Bloquean familiares de marineros desaparecidos la Costera; exigen a autoridades más búsquedas

Los manifestantes se retiran después de acordar con autoridades una mesa de trabajo para hoy con funcionarios federales y estatales

Aurora Harrison

Familiares, amigos de capitanes y marineros desaparecidos en los yates hundidos por el impacto del huracán Otis, bloquearon unas tres horas ambos sentidos de la avenida Costera y la glorieta de la Base, frente a la Región Naval para pedir a las autoridades más esfuerzo en la búsqueda de sus seres queridos.
Los familiares se retiraron después de las 13:15 horas, cuando acordaron con autoridades una mesa de trabajo para hoy, con funcionarios de la Secretaría de Gobernación, Secretaría de Marina, Capitanía de Puerto, Fiscalía General del Estado y Secretaría General de Gobierno.
A las 8 de la mañana llegaron unas 100 personas a la Base y por más de una hora se manifestaron frente a las oficinas de la 12 Región Naval. Portaban fichas con los nombres y fotos de sus familiares desaparecidos, y gritaban: “Queremos que los busquen” y mostraban cartulinas con el texto: “Exigimos búsqueda formal de marineros”.
Después de las 9, dialogaron con marinos por más de 20 minutos, pero los familiares de los desaparecidos querían hablar con los mandos y esperaron 20 minutos más. Al no tener una respuesta, decidieron bloquear ambos sentidos de la avenida por tres horas.
El bloqueo causó un gran congestionamiento vial, por lo que varios conductores que iban hacia la zona de Puerto Marqués tuvieron que darse la vuelta, otros esperaron. En la parada del Acabús, en la zona de Icacos, había muchas personas esperando el transporte, que una vez que se retiró el bloqueo pudieron abordar los camiones.
Los familiares y amigos llevaban lonas con los nombres y fotos de Mauricio Adrián Bibiano, capitán del yate Vida; Demetrio Felipe Morales, de la embarcación Sereno; Andrés Cortés de Bacchus, Ulises Castillo Hernández de la lancha Valeria Abigail, Rubés Torres Campos de Sereno, de María Hilaria Delgado, Luis Sebastián Herrera, de 9 años, y Luis Alberto López Sarabia, de tres años, que estaban en la embarcación Rosmery Cristine.
Además de Abigail Andrade Rodríguez, Fernando Esteban Morales y Ulises Díaz Delgado, del yate Litos; José Desiderio de la embarcación Mar Azul, José Federico Gómez Ortiz de la embarcación Acarey; Leonardo Leiro Cabañas y Alejandro David Pérez del yate Tourbillón.
Susana Ramos, esposa de Rubén Torres, tripulante de la embarcación Sereno, dijo: “Hasta ahorita somos 26 familias las que estamos buscando a nuestros desaparecidos, que estaban trabajando en alta mar. Esta es la tercera ocasión en que nos encontramos en este lugar, pidiendo de todo corazón el apoyo de las autoridades”.
“No estamos culpando al gobierno de lo que pasó, sino que se pide la ayuda para la búsqueda y rescate de los cuerpos. Ya va más de un mes y tres días y sólo nos hemos sentido utilizados, burlados por parte de las autoridades”, indicó.
Recordó que en la protesta que hicieron el jueves, cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador dio su conferencia mañanera, las autoridades le ofrecieron reforzar las búsquedas, “pero llego el viernes y nos cancelaron la mesa de diálogo, donde estarían los representantes de los tres órdenes de gobierno”.

