Honestidad, palabra clave de Rosario Robles en las cinco visitas a Guerrero

* Recuento de sus propuestas para las elecciones de 2002 y 2003

Aurelio Peláez * Guerrero fue una prioridad político electoral para el Comité Ejecutivo Nacional del PRD que presidió durante casi dos años Rosario Robles Berlanga. Considerado uno de los estados fuertes de este partido, junto con el Distrito Federal, Michoacán, Oaxaca, y Zacatecas, la elección de alcaldes y diputados locales de octubre de 2002, y de diputados federales de julio de 2003, mereció una atención especial por parte de la dirigencia, y la visita oficial en cinco ocasiones en ese periodo de la propia Robles Berlanga.

Por esa razón, Rosario Robles designó a uno de sus cercanos, el chilpancinguense Ramón Sosamontes, para que se encargara de coordinar el proceso de elección de candidatos y las campañas. En las locales de 2002, el PRD ganó las principales ciudades – Acapulco, Iguala y Zihuatanejo, y 26 municipios más– así como 17 diputados, quedando a tres del PRI. Con este antecedente inmediato, en 2003 cifraron sus expectativas en ganar hasta siete de las diez diputaciones federales en disputa, aunque finalmente los perredistas se quedaron con cuatro: las dos de Acapulco y las que corresponden a los distritos de Tlapa y Zihuatanejo.

La apuesta de 2003 también tenía ver con el reto que asumió la entonces dirigente nacional perredista ante sus compañeros: conseguir al menos 20 por ciento de la votación nacional, o renunciar de no hacerlo. Finalmente, el PRD obtuvo con trabajos 19 por ciento de la votación nacional, y las corrientes políticas contrarias la emplazaron a cumplir su palabra. Robles Berlanga dejó la dirigencia.

2002: PRI, descrédito; PAN, desencanto; PRD, honradez

En el 2002, Rosario Robles visitó Guerrero en tres ocasiones. El 13 de marzo visitó Ciudad Altamirano e Iguala. Al primer lugar llegó en helicóptero. Ahí, en una reunión de trabajo con dirigentes perredistas, previa a la elección de candidatos a alcaldes, dijo que el PRD tiene “posibilidades reales” de ser gobierno en 2005 y de ser mayoría en el Congreso de la Unión en 2003 y dijo que “el descrédito del PRI y el desencanto del PAN significan que es el momento del PRD. Y nuestro partido es el único que puede gobernar con democracia y honradez”.

El 18 de agosto en Chilpancingo Rosario Robles Berlanga tomó protesta a los candidatos a alcaldes, síndicos, regidores y diputados locales de este partido, y les advirtió que del triunfo en sus municipios y distritos depende ganar la gubernatura en 2005 y la Presidencia de la República en 2006.

Ahí, acompañada del secretario general del CEN perredista, Carlos Navarrete; del delegado del CEN en Guerrero, Ramón Sosamontes; del secretario de Prensa y Propaganda, Javier Hidalgo, del de Asuntos Electorales, Juan Guerra, exhortó a los perredistas del estado a demostrar a los mexicanos la viabilidad del proyecto político del PRD como opción de gobierno y por su cercanía con la gente. Se refirió a Guerrero como un estado con los primeros lugares en pobreza, marginación y corrupción permitida por el PRI y su mayoría desde el Congreso local.

El primero de octubre, Rosario Robles estuvo en Tierra Caliente en los cierres de campaña de los candidatos a alcaldes. En ese lugar, denunció que los recursos que emplea el gobernador René Juárez para apoyar a los candidatos del PRI provienen de un crédito de 500 millones de pesos que le autorizó la mayoría priísta del Congreso local.

Advirtió que los perredistas exigirán la aplicación de la ley en la demanda penal que su partido presentó contra el mandatario por presuntos delitos electorales.

En sus discursos, la dirigente nacional perredista ponderó los gobiernos de Andrés López Obrador y de Lázaro Cárdenas Batel, en el Distrito Federal y en Michoacán, lo mismo que el municipal de Zeferino Torreblanca en Acapulco, como ejemplos de trabajo y honestidad.

El 6 de octubre, el día de la elección, Rosario Robles estuvo en Tlapa, Acapulco, Zihuatanejo e Iguala, desplazándose para ello en un helicóptero que en estos días se confirmó que era propiedad del empresario Carlos Ahumada, cuya relación la condujo a la defenestración. Este viaje generó polémica con el PRI e incluso se discutió en el Instituto Estatal Electoral. “Lo que pasa es que les causa mucha molestia mi presencia, sólo así se puede explicar tantos rumores sobre el viaje”, dijo.

