Protestan eventuales en el Recinto y en Finanzas de la Ssa; los excluyen de bases

Personal médico y de enfermería de contratos precarios afuera de las oficinas de la Subsecretaría de Administración y Finanzas de la Secretaría de Salud Foto: Jessica Torres Barrera

Lourdes Chávez

Chilpancingo

Más de 600 médicos y enfermeras de contratos precarios de la Secretaría de Salud volvieron a ser excluidos del proceso de basificación del IMSS-Bienestar porque el gobierno estatal envió con errores los registros de Clave Única de Establecimientos de Salud (Clues), como si fueran trabajadores de oficina, a fin de ganar espacios para personal de nuevo ingreso, familiares de políticos y de sindicalizados.
Concentrados en la Subsecretaría de Administración y Finanzas de la Secretaría de Salud, los afectados denunciaron que el viernes se publicó un listado de mil 900 trabajadores de contrato de la Secretaría de Salud estatal, y el domingo otra relación de alrededor de 200, para incorporarlos al IMSS-Bienestar.
En esas listas no aparece ninguno de los 585 médicos y enfermeras que en julio firmaron contratos con el Formato de  Movimiento de Personal (Fomope), para recibir un mejor salario durante tres meses.
Los beneficiarios del Fomope denunciaron que las autoridades los engañaron porque omitieron decir que al firmar ese contrato, se borraba su antigüedad de 10 y hasta 15 años en la Secretaría de Salud, y se quedaron fuera de la basificación federal.
Asimismo, indicaron que otras 100 enfermeras, médicas de contrato y cubre incidencias que participaron en las evaluaciones estatales, tampoco aparecen en las relaciones, pero sí aparecen los nuevo ingreso con uno o dos años, y hasta seis meses, que son familiares de políticos y de personal de base sindicalizado.
Recordaron que el acuerdo con el gobierno estatal, fue que se respetará la antigüedad, pero siguen los siguen excluyendo. A mediados de año también protestaron para denunciar que se beneficiaba en el proceso a recomendados de la Sección 36 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (Sntsa).
Por separado un grupo de enfermeras del Hospital del Niño y de la Madre Guerrerense protestaron en el Recinto de las Oficinas del Poder Ejecutivo del Estado, para exigir respeto a la minuta que firmó antes el secretario General de Gobierno, Ludwig Marcial Reynoso Núñez, para privilegiar el ingreso al IMSS-Bienestar a quienes tienen más años de servicio en el sector con los ingresos más bajos.
Las enfermeras señalaron que, a la puerta del estacionamiento que habían tomado a modo de presión, llegó personal de contrato de la Secretaría de Salud, un grupo sólo hombres que firmaron contrato con el IMSS-Bienestar, para quitarlas a empujones del acceso.
Mostraron la videograbación del momento en que el grupo de hombres intervino para quitarlas, donde se escuchan la discusión de ellos para abrir el acceso, y de las enfermeras advirtieron que si ellos ingresaban, ellas también.
Eran como las 12 del día. En ese momento una comisión de enfermeras estaba adentro del Recinto del Ejecutivo, buscando el diálogo con las autoridades.
Una enfermera de contrato eventual, con ocho años de servicio en un centro de Salud la Sierra,  acusó al gobierno del estado de haber enviado a la federación la Clave Única de Establecimientos de Salud (Clues) con errores, como si fueran trabajadores de oficina.
“En el proceso de basificación, por esa razón nos dejaron fuera. Fue un plan con maña para meter a familiares de políticos y personal de base, que sabían que si venía el proceso de basificación. Para poder meter a sus allegados están dejando fuera a medicos, odontologos, psicológos”, indicó.
Recordó que desde agosto del año pasado han hecho de todo para evitar esta injusticia. Incluso hicieron llamados a la gobernadora Evelyn Salgado Pineda y en la manifestación decían: “gobernadora porfa, cheque, gobernadora, porfa vea que están cometiendo una injusticia con nosotros, y no le importa”.
Indicó que en el Recinto los recibió una persona de nombre Iván, del departamento de Recursos Humanos, y de manera muy grosera, les dijo que el estado mandando la información, y si no estaba bien, que no era problema de él, porque ellos no tienen forma de saber que lo que nosotras digamos es verdad,que estamos en Centros de Salud o en hospitales. Si ellos dicen que están en oficina, entonces están en oficinas”.
Indicó que entonces decidieron cerrar el paso al Recinto del Ejecutivo, donde otros trabajadores de contrato, allegados al sindicato, las quitaron a empujones. Regresaron a la subsecretaría de Finanzas, donde estaban los beneficiarios del Fomope concentrados
Recordó que entregaron sus documentos en esa oficina, para que verifiquen donde laboran, y no los toman en cuenta.
El pago de trabajadores precarios  ha sido de mil 800 pesos a enfermeras, como si fueran auxiliares, aunque muchas tienen especialidades, y de 5 mil a los médicos.

