La UPOEG no puede entrar a Marquelia “bajo ninguna circunstancia”, acuerda con autoridades

Luego de que integrantes de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) detuvieron y golpearon al ex candidato a la alcaldía de Marquelia por el partido Coincidencia Guerrerense, Alberto González Justo, en una reunión se acordó que la Policía Ciudadana no volverá a entrar a ninguna comunidad ni a la cabecera de ese municipio.
El viernes los pobladores de Marquelia cerraron la carretera Acapulco-Pinotepa Nacional en protesta contra la detención del ex candidato, y en respuesta la UPOEG cerró la vía en la entrada a Cruz Grande, cabecera municipal de Florencio Villarreal. El bloqueo concluyó la madrugada del sábado con el acuerdo de que habría una reunión a las 10 de la mañana en la cancha Benito Juárez, en la cabecera municipal.
Consultado vía telefónica sobre los acuerdos de la reunión, González Justo dijo que estuvieron el delegado de Gobernación en la región de la Costa Chica, Oscar Velazco Ambrosio, el coordinador de la UPOEG Bruno Plácido Valerio, pobladores y otros representantes del gobierno estatal.
Contó que la discusión comenzó a las 10 de la mañana como se acordó pero Plácido Valerio llegó cerca de las 11:30 al lugar y estuvo atento a su celular, lo que le mereció reclamos de los pobladores que consideraron su actitud como una falta de respeto.
Dijo que en la reunión pobladores se quejaron de las arbitrariedades de la Policía Ciudadana que en los últimos días aumentaron sus rondas de vigilancia en las que sus integrantes portaban armas de alto calibre y detenían a todas las personas que supuestamente estaban involucradas con el crimen organizado y que se dedicaban a cobrar cuotas, asaltar y asesinar. Además, los pobladores acusaron a Plácido Valerio de olvidarse del origen de la UPOEG y de abandonar al pueblo.
Afirmó que Plácido Valerio aseguró que la UPOEG cuenta con 500 denuncias de pobladores de Marquelia que acusan a otros de ser del crimen organizado, y por ello la Policía Ciudadana se dedicó a detener a los presuntos culpables, un trabajo que le corresponde a las autoridades pero que no hacen en las comunidades del municipio.
Añadió que accedió a retirar a la Policía Ciudadana pero “condicionó” a las autoridades a que atiendan las denuncias que la UPOEG registró, y éstas le exigieron que entregue el reporte a las instancias correspondientes.
El acuerdo final – que se hizo por escrito y con las firmas de las autoridades que acudieron a la reunión – es que la UPOEG no puede ingresar a ninguna comunidad ni a la cabecera municipal de Marquelia, “bajo ninguna circunstancia”.

Policías ciudadanos lo golpearon por grabar a un convoy

González Justo contó que el viernes estuvo en su negocio Minisúper El Bazar en el que se dedica a la venta de refresco y cerveza por mayoreo, y que colinda con dos sitios de taxis de la ruta Marquelia-Acapulco.
Cerca de las 3 de la tarde “hubo un operativo por parte de la UPOEG, llegaron un promedio de entre 20 y 25 camionetas con personal de esas corporación de los distintos municipios de la Costa Chica, fue impresionante porque venían fuertemente armados”.
Dijo que los policías ciudadanos “venían por un muchacho que supuestamente cobra cuotas y es un líder de los taxistas”, preguntaron por el joven y al parecer lo detuvieron, cuando el convoy volvió a pasar frente a su negocio lo grabó, los integrantes de la UPOEG se dieron cuenta y cuestionaron su acción y luego de insultarlo cinco de ellos lo golpearon.
Aunque logró escapar hacia el negocio de su madre, Casa González, ubicado a unos metros del suyo, unos 10 policías ciudadanos lo persiguieron y lo golpearon frente a la señora que quedó pasmada ante la escena.
González Justo dijo que volvió a correr hacia la casa de un vecino y ahí fue detenido, amenazado de muerte y nuevamente golpeado en cara, brazos y testículos por los integrantes de la UPOEG que lo agredieron con sus armas, con las que lo encañonaron.
Para entonces los pobladores acudieron a exigir su liberación y lo llevaron a una clínica, después bloquearon la carretera para demandar la salida de la UPOEG del municipio de manera definitiva.
“Hace cinco años yo regalé un arma a la UPOEG pero quizá con esa misma escopeta me golpearon”, dijo González Justo, “hay una completa anarquía en Marquelia, queremos una Policía Ciudadana que brinde confianza y no temor”. (Alina Navarrete Fernández / Chilpancingo).