Incluso, al llegar a este lugar fue informada que un medio radiofónico había transmitido la información de que el helicóptero en que viajaba había sido baleado. Este hecho fue desmentido a la radiodifusora por el propio CEN perredista.

En Acapulco por la noche celebró el triunfo perredista , e informó de victorias en Iguala y Zihuatanejo, las principales ciudades, así como de la posible obtención de la mayoría en el Congreso local. Lo gobiernos perredistas hacen las cosas diferente

El 25 de mayo de 2003, Rosario Robles encabezó en Acapulco una reunión con los candidatos perredistas a diputados federales para definir la agenda legislativa de ese partido. Ahí dijo que desde el Congreso se impulsaría una política para reactivar la economía y el empleo.

Afirmó que una de las prioridades de este partido para la próxima legislatura, es la revisión del capítulo agrícola del Tratado de Libre Comercio. Señaló que para reactivar la economía y el empleo, se debe poner en el centro del debate nacional el apoyo al campo mexicano.

En el acto, celebrado en un salón del hotel Continental, Robles destacó que “es nuestra tarea impedir el regreso al pasado de corrupción e impunidad”, y responsabilizó a los gobiernos del PRI, “que hablan de lo nuevo y de estar a nuestro lado”, de ser los responsables de heredar un país con 60 millones de pobres.

Afirmó que ahora corresponde al PRD la responsabilidad de dignificar a la política, y sostuvo que “no vamos a permitir que nos distraigan, porque los grandes problemas del país tienen que ver no con la vida privada del presidente sino con el hecho de que cada vez hay más pobreza”, además de que se deben aclarar los gastos ilegales del PAN y del PRI en las pasadas campañas presidenciales, conocidas como los casos Amigos de Fox y Pemexgate.

En Iguala, en ese día, en un acto similar en apoyo al candidato a diputado federal Juan Rodolfo Martínez, Robles destacó que, al igual como en Acapulco los gobiernos perredistas hacen las cosas diferentes, y citó la ciudad de México, con Andrés Manuel López Obrador; Zacatecas, con Ricardo Monreal; Baja California, con Leonel Cota Montaño, y Michoacán, con Lázaro Cárdenas Batel.

Dejar el debate frívolo de la vida privada

Ya en el cierre, el 1 y 2 de julio Rosario Robles estuvo en Chilpancingo, Acapulco y Zihuatanejo. El primer día se reunió en la capital del estado con empresarios, profesionistas y políticos identificados con el PRI, a quienes dibujó un futuro de país con sentido social y democrático, que su partido impulsará a partir del triunfo en las elecciones del próximo 6 de julio, cuando –dijo– ganarán la mayoría de los diputaciones de Guerrero.

Afirmó que los gobiernos perredistas son modelo de desarrollo con una “visión social republicana”, y por eso en Guerrero el PRD se convirtió en la primera fuerza política en la elección del 6 de octubre, al igual que ocurrió en las elecciones locales del estado de México, donde su partido avanzó de 21 a 24 por ciento en las preferencias electorales.

Convocó a los actores políticos nacionales y estatales a dejar de lado el debate “frívolo” de la vida privada de Vicente Fox y Marta Sahagún, y debatir los grandes problemas del país, como el empleo, que la gente ya identificó como una prioridad a resolver.

A pregunta, dijo que el PRD no es un “reducto” del PRI, y son bienvenidos todos los priístas que como Cuauhtémoc Cárdenas o Andrés Manuel López Obrador tuvieron el valor de dejar ese partido y fundar el PRD, que ahora es ejemplo de gobierno, “no como otros, que aunque quieren salirse tienen miedo por temor a que les pisen su larga cola que tienen”.

Dijo que si existe algún funcionario perredista corrupto el partido no lo defenderá, como sí lo hace el PRI con los líderes petroleros Carlos Romero Deschamps y Ricardo Aldana.

En Zihuatanejo, el segundo día, en conferencia de prensa en el último día de campaña del candidato a diputado federal del distrito 03, Francisco Chavarría Valdeolívar, Robles dijo que los perredistas “nos estamos enfrentando a los mismos adversarios, hoy estamos conociendo lo que sabíamos era un secreto a voces no sólo el regreso de Carlos Salinas, que tantas cuentas tiene que pagarle a este país, sino también un regreso concertado con el PAN, con el presidente Fox, porque como siempre, esos dos partidos (PAN y PRI) se ponen de acuerdo, pactan entre sí a espaldas del pueblo y por eso cada vez es mayor la responsabilidad que tiene el PRD”.

