el gobierno está haciendo su máximo esfuerzo para garantizar la seguridad pública, no sólo a ellos, sino en todo el estado”.
Indicó que “ha habido acontecimientos, casos, que han sucedido en Acapulco y que reconocemos que se nos han escapado de las manos; son circunstancias que se nos han salido de control”.
Más tarde y sin precisar cuáles, el funcionario respondió que sí se han “resuelto varios casos, casos que han estado relacionados con los atentados en Acapulco. Lo que creo es que la Procuraduría General de Justicia en el estado debe hacer un esfuerzo para que fluya la información”.
Con relación a que los empresarios replicaron el sábado a Torreblanca, que ellos sí están pagando impuestos, pero que es el gobierno quien no está cumpliendo con su papel, Chavarría señaló que las declaraciones del mandatario se dieron “en otro contexto, no fue una respuesta a reclamos que hicieron los empresarios”. “Hubo una confusión porque no es esta apelación a la responsabilidad fiscal, se refirió a todos los sectores en general”.
A pegunta del atentado de jóvenes turistas en Zihuatanejo, el funcionario contestó que “es prematuro hacer conjeturas” de que pudiera estar vinculado a la delincuencia organizada.
Afirmó que la única información que conoce es lo que se ha dado a conocer en los medios de comunicación por parte de la PGJE; “pero como todavía no hay conclusiones de las investigaciones, pues no podemos adelantar juicios. Como se atravesó el fin de semana, todavía no tengo los datos actualizados, yo creo que hasta mañana (hoy)”.
Dijo que tampoco contaba con datos exactos para hablar sobre el posible móvil del atentado que sufrió Camacho Millán; “es lamentable lo que pasó, y más que haya perdido la vida su escolta (Sergio Lara Valle), pero no tengo elementos para adelantar, también estamos en espera de los resultados de la investigación”.
Chavarría indicó que ante esos hechos, lo que sigue para el gobierno es continuar con las acciones y programas que hasta ahora se aplican. Señaló que posiblemente se pudiera analizar en días próximos, si se da un giro a las acciones que ha ejecutado la actual administración, en materia de seguridad pública.

Halla la PIM un vehículo que robaron los agresores de Camacho Millán




La Policía Investigadora Ministerial (PIM) encontró este viernes por la mañana un vehículo Honda Accord 2006 que robaron los sicarios que atacaron al comandante Alfredo Camacho Millán, el cual abandonaron en el poblado El Quemado.
El fiscal regional de la Procuraduría General de Justicia del Estado, Enrique Gil Mercado, dijo que “no se sabe” si realmente el auto gris Accord 2006 fue robado por los sicarios.
El jueves, a una hora en que padres de familia van a dejar a sus hijo a los colegios de la colonia Garita, sicarios atacaron a Alfredo Camacho, a quien dejaron mal herido, y asesinaron al policía Hugo Sergio Lara Valle. En la balacera hubo dos agentes más heridos, así como a dos personas que pasaban por la zona.
Gil Mercado indicó que estaban en espera de que el propietario del auto, el abogado Ezequiel Larumbre Radilla, acudiera a la Agencia del Ministerio Público de recuperación de vehículos y rindiera su declaración.
Dijo que continúan las investigaciones del ataque al coordinador de zona de la PIM en el sector Costa Azul, Alfredo Camacho Millán, y a tres de sus escoltas, donde uno murió.
Señaló que por el caso ya declararon cinco personas, quienes mencionan que los sicarios escaparon en un Jetta gris y en un Fiesta rojo, y no descartó que fueran robados.
Gile Mercado informó que el estado de salud de Camacho Millán era delicado, contrario a lo dicho por el coordinador regional de la PIM, Emiliano Portillo Lagunas, quien declaró que el agente se recuperaba después de salir del área de terapia intensiva.
Gil Mercado explicó que la muerte de Hugo Sergio fue porque recibió un impacto en la cabeza.
El auto Accord decomisado por los policías fue trasladado al estacionamiento de la Fiscalía Regional de la PGJE. En el medallón tiene pegado un permiso a nombre de Ezequiel Larumbe, carece de placas y en su interior había dos mochilas, una para niña, así como otros útiles escolares.
Gil Mercado también negó que en la averiguación previa esté la declaración de trabajadores del Servicio Médico Forense en cuanto a que al trabajador Esteban Reza Reyes le quisieron quitar la camioneta para huir, pero que no se llevó a cabo porque el llavero traía muchas llaves.