Lamentó que las autoridades “no están interesados en buscar a nuestros desaparecidos, no estamos pidiendo cosas imposibles. Son cosas se puede realizar siempre y cuando quieran. Nos estamos dando cuenta de que no quieren ayudarnos, la vez pasada nos dijeron que nos iban a integrar a búsqueda, yo entre a una, pero fue un paseo por el litoral”.
“Se metieron dos buzos a buscar pedaceras, a mí me interesa buscar el cuerpo de mi esposo y a todos nosotros nos interesa encontrar a nuestros familiares. Aquí se esté pidiendo, en esta tercera ocasión en que estamos aquí, que nos atiendan de verdad”, indicó.
Abundó que ella y los demás familiares esperaban que el presidente saliera y los escuchara, “pero llegó y se fue en helicóptero, simplemente para no ver la realidad de lo que esta sucediendo. Lo que son las búsquedas, no sé sí Abelina o Evelyn quieren tapar cifras, o incluso él, que digan que sólo son 50. No es cierto, si de embarcaciones fueron muchas y mínimo había dos o tres o cuatro en cada embarcación”.
“Queremos búsquedas concretas, bien realizadas, con buzos preparados, que sean profesionales y que sean mucho más debajo de lo que puede ser un simple buzo normal, equipo capacitado, y búsquedas más afuera de lo que es el litoral, porque tenemos la esperanza de que los compañeros estén de aquel lado, queremos la búsqueda por mar o por aire, es lo que se pide”, puntualizó la señora Susana.
Aseguró que no se está culpando al gobierno de lo que ocurrió, sino que se pide la “ayuda. Es un grito desesperado de ayuda, por favor, y que sean concretos en la información, que den cuentas claras. Porque nos sentimos que no somos ni escuchados ni ayudados, porque ya pasó más de un mes que no sabemos de nuestros familiares”.
“Nosotros sabemos que son más de 200 embarcaciones y de las embarcaciones súmale que dos o tres personas. Yo no sé porqué dicen que son 50 muertos”, dijo Susana Ramos.
Lamentó que las autoridades digan que son menos muertos por el huracán, porque “se piensa que todo es político. Ya vienen las campañas y no les conviene, porque a lo mejor se va a buscar un culpable y yo creo todos estamos en sintonía que no hay culpable, necesitamos la ayuda para la búsqueda”.
Susana Ramos detalló que tienen la esperanza de que si “quitan” los pedazos de yates “encontremos cuerpos de bajo de todo eso. Ni un cuerpo más se ha encontrado a más de un mes. Ya los que se encontraron fue lo que sacó el mar, no porque ellos hayan hecho un trabajo de remoción de escombro”.
Agregó que la Fiscalía “se declaró incompetente, porque ellos no tienen cómo buscar en el mar y vía área, que esto no es un delito que perseguir”.
En tanto, Erika Dinora Pérez Rodríguez, esposa de Marco Antonio Chávez Domínguez, de la embarcación Mar Azul, dijo que “nosotros estamos buscando a nuestros familiares desaparecidos”.
En su caso, dijo que ella pide que se busque a los tripulantes de la embarcación Mar Azul porque ahí quedó su esposo y otro de los cuatro que eran.
“Somos bastante las familias que a un mes estamos padeciendo esto. Sí necesitamos que den la autorización para que se busquen para el lado de Zihuatanejo y Oaxaca”, pidió la esposa de Chávez Domínguez.
Hasta el bloqueo de los familiares intentó acercarse el ex alcalde de Acapulco, Evodio Velázquez Aguirre, quien caminó por el bordo de la glorieta de la Base, y las personas empezaron a gritar en varias ocasiones “fuera”, “no queremos políticos ahorita” y “que no abuse del pueblo”.
También se acercó Ramiro Solorio Almazán y le gritaron: “Fuera Ramiro, oportunista, sólo vienes aprovechar la situación”.
El ex alcalde Evodio Velázquez, en sus redes sociales, aclaró que la situación se debió a que quedó “varado y esperando por horas a que un gobierno incapaz atendiera el bloqueo”.
“Lo que hice fue atender la petición de algunas familias, que me pidieron bajar de mi auto para poder escucharlos” dijo y agregó: “¿Cómo es posible que la atención esté en mí y no en las familias que tienen desaparecido a un ser querido? Sin duda es lamentable el actuar gubernamental. Acapulco debe ser prioridad no yo”.

Cierran la Costera por cuatro horas 200 vecinos que piden ser censados por daños de Otis

Los inconformes bloquean los dos carriles de la zona turística, frente a los módulos de los Servidores de la Nación en el Parque de la Reina

Argenis Salmerón

Unas 200 personas bloquearon más de cuatro horas los dos sentidos de la Costera, frente al Parque de la Reina, para exigir que el gobierno federal los cense por las pérdidas materiales que tuvieron por el huracán Otis.
A las 9 de la mañana, los inconformes cerraron los dos carriles de la zona turística, frente a los módulos de los Servidores de la Nación.
Después de cuatro horas de bloqueo en la zona turística, el contigente se dividió por falta de atención de las autoridades de los tres órdenes de gobierno.
Un grupo se quedó bloqueando frente al parque y otro contigente avanzó a la Vía Rápida, donde se concentraron por unos minutos en ese lugar.
Después, los manifestantes desistieron de un bloqueo en la Vía Rápida y también en el Parque de la Reina, por lo que se retiraron del lugar después de la 1 de la tarde.
Los inconformes advirtieron que hoy, a las 8 de la mañana, cerrarán la glorieta de La Diana, para exigir que sean censados por los Servidores de la Nación.
Reclamaron que los “Servidores de la Nación” les informaron que el programa del censo, en las viviendas dañadas por el huracán Otis, está cerrado.
Los manifestantes aseguraron que no estuvieron en sus casas cuando los fueron a censar porque no tenían luz en sus casas, ni alimentos, que estaban atendiendo a enfermos y tenían que acudir a sus trabajos.
Los inconformes provenían de las colonias Nueva Revolución, Plazuelas, Cumbres de Figueroa, Nuevo Centro de Población y Loma Hermosa, entre otras.
En declaraciones a reporteros, el vecino de Nuevo Centro de Población, Felipe de Jesús Loyo, pidió al gobierno federal censar su vivienda. Contó que desde la semana pasada acude a los módulos de los Servidores de la Nación en el Parque de la Reina, pero “no nos atienden”.
Dijo que los más de 200 inconformes mandaron un oficio a la Secretaría del Bienestar federal, para exigir que se extienda el censo de las viviendas afectadas.
Aseguró que los damnificados que no fueron censados tienen sus techos caídos, incluso casas tumbadas por el huracán Otis.
Reclamó la estrategia de “engaño” de los “Servidores de la Nación” es que “te dicen que te vayas a registrar a los módulos y que en tres días van a visitarte, y es falso”.
Reconoció que se fueron de la ciudad por atender a los enfermos o por discapacidad de las personas adultas mayores y niños.
El señor de la colonia Nueva Revolución, Félix Zambrano Meneses, pidió al gobierno federal extender el censo a las personas damnificadas.
Contó que su casa se inundó porque el río de La Sabana se desbordó y el agua alcanzó un metro 80 centímetros, “devastó todo, fue pérdida total”.
Dijo que no estuvo en su casa el día del huracán por cuestiones de trabajo, pero “mi casa esta totalmente destruida”.
Añadió que no podía venir a su casa, porque estaba fuera de Acapulco, “no había vuelos comerciales y traigo toda la evidencia de los daños en mi casa”.