Jacob Morales Antonio

Trabajadores de la delegación de los Servicios Educativos de la Región Acapulco-Coyuca de Benítez pararon labores por las malas condiciones de las oficinas ubicadas en avenida Universidad, y desconocieron a la delegada Martha Rocío Carachure Bustos, por no poder realizar las gestiones necesarias.
En conferencia de prensa, las representantes de las delegaciones del SNTE D-III-18, Edith García Lozano; de la D-III-19, Karina de Montes de Oca, y de la D-III-20, Leticia Jiménez Gutierrez, informaron que son 600 trabajadores los que van a parar sus actividades administrativas, incluidos los que están en las oficinas que se rentan en el edificio Oviedo, del centro de la ciudad.
Karina de Montes de Oca exigió al secretario de Educación, Marcial Rodríguez Saldaña, junto con el subsecretario de finanzas, Moreno Lira, que a más tardar el lunes se pueda reunir con una comisión de los dirigentes y se determinen acuerdos para la salida de la actual delegada, porque “el cargo le ha quedado muy grande”.
Dijo que la delegada no tiene conocimiento ni la capacidad para llevar a cabo los trabajos y las gestiones que se requieren en la delegación, “a casi tres meses del huracán Otis, continuamos con estas instalaciones como ustedes pueden ver. Porque ni siquiera se ha llevado la limpieza”.
La trabajadora expresó que no era posible que en las instalaciones no se hubiera quitado una sola rama ni la basura que quedó desde el impacto del huracán, además de los daños que dejó en el techo y los plafones de las oficinas, así como la destrucción del techo de una cancha.
Dijo que en las oficinas no hay energía eléctrica y las áreas siguen sucias, tampoco hay internet, ni se han actualizado los sistemas que manejan las computadoras, “mucha gente que viene a realizar sus trámites se queja de la mala atención, sin embargo, tampoco la autoridad nos provee de las herramientas necesarias para realizar los trámites de manera adecuada”.
La representante informó que se enteraron de que el encargado de Finanzas de la delegación, Adalid Maganda Barrio, renunció sin hacer el procedimiento de entrega-recepción, “estamos exigiendo que el secretario venga aquí”.
Recordó que llevan casi una década sin tener instalaciones dignas y ocupando oficinas fuera de la delegación, donde se pagan hasta 100 mil pesos mensuales, dinero que puede ser invertido en mejorar la infraestructura de la delegación.
Recordó que la CETEG, desde hace 10 años, dejó las instalaciones y que la autoridad no ha querido reconstruir un edificio de cuatro niveles, que era parte de la Secundaria 1, ubicada a un costado, y que a pesar de que fue declarado como inhabitable por Protección Civil, sigue de pie y aguantó los últimos terremotos.
García Lozano dijo que la delegada lleva tres años al frente y no ha podido darles condiciones adecuadas a los trabajadores para poder realizar sus actividades de oficina.