Se audita actualmente a la UAG en los procesos administrativos, y pronto se hará en lo educativo

Jacob Morales Antonio

Chilpancingo

La directora general de Planeación y Evaluación Institucional de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Arely Almazán Adame, informó que las auditorías externas realizadas a la institución cuestan unos 164 mil pesos, que el área financiera es la que más observaciones tiene y que se han subsanado.
En entrevista, Almazán Adame, quien asumió el cargo hace un año y dos meses, dijo que la auditoría externa que inició el lunes y termina hoy, por parte de la empresa American Trust Register, cuesta por área unos 4 mil pesos, y con ellos se obtendrá el certificado ISO-2009-2015 en los procesos de administrativos, y por primera vez, de manera piloto, se evaluará lo educativo.
Indicó que estas revisiones se han realizado desde hace 14 años y aumentaron en seis departamentos en el último año, al pasar de 35 a 41 áreas donde se revisan los procesos administrativos. Resaltó que la UAG es la primera universidad en el estado donde se realiza el cambio y la transición de la certificación ISO-2009-2008, al ISO-2009-2015.
De las evaluaciones realizadas, afirmó que son “una inversión” y en caso de que haya recomendaciones, hay un periodo donde la UAG realiza las adecuaciones y después solicita una segunda visita de revisión, atendiendo las recomendaciones.
“Las recomendaciones no son algo de lo cual nos espantamos, las tomamos con actitud positiva”. Respondió que el área financiera es la que más revisiones tiene, mismas que se han subsanado, pero no entró en detalles.
Abundó que en el sistema de gestión de calidad se manejan dos recomendaciones, las menores y las mayores, pero que el año pasado no hubo ninguna, y espera que así termine la revisión que inició el lunes.
Almazán Adame indicó que pese a las auditorías, la UAG no está exenta de ninguna auditoría federal y del estado, “cuando llegan estas revisiones, de estos órganos federales y estatales, es parte de lo que abona a la buena rendición de cuentas, al contar con un sistema de gestión de calidad, por supuesto que nos ordena y normaliza, y estamos obligados a llevar un control de nuestras funciones y el de los resultados”.
De la ampliación de la certificación al proceso educativo en la UAG, esperó un impacto directo en la formación del estudiante, así como en los procesos administrativos. Indicó que de manera piloto la evaluación inició en la escuela de Enfermería 1, de Chilpancingo.
De las críticas que recibe la universidad y el rector Javier Saldaña Almazán por la opulencia, dijo que las respeta, pero que la institución ha dado resultados, “ es una institución antes de Javier Saldaña y después de Javier Saldaña. La sociedad, la gente lo comenta y lo reconoce”, pero que aún hace falta mucho por hacer.
La también esposa del rector indicó que si no hay resultados, es complicado atraer un presupuesto a la institución, “si los resultados no se ven, no se reconocen”. Informó que una vez que estén los resultados de las evaluaciones se darán a conocer de manera pública.

Revisan la documentación de 310 trabajadores

A las 11 de la mañana, como parte del proceso de auditorías a la UAG, se realizó la revisión de manera aleatoria a un grupo de 310 trabajadores y funcionarios de la institución, que son pagados con dinero federal, incluido el rector, para constatar la legalidad de sus estudios y documentos oficiales, y conocer si cumplen con el perfil para estar ocupando cargos.
En su discurso durante el acto, el rector dijo que por condiciones “delicadas”, los auditores no pudieron ir a las regiones del estado para poder realizar las observaciones y por ello se citó a los trabajadores en las instalaciones de la Rectoría.
Además, dijo que a él le da gusto que se realicen las auditorías, porque antes de su administración la UAG tenía rezagos en todas las áreas. Recordó que cuando llegó puso orden en la situación financiera de la universidad, “empezamos a sanear la universidad”, destacando que en el estado, la UAG ocupa uno de los tres primeros lugares en transparencia.