Policía con cursos en el FBI y la DEA, Camacho ha sido acusado de violaciones a los derechos humanos




El 12 de diciembre de 2002, el entonces procurador general de Justicia Jesús Ramírez Guerrero –en el gobierno de René Juárez Cisneros– designó a Alfredo Camacho Millán como comandante regional de esa corporación en Acapulco, en sustitución de Arnulfo Jacobo Luviano.
Policía de carrera con cursos del FBI en tácticas de negociación de rehenes, y cursos de la DEA en investigaciones criminales, Camacho Millán ha sido acusado de violaciones a los derechos humanos al menos en un par de ocasiones.
A finales de 2000, la Comisión Estatal de Defensa de Derechos Humanos (Codehum) emitió dos recomendaciones en contra del comandante de la Policía Investigadora Ministerial (PIM) Alfredo Camacho Millán, junto con otros ocho jefes judiciales, en las que se le señala como uno de los involucrados en la desaparición forzada de José Rodríguez Román, a quien la policía al parecer arrestó como presunto sospecho del secuestro del empresario Raúl Astudillo, en Tixtla, en mayo de 2000.
El 16 abril de 2004, el presidente de la Comisión de Derechos Humanos Mahatma Gandhi, Francisco Díaz González, denunció que policías ministeriales encabezados por su coordinador regional, Alfredo Camacho Millán, violaron los derechos humanos de vecinos de San José Mogollón –municipio de Coyuca de Benítez–, después de la detención de cuatro presuntos secuestradores.
Según el comisario municipal de ese poblado, Miguel Ocampo Balanzar, los policías llegaron en la madrugada, encañonaron a la gente y entraron a las casas de manera arbitraria ante la presencia de mujeres y niños, para lograr la detención de cuatro sospechosos del secuestro del empresario Felipe Galeana Talavera ocurrido el 15 de diciembre de 2003, y a quienes la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) los relacionó con grupos armados.
Por los mismos hechos, los afectados presentaron una queja por privación ilegal de la libertad de Andrés de Jesús y Francisco de Jesús, así como por allanamiento de morada y amenazas ante la Codehum. (Redacción).

“Nos irrita ser otra vez parte de la nota roja”, dice el gobernador sobre el ataque

 

El gobernador Zeferino Torreblanca Galindo lamentó el ataque al comandante de la Policía Investigadora Ministerial (PIM) Alfredo Camacho Millán, y opinó que, por el modus operandi, parece que fue orquestado por el crimen organizado.
“Nos molesta, nos irrita ser otra vez parte de la nota roja, sobre todo cuando se trata de Acapulco que tiene tanta relevancia a nivel nacional”, señaló, y confió en que el asesinato del delegado de Transporte Salvador Melesio Montiel y la agresión de ayer “sean coincidencias”, y no mensajes en contra de su gobierno.
Por otro lado, coincidió con el alcalde Félix Salgado Macedonio al responder a los empresarios que exigieron a los gobiernos municipal de Acapulco, estatal y federal, resultados concretos en el combate al crimen: “Ojalá siguieran ayudando cumpliendo con el pago de impuestos oportuno”.
En la conferencia de prensa que dio luego del convenio de programa de trabajo para la difusión y prevención de delitos electorales con la titular de la Fepade María de los Ángeles Fromow, el gobernador reveló que Camacho Millán está a cargo de la investigación del crimen del empresario Alexis Iglesias, ocurrido el año pasado.
A pregunta expresa, acerca de si cree que el atentado está vinculado con el crimen organizado, Zeferino Torreblanca respondió que no lo sabe, pero que “por sentido común también hay que ver el modus operandis y saber que sí tiene que ver, las armas que utilizan. Sin ser yo fiscal, sin ser Ministerio Público, sin tener vocación, por lógica” puede tratarse de grupos de la delincuencia organizada.
–¿El asesinato de Salvador Melesio y el ataque al comandante son mensajes del crimen organizado a su gobierno? –le preguntaron.
–Yo espero que sean coincidencias, que no se trate de la misma línea de investigación, yo esperaría que fueran dos asuntos distintos –y comentó que no se debe mandar esa lectura para no generar condiciones de zozobra en la población que vive en esa zona (la colonia la Laja).
“Me parecería temerario poder afirmar que se trata de asuntos deliberados, premeditados y que se circunscriben sólo a esa área geográfica del municipio”.
Más adelante pidió a los guerrerenses que tengan la certeza de que su gobierno hace todos los esfuerzos a su alcance para prevenir cualquier situación lamentable.
Por otro lado, el gobernador reiteró que busca coordinarse con el gobierno federal para fortalecer las acciones del programa México Seguro, pero subrayó que una de las limitantes es la cantidad de agentes de la PFP que están en otros estados como Michoacán, lo que retrasa las acciones de este programa en Guerrero.
Un reportero le preguntó sobre un escrito anónimo que presuntos policías preventivos de Acapulco enviaron a dependencias del gobierno y a periódicos locales, en el que se hacen señalamientos de corrupción en las corporaciones policiacas.
En este sentido, el gobernador reconoció que hay policías que se corrompen y están vinculados al crimen en sus diferentes manifestaciones, y que por eso se está depurando al personal, pero aclaró que en un año es difícil lograr una reestructuración total. Informó que ha pedido al procurador Eduardo Murueta acelerar el reclutamiento de nuevos policías, pero “éso no se puede meter al microondas”.
Por último, Zeferino Torreblanca coincidió con Félix Salgado al responder a los empresarios que dieron un ultimátum de 72 horas para que los gobiernos municipal de Acapulco, estatal y federal, presenten un plan de seguridad: “Ojalá siguieran ayudando cumpliendo con el pago de impuestos oportuno, que contribuyeran con el Ayuntamiento, que pagaran en tiempo y forma, y que nosotros podamos cumplir con la tarea de realizar acciones puntuales”, pero subrayó que está dispuesto a dialogar las veces que sean necesarias para buscar corresponsabilidad y cauces de colaboración.

