El obispo de Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel Mendoza, dijo que lo han buscado empresarios, organizaciones y políticos para trabajar por la paz, la concordia y hacer propuestas a los gobiernos para erradicar la violencia que genera asesinatos, secuestros y desapariciones.
El obispo confirmó la reunión de este lunes en sus oficinas de la catedral con los presidentes en Chilpancingo de la Coparmex, Adrián Alarcón Ríos, y de la Canaco, Víctor Ortega Corona, como se dio a conocer en estas páginas.
A pregunta sobre este encuentro, Monseñor Rangel dio a conocer que organizaciones empresariales y otros grupos lo están invitando como líder moral para tratar de reunir a las distintas fuerzas en el estado para trabajar en favor de la paz, de la concordia y dialogar en cómo ir erradicando la violencia que está sufriendo Guerrero.
El obispo ofreció declaraciones a reporteros la tarde de ayer en la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús del centro, donde dio el nombramiento al nuevo párroco, Juan Amado Alarcón, quien relevó a Margarito Salgado Calderón, quien a su vez fue enviado a El Ocotito, en Chilpancingo.
Rangel Mendoza dijo que su respuesta a los empresarios y políticos que lo han buscado es que de ninguna manera él puede ser el líder moral de este grupo que se está conformando, sino un miembro más que puede participar., “Sólo llevo un año y ocho meses en el estado, y aún no alcanzo a entender bien la idiosincrasia de los guerrerenses”, adujo.
“Yo lo digo clara y abiertamente, yo no quiero que me utilicen y por eso estoy dispuesto sólo a participar como un miembro más y dar lo mejor de mí, y quisiera que fuera otra persona la que convocar a otros grupos”, expuso.
A pregunta del avance que llevan estas reuniones, Rangel dijo que los empresarios lo fueron a visitar a su oficina y lo mismo que algunos políticos lo han ido a visitar y “me han hecho la propuesta pero hasta ahí, yo todavía no he aceptado porque mi papel como obispo es la celebración de los sacramentos, la difusión del evangelio, pero también soy un mexicano que de verdad me debe importar la cuestión social y lo que está sucediendo con Guerrero, porque la mayoría son católicos y yo como obispo católico debo estar interesado en el bienestar de todos”.
Se le preguntó si esta organización sería para hacer propuestas en materia de seguridad al gobernador Héctor Astudillo Flores, el obispo lo confirmó y dijo que es algo que ve positivo “porque 10 o 15 cabezas piensan mejor que una”.
Sostuvo que ojalá con este interés de agrupar a diferentes actores de la sociedad “no se vaya a realizar con fines políticos, porque eso tampoco hay que descartarlo, seguramente algunos van a querer jalar agua para su molino”.
Subrayó que él es de la idea de hacer buenas propuestas al gobernador y a las diferentes instituciones gubernamentales con el fin de cooperar, ayudar y no únicamente ser “tiradores”.
Dijo que hace votos para que se concrete ese grupo pero para cooperar y ser positivos y “nada de jalar agua a su molino y tampoco por intereses políticos, vamos a trabajar en bien de Guerrero y no buscar otros intereses”.
Se le planteó si entre las propuestas de la diócisis que él encabeza está solicitar que se investigue a los funcionarios vinculados con la delincuencia organizada como él mismo lo ha denunciado. Señaló que lo que están proponiendo en la diócesis es la paz con la misericordia, “lo que estoy proponiendo yo como obispo es el diálogo con cualquier persona y porque cada quien tiene sus motivos y vale la pena escucharlos cuáles son los motivos de los buenos y de los malos”.
Reiteró que sus señalamientos han levantado muchas críticas, inconvenientes y malestares hacía muchas personas. Insistió En que si el crimen organizado no es apoyado por “ciertos políticos, yo no digo que todos, pues ya nos hubiéramos librado de ese azote”.
Dijo que en Guerrero se sigue produciendo la amapola y la goma de opio, la cual se distribuye… ¿Quién la distribuye?, ¿Quiénes son los canales de distribución? Y ¿por dónde se va?… Y en son de broma, dijo que “ciertamente la droga sale de Guerrero y muchos cierran un ojo y el otro también, la cosa es que se sigue produciendo y se sigue distribuyendo”.
Se le preguntó de los presuntos vínculos de los policías comunitarias con la delincuencia organizada en el corredor entre Chilapa-Chilpancingo que es la zona de influencia de esa diócesis que él encabeza, dijo que no está seguro de que estén ligadas a la delincuencia pero que hay muchas probabilidades, “pero como está ligada la policía comunitaria a la delincuencia organizada hay otros políticos también y otras organizaciones, la cosa que ahí es un corredor muy importante donde pasa la droga y tiene que pasar por ahí y hay intereses. Yo realmente no puedo decir fulano, zutano o ciertas organizaciones, sino que yo en general lo que siempre he afirmado que en Guerrero se siembra la amapola, se saca la goma de opio y esa tiene gran demanda, y es lo que no quieren o algunos no les conviene que esto pare porque les produce gratificaciones y dividendos”.
Ante la ola de violencia registrada en Guerrero, el obispo Rangel informó que las 4 diócesis que hay en el estado se propusieron trabajar en favor de la paz y de la misericordia a través de 100 acciones, entre las que se incluyen la asistencia a víctimas de la violencia y victimarios, así como promover la paz desde las familias.

Se han removido párrocos por amenazas

Incluso en la misa que ofició ayer al dar posesión de la iglesia como párroco a Juan Amado Alarcón, Salvador Rangel habló del apoyo que se daba en la parroquia de San Gerardo a familiares de víctimas de desaparición del colectivo Los Otros Desaparecidos de Iguala, y reclamó: “Desgraciadamente otras personas metieron la mano, y echaron a perder esta labor”.
Allí, el párroco de la iglesia de San Gerardo, Oscar Mauricio Prudenciano González, que apoyó desde un inicio a los familiares de desaparecidos tras los ataques a los normalistas de Ayotzinapa, anunció la apertura para el martes de la otra semana de la casa Siloé, en la que darán apoyo médico, sicológico y asesoría a víctimas de la violencia. Además habrá un comedor comunitario que atenderá a las personas que lo necesiten.
En declaraciones dio a conocer la renovación de entre 12 y 15 sacerdotes como parte de una rotación que se realiza en las principales Iglesias de los municipios de la diócesis que encabeza y que tienen que ver con el cambio de sacerdotes que llevan más de 12 años en una misma iglesia, pero también por razones de la inseguridad y ante amenazas que algunos sacerdotes han recibido en sus municipios y para no arriesgar sus vidas, de este que no abundó y no dio a conocer qué curas que han sido amenazados, ni los lugares donde están, ya que consideró que el dar a conocer esta información los pondría más en riesgo y peligra su vida, “simplemente les digo que han sido amenazados algunos sacerdotes, algunos han preferido salir o me han pedido salir y yo los he sacado de esa situación”.