Ayer por la tarde los policías preventivos de Zihuatanejo fueron desalojados de su cuartel en las instalaciones de la Dirección de Seguridad Pública municipal y Vialidad por los policías estatales que mantienen el control de esa corporación desde el 16 de mayo, luego de que junto con militares del 75 Batallón de Infantería detuvieron a 60 municipales durante una revisión del armamento.
Consultado vía telefónica el secretario del Ayuntamiento, Homero Rodríguez Rodríguez confirmó lo dicho por los policías municipales aunque dijo que no había razón “para decir que fueron sacados, ellos se están yendo (porque) ahorita no hay razón para que estén en la academia (Dirección de Seguridad Pública y Vialidad) ya que no están haciendo las labores de vigilancia”.
A pregunta expresa sobre si fue decisión de la Policía Estatal sacar a los policías de las instalaciones municipales, el funcionario comentó que “lo que pasa es que está un procedimiento para que la policía pueda estar al 100 por ciento con base con todas las certificaciones, exámenes, pues de esa manera tendrán que llevar un control específicamente para que la policía que sí esté laborando en su momento ya esté certificada, haya pasado los dos exámenes, el de la licencia oficial colectiva y el del control y confianza y de salud (…) eso no tiene nada que ver con su sueldo, ellos seguirán percibiendo su sueldo hasta que haya una decisión de acuerdo a los informes de los exámenes, aquél policía que no pueda continuar se está buscando la manera en que se pueda dar una liquidación conforme a derecho”.
Según la versión de algunos de los policías municipales que se encontraban en las instalaciones cubriendo su turno laboral, poco después de las 6 de la tarde fueron informados que por indicaciones del coordinador regional de la Policía Estatal, Pedro Castro, que a partir de ese momento “todos nos teníamos que salir, que no querían a ninguno de nosotros adentro, que si teníamos algún objeto personal que lo agarráramos y que nos fuéramos, que no teníamos nada qué hacer ahí, nos sacaron prácticamente a todos”.
Uno de los policías comentó que los dos únicos municipales que se quedaron fueron los que controlan las videocámaras de vigilancia y atienden las llamadas de emergencia en el Centro de Reacción Inmediata que es la versión municipal de un Centro de Comando, Control, Comunicaciones y Cómputo, “se quedaron sólo esos dos compañeros porque llegó el director David Nogueda Salmerón a hablar con el coordinador de la (Policía) Estatal cuando nos estaban sacando y acordaron que mañana (hoy) lunes, entregan oficialmente esas instalaciones por escrito”.
El martes 16 de mayo policías estatales y soldados llegaron a dichas oficinas a revisar “de manera extraordinaria” el armamento de esa corporación que cuenta con 240 agentes de los cuales sólo 49 han aprobado sus exámenes de control y confianza y están autorizados para portar armas dentro de la licencia oficial colectiva 110, luego de que días antes, el 10 de abril, hicieron una inspección y encontraron diversas irregularidades.
El 16 de mayo fueron detenidos 51 policías preventivos municipales a quienes trasladaron al puerto de Acapulco, 31 los presentaron ante la Fiscalía General del Estado (FGE) por el delito de usurpación de funciones y a 20 más los enviaron a la Procuraduría General de la República (PGR) por los delitos de delincuencia organizada, portación de armas de uso exclusivo, acopio y contra la salud, a nueve de ellos no se los llevaron detenidos porque demostraron con una identificación que sí son policías municipales en activo.
Los policías municipales que no fueron detenidos se negaron a salir a patrullar debido a que les retiraron el armamento y dijeron que se sentían vulnerables e indefensos al trabajar en esas condiciones ya que el 25 de abril, por trabajar desarmados, tres de sus compañeros fueron asesinados en un módulo de la Policía Municipal en Ixtapa.
El jueves 18 por la tarde los 31 policías que estaban en la FGE quedaron libres debido a que el gobierno municipal de Zihuatanejo aportó las pruebas de que mantienen una relación laboral con el Ayuntamiento, pero además, todos ellos comprobaron que están incluidos en el Sistema Nacional de Seguridad Pública como policías en activo, sólo que no han acreditado sus exámenes de control y confianza, estos agentes regresaron a Zihuatanejo durante los primeros minutos del viernes, mientras que sus otros 20 compañeros fueron recluidos en el penal del puerto de Acapulco.
Aunque 31 de sus compañeros regresaron, los policías municipales se mantuvieron en la postura de no salir a hacer patrullajes ya que además desde el 16 de mayo la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del estado por medio de la Policía Estatal mantiene el mando y control en esa corporación, por lo que sólo se presentaban al turno laboral que les correspondía y permanecían en el interior de las instalaciones, aunque tenían la facilidad de entrar y salir.
Sin embargo ayer por la tarde fueron desalojados por completo, “nos dijeron que no tenía caso que estemos aquí, que al cabo si no estamos saliendo a patrullar ¿Para qué estábamos aquí? Que la indicación era que nos saliéramos con todo y chivas (pertenencias), que ya no vamos a poder entrar, ahora son ellos los que están mandando en nuestras instalaciones, hasta los (agentes) de Tránsito se fueron, ellos tampoco van a estar aquí”, dijo uno de los municipales.
Homero Rodríguez declaró que “efectivamente, desde que se hizo el operativo de revisión del armamento algunos elementos tuvieron un procedimiento, están libres, sin embargo los otros elementos no quisieron salir a las calles a resguardar hasta que tuvieran su armamento, su herramienta, la Policía Estatal se está haciendo cargo de la seguridad pública en el municipio desde aquél día”.
Agregó que “entonces ahorita no tiene caso que los elementos estén en la academia, se está haciendo un proceso de darles vacaciones a los que están y empezar a revisar caso por caso para que se les dé la oportunidad de reevaluarse a aquellos que no han aprobado sus exámenes e ir viendo las medidas que se irán tomando con cada uno de ellos dependiendo la edad, sus capacidades, como lo requiere la ley general de seguridad y todos los procedimientos que se necesitan para que un policía pueda estar en activo es por eso que no tiene caso que estén en las instalaciones”.
Rodríguez dijo que sólo algunos trabajadores de la Dirección de Seguridad Pública se quedarán a laborar para coadyuvar con la Policía Estatal y sea atendido oportunamente el número de emergencias, “algunos administrativos sí se quedan, efectivamente, algunos policías que son de nuevo ingreso y que están haciendo sus exámenes tendrán que acudir al pase de lista para efecto de que en los próximos días tomen un curso en la misma Policía Estatal y no se interrumpa ese proceso que ya tienen y algunas áreas administrativas continuarán haciendo su trabajo normal coadyuvando con la Policía Estatal (…) incluso el médico para certificar estará ahí coadyuvando”.