Atacan sicarios al comandante de la PIM Camacho Millán en la Garita de Acapulco



Presuntos sicarios encapuchados y armados con fusiles de asalto AK-47 atacaron ayer al comandante de la Policía Investigadora Ministerial (PIM), Alfredo Camacho Millán, a quien dejaron herido con tres balazos, y muerto al agente de esa corporación, Hugo Sergio Lara Valle, que lo acompañaba cuando transitaban por la colonia Garita, en Acapulco.
Asimismo, de menos gravedad, hubo otros dos policías lesionados y dos parroquianos que pasaban cerca de la balacera, en la que los de la PIM repelieron la agresión.
La versión oficial indicó que el ataque –sucedido cuando hay más tránsito pues los padres de familia van a dejar a sus hijos a las escuelas– se situó en la encrucijada que forman las avenidas Cuauhtémoc y Farallón, donde se ubican los semáforos, minutos después de que el coordinador de zona, Camacho Millán, dejó a sus dos hijas en el colegio Zumárraga y que para ello iba acompañado del agente ultimado y los dos que fueron heridos.
Las causas de la agresión aún no las tenía establecidas la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE). Empero el procurador Eduardo Murueta Urrutia aclaró que enmarca la ola de violencia que se vive todo el país ocasionada por la “delincuencia organizada”.
Otras hipótesis de la agresión las dio a conocer el coordinador regional de la misma corporación en el municipio, Emiliano Portillo Lagunas, quien explicó que a Camacho Millán se le encargó la investigación de la ejecución del empresario y ex director de la OCVA, Alexis Iglesias Aragón –ocurrida el 25 de enero del año pasado– y el homicidio de la hermana de la ex alcaldesa priísta Ana María Castilleja Mendienta, Alicia, en marzo.
Portillo no lo dijo pero en círculos policiacos se conocía que también tenía el caso de Melesio Montiel, asesinado el viernes de la semana pasada en el fraccionamiento Granjas, en Mozimba.
El ataque
Según declaraciones de Murueta Urrutia, el ataque se dio después de que Camacho Millán dejó a sus hijas en la escuela y al llegar al crucero donde está el semáforo se le emparejó un Jetta, desde donde varios individuos le dispararon, al mismo tiempo que hacían lo mismo tripulantes de una camioneta ubicada en otro extremo y que repelieron el ataque los efectivos que acompañaban al policía.
Sin precisar el número, el fiscal indicó que fue un grupo de individuos, tres encapuchados y otros vestidos de civil que para cometer el crimen usaron tres camionetas.
Impresiones de curiosos ante este cuarto hecho violento de gran relevancia en esa área indicaron que Camacho Millán viajaba en una camioneta Liberty color verde, con placas HAB2378 de Guerrero, seguido por el agente caído Hugo Sergio Lara Valle, quien conducía una camioneta Liberty, con placas HAP1047 de Guerrero, y cada uno era acompañado de un agente. A los dos vehículos se les emparejó un automóvil Jetta gris cuando iban hacia la avenida Farallón.
Las versiones señalan de otros individuos que tripulaban una camioneta Liberty, color negro con vidrios polarizados, subió por la avenida Farallón y le cerró el paso a Camacho.
Dicen que los tripulantes de esa otra camioneta dispararon contra el jefe policiaco y sus escoltas.
Versiones de policías explicaron que no eran tres, sino dos, que los curiosos se confundieron porque pensaron que la camioneta Liberty verde donde viajaba Camacho era de otros atacantes.
Sucesos tras la agresión
Testigos informaron que los sicarios que tripulaban el Jetta se bajaron y pretendieron escapar en una camioneta oficial del Servicio Médico Forense luego de que amagaron al conductor, quien por allí pasó después de dejar al hijo de la coordinadora de esa dependencia, Jéssica Vicuña Santiago, en otra escuela privada cercana a la zona.
Agregaron que no lo hicieron porque el llavero que el empleado les dio tiene muchas llaves y no encontraron la correcta.
La tarjeta informativa de la PIM no menciona ese hecho, pero cita que los homicidas escaparon en un Fiesta rojo, otros en una camioneta Liberty, pero que en su intento también quisieron quitarle un auto Acord a otro conductor.
En sus declaraciones, el fiscal Murueta Urrutia confirmó la versión de que en la balacera resultó lesionada la esposa del director del Instituto Estatal de Cancerología, doctor Marco Antonio Terán Porcayo.
La tarjeta informativa de la PIM menciona que resultó herido Fidel Miranda Ascencio, quien dijo que pasó por allí cuando ocurrió la balacera porque trabaja en el sitio de taxis que está al lado de la iglesia de la Garita.
No se supo oficialmente qué ocurrió con los heridos circunstanciales, sólo de Camacho Millán y sus escoltas Francisco Javier Felipe Rodríguez y Ulises Paredes Hernández fueron internados en el hospital privado Magallanes.
De acuerdo con Murueta Urrutia y Portillo Lagunas los policías estaban fuera de peligro y Camacho Millán salió bien de la intervención quirúrgica a causa de tres disparos que recibió y sólo esperaban que se recuperara.
Declaraciones oficiales
El gobernador Zeferino Torreblanca, en la conferencia que dio después del convenio de Difusión y Prevención de Delitos con la Fepade, pidió al procurador que diera el informe oficial.
Murueta dijo que en el automóvil Jetta desde el cual atacaron los sicarios se encontraron varios cargadores de AK-47 pero ninguna arma, y que la Procuraduría trabaja en los dictámenes periciales buscando huellas dactilares o algún dato que permita “buscar luz en este asunto”.
