Zacarías Cervantes

Chilpancingo

Por lo menos 10 mil militantes de Antorcha Campesina, entre campesinos y colonos, resultaron damnificados por el huracán Otis, declaró ayer el dirigente de la agrupación José Juan Bautista Hernández, quien encabezó un mitin afuera del Recinto de las Oficinas del Poder Ejecutivo del Estado para pedir una audiencia con funcionarios del gobierno estatal y solicitar apoyos.
Explicó que ayer sólo acudió una comitiva para solicitar una reunión con el secretario General de Gobierno, Ludwig Marcial Reynoso Núñez o con el director General de Gobernación, Francisco Rodríguez Cisneros para exponerles “la gravedad de las afectaciones por el huracán Otis”.
El dirigente de la agrupación informó que muchas comunidades quedaron incomunicadas y a 19 días de que el huracán azotó los municipios de Acapulco y Coyuca de Benítez los pobladores todavía no tienen servicios públicos.
“Estamos preocupados sobre todo por nuestros compañeros colonos y productores de los lugares que fueron devastados por el huracán”, dijo Bautista Hernández.
Aseguró que hasta ayer la organización ha estado apoyando “de diversas formas” a las colonias y comunidades donde tiene militantes, pero que dada la gravedad del problema se requiere también del apoyo del gobierno.
“Platicando con los colonos nos dijeron que tienen mucha incertidumbre acerca de cómo les van a llegar los apoyos que el gobierno federal va a destinar para ellos”.
Dijo que la prioridad son los techos porque muchos están viviendo con familiares, otros con techos reciclados y “muy débiles”.
Según el dirigente, sus compañeros antorchistas hasta ayer no sabían cuándo y cómo les va a llegar el apoyo de los gobiernos federal y estatal.
Agregó que en la mayoría de las colonias y comunidades, siguen sin agua, sin luz, sin servicio telefónico y las escuelas están destrozadas.
El dirigente dijo que se necesita un programa de empleo temporal para limpiar y reconstruir las viviendas.
“Los gobiernos estatal y federal deberían preocuparse más en serio para resolver la situación, no solamente pronunciar discursos que digan que van a levantar Acapulco o que se volverá reconstruir un nuevo Acapulco, sino que necesitamos ya saber efectivamente que se va a hacer”, agregó.
“En las comunidades todos sabemos que el viento tumbó el maíz, se llevó los animales, las palmeras, los árboles de mango, no hay absolutamente nada de vegetación y hemos tratado de acercarnos al secretario de Agricultura, pero no ha dado la cara, no se ha sentado a platicar ni ha dicho qué se va a hacer en las zonas devastadas en la producción”.
Informó que el director de Gobernación Rodríguez Cisneros les dijo que se van a reunir el próximo jueves a las seis de la tarde para encontrar caminos para aquellas gentes que no pueden venir de las colonias y comunidades “y nos han buscado para abrir las puertas del Palacio de Gobierno”.
Señaló que de los damnificados unos cuatro mil son campesinos y unos seis mil colonos que perdieron casi todo lo que tenían.
El funcionario no precisó en qué colonias y comunidades hubo daños a familias que pertenecen a esa organización, pues dijo que será el día de la reunión con el funcionario de Gobernación cuando traerán la lista de comunidades y damnificados.