El PRD, con autoridad moral

El 1 de julio Rosario Robles se reunió con los equipos de campaña de las candidatas a diputadas federales de Acapulco, Rosario Herrera, por el distrito 09, e Irma Figueroa, por el 10. En un discurso triunfalista recordó que la víspera, la secretaria general del CEN del PRI, Elba Esther Gordillo, había hablado de que en Guerrero había riesgo de que ese partido perdiera diputaciones; “ellos ya saben que vamos a ganar. Este ambiente se siente en todo el estado. No es gratuito lo que declaró la secretaria general del PRI, de que hay focos rojos para ellos en Guerrero”.

Ante los equipos de campaña, Robles reivindicó al PRD como un partido de izquierda, y destacó además que frente al PAN y el PRD tiene “autoridad moral”, por no estar inmiscuido en escándalos políticos como el Pemexgate o los Amigos de Fox. Ahí, exaltó “la autoridad moral de un Cuauhtémoc Cárdenas, que le ha dado mucho a este país; de un Andrés Manuel López Obrador”.

Escándalos políticos provocan abstencionismo

En entrevista con El Sur, el 2 de julio, Rosario Robles Berlanga, aunque optimista en los resultados favorables al PRD, previó una participación electoral de un 50 por ciento: “Hay varias cuestiones que contribuyen a esto; en primer lugar, que es una campaña que se ha visto empañada por los escándalos políticos del Pemexgate y Amigos de Fox y eso no solamente afecta a quienes están involucrados directamente en estos escándalos sino a la política en su conjunto. La gente dice, la política es sucia, la política está vinculada a este tipo de situaciones, y le redunda esto en una apatía”.

Critica a sus compañeros en Acapulco que se inconformaron por la designación de Rosario Herrera e Irma Figueroa como candidatas, a partir de una encuesta que tuvo como criterio designarlas a partir de la cuota de género: “A mí me parece increíble y además una misoginia tremenda el que no se reconozca que quienes hoy son candidatas del PRD en Acapulco son magníficas compañeras, magníficas mujeres que van a hacer un papel muy digno en la Cámara de Diputados”.

Que los empresarios no vean al PRD como enemigo

La dirigente nacional del PRD habló de crear una agenda legislativa “no para partidos sino para la gente, poner una agenda que desde nuestro punto de vista es prioritaria no para los partidos, sino para la gente, y en torno a esta buscar coincidencias, construir consensos, buscar acuerdos de activación de nuestra economía, fomentar el mercado interno, mayor generación de empleo, más inversión pública, defensa de nuestro sector energético. En fin, varios temas que nos pueden permitir tener acuerdos con equis o ye fracción parlamentaria”.

“La gente ya no puede esperar, ya no le puedes decir oye espérate al 2006 que gane el PRD, no. Hay gente que se está muriendo de hambre, y tenemos que dar respuestas desde ahora”.

–Pero ahí pueden encontrar aliados poderos, por ejemplo el empresario más rico de América Latina, Carlos Slim, está promoviendo cambio en el modelo económico, terminar con lo que se llama el Consenso de Washington, una política de crecimiento…

–De nuestro mercado interno –ataja Rosario Robles– y no estar nada más dependiendo de las exportaciones. Así es, son voces muy fuertes desde el punto de vista económico, que también hay que sumar, de él y de otros empresarios.

–¿Hay una relación más allá de las formalidades con empresarios… encuentros, debates?

–Hemos estado en reuniones, llevamos incluso candidatos de Coparmex y de Canacintra en algunos distritos. Los llevamos como parte de este proyecto de ser un partido de todos, por supuesto candidatos con esta visión nacionalista, con una visión de entender que el haber mantenido una política de bajos salarios y asfixia del mercado interno al final de cuentas se volvió contra ellos mismos, y que a ellos les interesa que haya mejores salarios, que fortalezcamos el mercado interno, porque van a poder vender lo que producen. Necesitan políticas públicas que apoyen a la empresa mexicana para poder competir frente a una apertura indiscriminada y frente a productos que vienen a veces con dumping y de mayor ventaja que los que tenemos hoy en nuestro país. Sí tenemos relación con ellos, hemos estado en reuniones, hemos intentado decirles que no vean en el PRD a un enemigo, que no lo vean como un partido que no va a apoyarlos.