Se encerraron y se llamaron para darse valor, relatan vecinos del lugar de la balacera del jueves en la capital

 

La colonia Salubridad, antes Paludismo, está habitada por familias de clase media alta y alta. Se fundó hace 20 años con burócratas mayoritariamente de la Secretaría de Salud, aunque después llegaron a radicar ahí familias pudientes que de la noche a la mañana levantaron edificios y lujosas residencias.
El asentamiento se encuentra a orillas del bulevar Vicente Guerrero, al sur de la ciudad, en una zona privilegiada, a cinco minutos están la Ciudad de los Servicios y el Palacio de Gobierno, a menos de 1 kilómetro están las tiendas de autoservicio Aurrerá y Soriana, la primera al norte y la segunda al poniente. Asimismo, enfrente está la Fiscalía General de Estado (FGE) y a un costado el Centro de Bachillerato Tecnológico Industrial y de Servicios (Cbetis) número 134.
Allí, de pronto, a las 9 y media de la noche del jueves, se soltó la balacera. Los vecinos se encerraron en sus viviendas y, vía telefónica, se comunicaron unos con otros para darse valor y recomendarse precauciones. Las detonaciones dejaron de escucharse casi una hora después, a las 10 y media de la noche.
Hasta ayer por la mañana, los vecinos se enteraron a través de los medios de comunicación del resultado del tiroteo; dos heridos, un policía y un pistolero; tres secuestrados que fueron liberados y 7 detenidos.
Más de 12 horas después, a las 2 de la tarde de ayer, la zozobra aún se reflejaba en los vecinos; durante la mañana, muy pocos salieron de sus casas y los que por necesidad tuvieron que hacerlo para ir a su trabajo o escuela, caminaban presurosos y entraban a sus casas sin hablar con nadie.
La noche del jueves, el operativo policiaco se centró en una casa sin número de la calle principal, la Baltasar R. Leyva Mancilla, ubicada entre Rubí y Zafiro. Es un inmueble de dos plantas que abarca casi media cuadra.
Los vecinos dicen que allí, hasta hace un año vivía una familia “normal”, sabían que el hombre era empleado del gobierno y eran conocidos por todos los vecinos, pero de pronto desaparecieron y la casa permaneció cerrada hasta hace unos cuatro meses, cuando llegaron a habitarla unos 15 hombres, “todos ellos con aspecto de albañil”, explica una de las vecinas que accedió a hablar con el reportero.
Cuenta que los hombres casi siempre se la pasaban afuera de la casa, pero que nunca los vieron armados o cometiendo algún ilícito contra los vecinos; por eso nada se les hizo extraño hasta la noche del pasado jueves, cuando policías estatales y moradores de esa casa se enfrentaron a balazos, lo que derivó en el rescate de al menos tres personas, dos hombres y una mujer que presuntamente tenían secuestrados allí.
“Los primeros balazos comenzaron como a las 9 y media de la noche, se escucharon por ese lado”, dice una vecina, que señala hacia el sur de la ciudad, “pero luego se dejaron de escuchar y cuando comenzaron, unos 10 minutos después, se oyeron para allá arriba”, dice señalando hacia el norte, a la colonia 20 de noviembre, vecina de la colonia Salubridad.
Sigue, “entonces nos encerramos y entre los vecinos que nos conocemos nos comenzamos a llamar por teléfono, preguntándonos qué pasaba, pero nadie sabía nada, coincidimos en que debíamos cerrar nuestras puertas y no salir”. Así lo hicieron toda la noche, hasta que amaneció este viernes.

Otros hechos de violencia en la colonia Salubridad y en la 20 de Noviembre

Pero la colonia Salubridad, igual que la 20 de Noviembre, no es ajena a este tipo de hechos. Están asentadas al inicio de una calle principal que conecta con la avenida de Los Gobernadores, misma que pasa por la colonia El Tomatal y la Cooperativa, hasta entroncar con el Libramiento a Tixtla, en la colonia Indeco; a partir de ahí, los automovilistas que quieren salir de Chilpancingo toman rumbo a Tixtla o regresan por el libramiento hasta llegar a la avenida Insurgentes, cerca del Mercado Baltasar R. Leyva para incorporarse a la Autopista del Sol o la carretera federal México-Acapulco.
Esta ruta, desde la colonia 20 de Noviembre, ubicada al sur de la capital, hasta la Indeco, que se encuentra al poniente de la ciudad, ha sido escenario de constantes balaceras, enfrentamientos y ejecuciones.
En esa vía, entre la avenida de Los Gobernadores y la calle Iztaccíhuatl de la colonia Almolonga, a las 7 y media de la mañana del 9 de mayo de 2007, un comando de entre 15 y 20 pistoleros armados con AK-47 y AR-15, que vestían uniformes de la desaparecida Agencia Federal de Investigación (AFI), atacaron al director de Seguridad Pública Municipal, Artemio Mejía Chávez, comandante Cobra, quien era resguardado por una escolta de siete policías municipales.
En el ataque murió el jefe policiaco y un pistolero. También resultaron heridos el comandante de la Policía Preventiva municipal, Demetrio García Carrillo, y el policía Emmanuel Gutiérrez Piza, además de un pistolero y un civil que pasaba por el lugar.
A las 10 de la noche del 19 de septiembre de 2010, pistoleros que se desplazaban en un convoy de vehículos atacaron a un grupo de militares que patrullaban en la calle principal de la colonia El Tomatal; tres militares resultaron heridos y un pistolero murió, los demás agresores lograron escapar.
La noche del 9 de febrero de 2014 fueron ejecutados Ricardo Rivera Casarrubias de 22 años y Rodrigo Nava Adame de 20, en un ataque de sicarios cuando circulaban a bordo de un automóvil Jetta en la avenida de Los Gobernadores, cerca de la colonia El Tomatal.
La madrugada del 2 de enero del 2015, hombres armados que circulaban por la avenida de Los Gobernadores, rafaguearon la casa de la líder de colonias, María del Consuelo Uriosteguí, en la colonia El Tomatal.
Apenas la madrugada del 8 de enero, hombres armados ejecutaron en la colonia Indeco a Erick Paul Valadez Pérez de 39 años, cuando se disponía a abordar su camioneta Ford Lobo.
Además de estos hechos, que han sido los más sonados, la avenida de Los Gobernadores, que atraviesa unas 6 colonias, ha sido escenario de constantes balaceras y persecuciones entre bandas del crimen organizado, o entre delincuentes y corporaciones policiacas y militares.