Prohibió la Marina las visitas al faro de La Roqueta por los daños en sus instalaciones, denuncian

Integrantes del Comité Prodefensa de la Isla La Roqueta denunciaron que las visitas al faro de la ínsula fueron prohibidos por la Marina hace dos semanas, debido al pésimo estado de la herrería y escaleras en su interior.
Señalaron que las dependencias estatales mantienen una posición “muy tibia” en la promoción para que la isla sea decretada como parque marino por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).
El oceanólogo Efrén García Villalvazo informó que el Comité de Playas Limpias sesionó ayer en la mañana y busca mantener la bandera azul en los cuatro tramos de Acapulco.
La presidenta de la organización, Robin Sidney Gordon, mencionó que los 10 millones 500 mil pesos que fueron destinados para concluir un centro de cultura sustentable y un museo en la ínsula, y que forman parte de los proyectos denominados “compromisos presidenciales”, no han sido aplicados en su totalidad, pues los trabajos no fueron terminados.
Mencionó que aunque el faro, inmueble que es vigilado por la Marina, presentó deterioro de riesgo para los turistas desde hace unos cuatro meses, aún se permitía el acceso hasta hace tres meses, pero que hace dos semanas ya se impide el paso por seguridad.
“Allí está todo el material donado por la gente, cuatro toneladas de cemento, un carro de arena, todo lo cargaron y llevaron a la cima para hacer un Asta pero no ha sido construida”, reclamó sobre la base de un estandarte que sería colocado como parte de los atractivos e información histórica de la isla.
“El faro, que es símbolo de la isla, y que los ecoturistas quieren subir para tomar fotos, ya no lo pueden hacer porque todo está podrido y cayéndose, que además prohibió, la Marina, a subir dentro del faro. Todo esto estaba contemplado en los 10 millones 500 mil pesos presupuestados”, declaró.
Sidney Gordon celebró que se lograra convenir con integrantes de algunas cooperativas de la zona Tradicional y socios de lanchas de fondo de cristal, el llevar a grupos de estudiantes de lunes a jueves, cuando no hay gran cantidad de turistas, por una cuota de recuperación.
Respecto al decreto como un área natural protegida, bajo la categoría de Parque Marino, el oceanólogo Efrén García Villalvazo indicó que el 22 de noviembre pasado, que entregaron los estudios previos justificativos, luego de dos años de revisión, solicitaron el apoyo de los secretarios de Turismo federal, Enrique de la Madrid Cordero, y el de Medio Ambiente, Rafael Pacchiano Alamán, para que La Roqueta sea un ANP.
Comentó que para el decreto se requiere de colaboración y en infraestructura sólo la rehabilitación de algunas áreas de la isla pero de mayor compromiso y colaboración de las autoridades estatales y municipales.
“Hemos tenido pláticas con casi todos, pero el entusiasmo que muestran por el proyecto es muy tibio. Nos atienden, nos reciben, pero un apoyo decidido no hemos encontrado a nivel estatal ni municipal”, expresó.
En otro tema, García Villalvazo informó que la Dirección de Ecología retomó el tema de la certificación de playas y presentó al encargado del programa, el ex subdelegado de la Comisión Nacional de Pesca, Víctor Zamora Domínguez, para coordinar los trabajos.
Efrén García y Robin Sidney forman parte del Comité de Playas Limpias como representantes de la sociedad civil organizada.
Explicaron que “por fin” el Ayuntamiento admitió que buscará resolver los problemas o contingencias que se originen en los tramos certificados y no “ocultar mediáticamente tales problemas”.
Mencionaron la existencias de contingencias naturales como el Mar de Fondo o las lluvias que impiden mantener los parámetros que el programa Blue Flag, mediante Pronatura en México establece.
“Normalmente, cuando se presentan este tipo de problemas lo enmascaramos y no se resuelven, pero ahora uno de los cambios de Blue Flag es que si se presenta una contingencia, por derrame o lo que pase, se bajan las banderas, se corrige el problema y cuando se resuelve, se vuelven a izar los banderines”, concluyó García Villalvazo.