Ya les pagaron su pensión de enero pero falta el resto del aguinaldo, informan jubilados

La dirigente de los jubilados y pensionados 3 del Instituto de Seguridad Social de los Servidores Públicos del Estado de Guerrero (ISSSPEG), Elizabeth Rocío Muñoz Romero, informó que ya les pagaron la mensualidad de enero, pero falta la segunda parte del aguinaldo, el que esperan que sea dispersado el viernes.
El pago se dio luego de que el viernes los jubilados y pensionados bloquearon la avenida Costera, y este lunes cerraron por cuatro horas las oficinas de la Secretaría de Finanzas, en Costa Azul, para exigir el pago de ambos conceptos, que tenían que habérselos depositado a principios de enero.
Durante la protesta demandaron la intervención de la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, para resolver el problema que está afectado a más de 6 mil personas.
En declaraciones, la representante, Elizabeth Rocío Muñoz, dijo que desde el lunes en la tarde se empezó a dispersar el pago de la mensualidad a algunos trabajadores y siguió este martes, para las regiones del estado, que el pago de la segunda parte del aguinaldo se les dijo que es posible que se les esté pagando el próximo viernes, por lo que “esperemos que sí cumplan”.
Sobre si ya hubo respuesta a la exigencia de que se les dé una fecha fija para el pago de la mensualidad a los jubilados y pensionados a través del ISSSPEG, respondió que les dijeron en el instituto que se va tratar de que se conserven la fecha del 25 de cada mes, esperando que cumplan.
Dijo que les molestó que se haya tenido que llegar hasta el 31 de enero para recibir el pago, porque es un dinero que aportaron, como en su caso trabajo en el gobierno durante 36 años. Agregó que muchos ya están enfermos y no tienen para comprar su medicina y la situación la vivieron difícil durante la pandemia. (Karina Contreras).

Se quejan de las cuotas de inscripción en la UAG; van de mil a mil 420 pesos

 

En el penúltimo día de las inscripciones para las licenciaturas de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG) tocó el turno a los estudiantes que van a ingresar a Economía, Sociología, al Instituto Internacional de Estudios Políticos Avanzados Ignacio Manuel Altamirano (IIEPA-IMA), así como a la Unidad Académica de Ciencias y Tecnologías de la Información.
La queja de los padres fue por los altos costos del pago de inscripción, aunque uno de ellos reconoció que llevara sus hijos a una universidad particular costaría un “billetote”.
En una visita a la Preparatoria 2 se observó que el movimiento fue más lento, pues a las escuelas a las que tocó la inscripción fueron las que tienen una matrícula moderada. Ahí los jóvenes tienen que seguir varios pasos para quedar inscritos; muchos de los jóvenes van acompañados de su mamá y en pocos casos se ve al papá. Los padres son de gran ayuda, pues al faltar la copia de un oficio o van ellos o cuidan el lugar.
Uno de esos casos es el de la señora Rosa Martínez, quien espera pacientemente a su hijo sentada en una silla, pues le faltaron unos documentos. Comenta que dejó desde las 6 de la mañana en la Preparatoria a su hijo y fue a pedir permiso a su trabajo, donde se dedica a hacer aseo; comenta que su hijo estudió en el CETIS y que es el menor de cuatro hermanos.
Comentó que su hijo va estudiar en la Unidad Académica de Ciencias y Tecnologías de la Información, asegura que es bueno para las computadoras y que aunque la inscripción le costó mil pesos no le importa, porque agrega doña Rosa: “Uno quiere que sus hijos estudien, uno de pobre ve cómo junta el dinero”.
Reconoce que la inscripción es cara y que ella apenas gana para comer, pero que cuando su hijo le dijo que quería seguir estudiando, entró a una tanda de 4 mil pesos para afrontar los gastos.
Doña Rosa reconoce que es un gasto fuerte, pero le saldría más caro en una universidad privada, que ella no tienen dinero, pues apenas gana para comer haciendo aseo. Eso sí, dice que a su hijo lo visita regularmente en las escuelas donde ha estudiado y pide calificaciones, porque no se va estar matando trabajando para que su hijo no vaya a la escuela. Aunque dice que su hijo afortunadamente no tiene ningún vicio, se tiene que ver las amistades.
Mientras Mirna González comentó que se iba inscribir en la Facultad de Economía, donde la inscripción fue de 880 pesos, pero antes para tener derecho al examen de admisión pagó 540 pesos, es decir, pagó mil 420 pesos.
Mientras que para ingresar al IIEPA los aceptados pagaron mil 120 pesos. Los estudiantes y padres consultados sobre los costos para ingresar a las escuelas de la UAG reconocieron que son caros, pero saldría más cara una escuela privada, pues aquí es nada más al ingresar y en otras escuelas son por mes o semestre.