Consideró que este ataque está dentro “del panorama que se vive” en todo el país donde se asientan los grupos de delincuencia organizada.
Descartó que los lesionados cuenten con una excesiva vigilancia porque están acompañados de policías, “creo que es suficiente”, dijo.
Abordado en su oficina de la coordinación regional, Portillo Lagunas declaró que Camacho tenía tres investigaciones pendientes, entre ellas la de la señora Alicia Castilleja, el de Alexis Iglesias, “en fin, infinidad de comisiones que le di para que se hiciera cargo”.
Informó que el miércoles en la noche el policía se comunicó con él para explicarle que ayer jueves, por el caso Castilleja, trasladarían a la cárcel a la empleada doméstica Teresa de Jesús Jiménez Sotelo, después de un arraigo al que estaba sometida por considerarla sospechosa.
Dijo que los atacantes esperaban al comandante y sus escoltas, pero negó que mafias le declararan la guerra a esa corporación.
Señaló que desde el momento de los hechos accionaron los agentes PIM con preventivos municipales.
Calificó la agresión de “artera, no sé por qué tanto coraje a la PIM, se están dando las cosas, tenemos que llevar las investigaciones”.
Dentro de las primeras pesquisas, Portillo Lagunas indicó que en el Jetta gris que usaron los sicarios es modelo 2003 y allí encontraron seis cargadores abastecidos con cartuchos útiles de calibre 7.62 para AK-47.
El fiscal Eduardo Murueta acudió a una reunión con el fiscal regional de esa institución, Enrique Gil Mercado, y con la asistencia de Fernando Monreal Leyva, Patricia Bustos Acosta y otros agentes del Ministerio Público del fuero común, en el edificio que está arriba de la Secretaría de Protección y Vialidad.
Los agresores vienen de estados del norte, afirma Murueta
Al salir mencionó que los “responsables” del ataque son personas que vienen de los estados del norte, como Michoacán. Atribuyó la agresión a la “lucha” que hacen por “sacar” los casos.
Un reportero observó que la camionetas donde viajaban los policías ministeriales eran muy lujosas, de un costo que sus salarios no les permiten, como las Liberty y X-Trail, y preguntó si de allí la agresión contra Camacho Millán, pero Murueta Urrutia evadió la respuesta.
Ante la insistencia del reportero, señaló que hay un programa para retirarles a los oficiales ese tipo de autos y el que no acceda estará sujeto a una investigación, pero observó que ese programa aún no llega a Acapulco.
Aseguró que no había detenidos por el caso sino que varias personas fueron presentadas a declarar. Consideró prematuro afirmar si se trataba de una venganza personal.
Lamentó que hechos como ese se volvieron ya comunes en el estado, no sólo en el país, y reiteró –como en otras ocasiones– que la delincuencia organizada no es de aquí, “se vino a incrustar” en el territorio guerrerense y se sumó a problemas por la tenencia de la tierra, alcoholismo, problemas de la madera, o la venganza privada.
En Chilpancingo, ante el rumor de que habían encontrado la cabeza decapitada del ex secretario de Protección y Vialidad, Genaro García Jaimes –quien desapareció desde la muerte de cuatro presuntos narcotraficantes en la Garita, el 27 de enero– trascendió la versión de que agentes de la PIM y peritos de la PGJE se trasladaron a la ciudad de México porque supuestamente apareció la cabeza de un hombre que hasta ayer no era identificado.
Pesquisas
En la revisión del Jetta gris que abandonaron los sicarios, peritos de la PGJE y agentes del MP hallaron en el interior seis peines de fusil de asalto AK-47, con más de 100 cartuchos sin percutir calibre 7.62.
Había varios discos compactos piratas: uno de The Betales&The Roling Stone, otro que tiene por título Corridos 100% Matone; otro de Corridos Clásicos, dos juegos de llaves, un permiso a nombre de Madai Ponde Diego, con domicilio en el núnero 10 de la calle Los Sauces, colonia El Encanto.
Al auto, que fue estacionado en los patios de la fiscalía regional, se le aplicó un polvo que descubrió varias huellas pero al ser consultados sobre la diligencia los peritos hicieron mutis.
Se les escuchó decir que el número confidencial del auto es el 3M017679*.
Semblanza de Hugo Sergio Lara
De acuerdo con el profesor y ex director de la Academia de Policía de la Secretaría de Protección y Vialidad (SPV), Rodolfo Álvarez Ayvar, el policía muerto fue cinta negra, de los más prominentes en el estado y de los cinco más importantes del país.
Álvarez Ayvar indicó que el también profesor de taekwondo fue instructor en la Academia de Policía de la SPV pero en esa dependencia indicaron que hace 15 días renunció, sin embargo fuentes de la misma corporación dijeron que fue dado de baja al igual que Álvarez.
Rodolfo Álvarez señaló que Hugo Sergio trabajó con él en la Academia de Policías durante la administración de Zeferino Torreblanca como alcalde y con Alberto López Rosas.
Mencionó que viajó a varios países, incluso a Corea, como uno de los entrenadores de la Selección Olímpica en ese arte marcial en 1995.
Dijo que por muchos años fue presidente de la desaparecida Asociación del Estado de Guerrero de Taekwondo, fundó varias escuelas, como en la Unidad Deportiva Acapulco y en la Universidad Americana de Acapulco.