 

Muere una mujer en el Hospital del Niño y la Madre donde no había médicos para atenderla

Lourdes Chávez

Chilpancingo

Ayer en la madrugada, en el Hospital del Niño y de la Madre Guerrerense ocurrió la muerte materna de María Concepción de 39 años de edad, que solicitó atención médica de urgencia la madrugada del 4 de enero.
A mediodía, sus familiares denunciaron negligencia médica en las primeras horas que solicitaron ayuda, porque no había ginecólogo ni anestesiólogo para llevar a cabo el procedimiento, en este caso un aborto porque el producto llegó muerto.
Los directivos del nosocomio notificaron ayer del caso a la Fiscalía General del Estado como probable violencia familiar. La intervención de la Policía Ministerial motivó la denuncia pública de los familiares que no tenían conocimiento de esta situación, varias horas después del fallecimiento de María, a las 2:30 de la madrugada.
Mientras se dirimía en el hospital la autorización del traslado del cuerpo al Servicio Médico Forense, una fuente de la familia detalló que la paciente llegó el martes a las 4 de la madrugada al hospital, grave, con su esposo, a quien le dijeron que no había ginecólogo ni anestesiólogo para la intervención.
De las 6 a 8 de la mañana tuvo la primera de cuatro cirugías en dos días, que incluyó una histerectomía (extracción del útero) porque no se podía detener el sangrado.
Sus familiares estuvieron atentos a los requerimientos, como la búsqueda de donadores de sangre, hasta la madrugada de este miércoles 6, cuando les avisaron que no resistiría más y murió.
Uno de sus familiares aclaró que estaban en espera del cuerpo, cuando personal se acercó a preguntarles si habría alguna denuncia, sin entender a qué se referían y comenzaron a dudar del procedimiento médico.
Cuando llegaron los policías ministeriales a interrogar a los familiares que acompañaron a la paciente, consideraron que el hospital buscaba deslindarse de los hechos, y culpar al esposo del desenlace.
Por otro lado, se tuvo información de que la enferma dijo haberse caído cuando entró al hospital, luego de una hora comenzó a convulsionar y fue intubada. Ya no recuperó el conocimiento, sin embargo, el personal estimó que las lesiones no correspondían a un accidente y ayer notificaron el caso como probable violencia familiar.
Consultada vía telefónica, la secretaria de Salud, Aidé Ibárez Castro, indicó que en una reunión se hacía una revisión del caso y de lo que pasó en la atención de la paciente.
Señaló que cada vez son más frecuentes las atenciones por abortos, y reunía la evidencia para ver cómo atender este fenómeno.

 

Denuncian padres de bebés un brote de candidiasis en el Hospital de La Madre y el Niño Guerrerense en la capital