Sigue arraigada la ex trabajadora doméstica de Alicia Castilleja Mendieta



Jorge Nava

La trabajadora doméstica de Alicia Castilleja Mendieta sigue arraigada, debido a que la Policía Investigadora Ministerial aún aporta pruebas para la consignación ante el juez, indicó el coordinador de esa corporación, Alfredo Camacho Millán.
En entrevista, el policía explicó que Teresa de Jesús Jiménez Sotelo ya declaró y como cayó en contradicciones el expediente está abierto.
El homicidio de Alicia Castilleja, hermana de la ex alcaldesa priísta Ana María, ocurrió el miércoles 29 de marzo en su domicilio ubicado en Privada Costa Verde, número 201, esquina con avenida Adolfo López Mateos.
Según Camacho Millán a pesar de que trabajan en el caso de la ex trabajadora como sospechosa del homicidio, aún se busca al ex empleado de la víctima, de nombre Abraham, con quien aún tenía contacto.
El policía lamentó que para la investigación no cuentan con los apellidos del ex trabajador de la empresaria, pues ésta acostumbraba a contratar a la gente sin pedirles requisitos, sólo preguntaba si tenía ganas de trabajar y eso le bastaba.
Para continuar con las investigaciones ayer llegó al puerto el fiscal especial Fernando Monreal Leyva, quien ordenó que se la llevaran a la oficina de la fiscalía regional de esa dependencia, cerca de la Secretaría de Protección y Vialidad.
El caso se sigue en el Ministerio Público del sector Costa Azul, donde se inició la averiguación previa Tab/3ª/III/215/06-4. ().