Madres que tienen internados a sus bebés nacidos entre hace una semana y hasta hace cinco meses en el Hospital del Niño y la Madre Guerrerense, en Chilpancingo, denunciaron que hay un brote de candidiasis (cándida), y que sus hijos ya presentan la infección que impide que se recuperen, además de que no hay medicamento para darles tratamientos ni batas que necesitan para visitar a sus hijos.
Los familiares dijeron que durante el tiempo que han estado en el hospital se han enterado de la muerte de varios bebés.
Informaron que en una reunión, el subdirector del hospital, Julio César Polanco les dijo que en todos los hospitales hay riesgos de infecciones, pero desmintió que hubiera un brote de candidiasis en el de la Madre y el Niño Guerrerense.
Unas 15 familias de bebés internados ahí, denunciaron, afuera del hospital, arbitrariedades que han sufrido tras los nacimientos de los bebés, y que tienen conocimiento de que hay más de 30 bebés internados, pese a que sólo hay capacidad para 15. Los familiares prefirieron no dar sus nombres ante el temor de represalias.
Una madre contó que lleva tres meses en el hospital después del nacimiento de su hija, y que no hay doctores ni enfermeras suficientes para dar el servicio, que hacen falta leche y medicamentos, e incluso que está comprando Casponfungina, medicamento que se utiliza para tratar la infección de candidiasis de su bebé, que deben traer desde la Ciudad de México, y que cuesta casi 8 mil pesos.
La madre resaltó que los bebés que están en terapia intensiva tienen un seguro que cubre la compra de cualquier medicamento, pero les dicen que no hay dinero.
Dijo que el hongo que provoca la candidiasis está en la vagina de las mujeres, pero que la mayoría de los bebés del Hospital de la Madre y el Niño Guerrerense nace por cesárea y no hay forma de que se infecte en esa cirugía, “entonces se infectan al pasar los días en este hospital, se les bajan  las plaquetas y se les bajan las defensas”, explicó.
Dijo que una conocida suya que es médica en la Ciudad de México le informó sobre esta infección, porque en el hospital no les dan información detallada, y que incluso hay enfermeras y médicos que les responden que no les explican porque no lo entenderían.
Contó que a ella no le querían decir qué tipo de infección tenía su bebé, que le reclamó a la pediatra y, en tono prepotente, ella le contesto que era cándida, después, sin mostrarle unos estudios, le aseguró que ella y su esposo tenían sida y habían contagiado a su bebé. Añadió que ella notó que su bebé tenía fiebre y la enfermera no la atendía porque estaba tomándose fotos.
Otra madre dijo que iba a cumplir 15 días en el hospital, que su hija nació prematura de siete meses, con problemas respiratorios, y después le dijeron que también tenía una infección, pero no le dijeron de qué tipo.
Otra mamá que lleva 19 días en el hospital, contó que el día de su parto le dijeron que aún no se le había roto la fuente, que sólo tenía flujo, y le pidieron que retuviera al bebé porque no había espacio en el quirófano, pero su bebé nació de inmediato, mientras las enfermeras estaban preparando su pasada. A ella también le dijeron que su bebé tenía una infección.
“Las enfermeras son muy prepotentes, (aunque) no todas, no tienen ni ética profesional”, reprochó.
Dos papás contaron que, sobre la infección de sus bebés les dicen que las madres tenían cándida y contagiaron a sus hijos, pero aseguraron que sus esposas no padecían de esa infección, porque llevaban un control médico antes del nacimiento de sus hijos.
Otra de  las denuncias que hicieron es que se han dado cuenta de que no les cambian el pañal a sus bebés, que los han encontrado con excremento seco, incluso en los pies.
Un papá dijo que su bebé no tiene la infección, pero que le indicaron que no se acercara a los papás que sí la tienen, ni que ocupara la misma bata que ellos usan, ante el riesgo de transmitir la infección a su bebé.
Sin embargo, indicó que es imposible no ocupar las mismas batas, porque se ponen la que esté disponible.

Reconoce el subdirector del hospital carencia de medicamentos y batas para las visitas

Luego de la denuncia afuera del hospital, los familiares pidieron hablar con el subdirector, Julio César Polanco, porque el director no estaba. Los familiares le expusieron sus demandas y dudas.
El también ginecólogo les dijo que en todos los hospitales hay riesgo de que padezcan infecciones los bebés, y que en el hospital no hay un brote de candidiasis.
Les aseguró que a los bebés les están haciendo estudios constantemente, que varios médicos dan su diagnóstico.
Aceptó que hay carencia de medicamentos, pero que la revisarían este lunes, igual que el faltante de la leche para los bebés.
Sobre los malos tratos que reciben de médicos y enfermeras, Julio César Polanco prometió que hablaría con ellos. Sin embargo cuando una mamá explicaba el trato que les daban, él dijo que no podía opinar al respecto, porque desconocía el modo en que les dieron la información, pese a que la mujer detalló el hecho.
El funcionario se comprometió a que también les informaría del estado de los bebés.
Respecto a que está saturado de bebés el hospital, el subdirector precisó que el cupo es de 16 bebés, sin embargo si llega una paciente no le pueden negar el servicio.