Está rebasado el Hospital General en el servicio de cirugías, dice el director


El director del Hospital General, Félix Edmundo Ponce Fajardo, informó que a diario se hacen hasta 30 operaciones quirúrgicas en el nosocomio.
De la manifestación de algunos pacientes que reclamaban la mala atención, aseguró que se da prioridad a quien llega al área de Urgencias.
Reconoció que en la atención quirúrgica están “rebasados”, que si en un día se tienen programadas 27 cirugías se difieren 3 por las urgencias que llegan.
Vía telefónica, Ponce Fajardo informó que ya fue operada la mujer que tenía una hernia, luego de que se denunció que se había retrasado la cirugía.
Dijo que en la manifestación fue aprovechada por quienes dijeron ser representantes de dos personas enfermas. “Una de ellas internada y en espera de ser intervenida en quirófano, y otra que aprovechó la situación cuando su caso era atendido en otro nosocomio”.
“Ellos querían que los metieran ya, de momento, cuando estamos recibiendo heridos todo el tiempo”, explicó sobre la denuncia de quien en la protesta del miércoles se presentó como gestor social, Jesús Guerrero Nava, y denunció que había negligencia por parte del personal médico.
El director explicó que la mujer qe tenía una hernia, de quien no precisó el nombre, sí estaba programada para que se le interviniera el miércoles, pero que la urgencia tiene prioridad.
Abundó que la hernia de la paciente no era “complicada”, que la misma tarde del miércoles se operó y está en recuperación.
Agregó que después de la manifestación de las personas afuera del hospital, habló directamente con la mujer: “yo le pregunté a la señora si tenía algún inconveniente pero me dijo que no”, y criticó que el supuesto gestor social manipuló la situación de la paciente.
Ponce Fajardo dijo que a los familiares de la mujer les pidió “comprensión” porque el hospital tiene un alto flujo de intervenciones quirúrgicas al día.
Agregó que si llega un niño en estado grave de salud o una mujer embarazada se les atiende primero, y que a una paciente con cirugía programada, como una hernia catalogada como “no complicada”, sólo se pospone.
De la joven Concepción Mondragón, quien padece de vesícula biliar, comentó que ya se le había informado que sería atendida en la Unidad Médico Quirúrgica de Hogar Moderno, pero que ésta decidió unirse al gestor social.
Dijo que en promedio se hacen de 25 a 30 cirugías tanto programadas como de urgencia en el hospital.
Ponce Fajardo reconoció que en la atención quirúrgica están “rebasados”, que si en un día se tienen programadas 27 cirugías se difieren 3 por las urgencias que llegan.

Muere una bebé por negligencia en el hospital general de Chilpancingo, denuncian sus familiares

 

Un derechohabiente del sistema de salud del estado denunció que una integrante de su familia perdió a su bebé por negligencia médica en el Hospital General Raymundo Abarca Alarcón, quien llegó de parto el martes a las 12 de la noche, pero fue atendida hasta el miércoles a las 11 de la mañana, y a las 2 de la tarde le notificaron que la bebé había muerto.
El quejoso, Tomás Alonso Castañón denunció que en el Hospital General Raymundo Abarca Alarcón, de Chilpancingo, ubicado en la salida norte de la capital, en Tierras Prietas, una integrante de su familia comenzó el martes a las 12 de la noche con labor de parto, pero era de alto riesgo, por lo que la llevaron a urgencias, “no se le atendió debidamente a pesar de que se le indicó a los médicos que su parto era de alto riesgo”, explicó.
Dijo que su familiar fue atendida hasta el miércoles a las 11 de la mañana, y a las 2 de la tarde les notificaron que su bebé había muerto.
El padre de la bebé, quien se reservó su identidad, fue entrevistado en el panteón nuevo en Chilpancingo, donde acudió para sepultar a su hija, donde informó que el martes, “mi esposa entró al hospital en el área de urgencias porque tenía mucho sangrado, pese a eso la doctora no procedió a hacerle una cesárea inmediata; el embarazo, desde un inicio era de alto riesgo porque tenía la placenta previa y poco a poco se fue recuperando, al final del embarazo presentaba una placenta del grado 3, por lo que no podía tener un parto natural”, indicó el padre.
Recriminó que la ginecóloga a cargo, de quien desconoce su nombre, le dijo que debería de dilatar para que naciera la bebé, pero en las condiciones en que se encontraba su mujer no podía tener un parto natural, “era necesaria una cesárea; la ginecóloga hizo caso omiso de todo lo que se le había dicho, se comportó de mala manera; las consecuencias se las pasó a (trabajadores del) otro turno, quienes estabilizaron a mi esposa porque le quería dar una parálisis facial y no le podían hacer la cesárea; pero agradezco al turno de la mañana, que sacó a la bebé, aunque no se pudo salvar”.
El diagnóstico de la muerte fue que, debido a que su mujer tenía las plaquetas bajas afectó a la bebé.
El padre de la menor manifestó que no procederá legalmente porque la familia no quiso realizarle la autopsia a la bebé, por lo que no tienen con que respaldar sus dichos si se levanta una demanda.
Pidió que si en el hospital sólo hay un ginecólogo, incorporen a más para que den un buen servicio y no se repitan este tipo de casos, “si la ginecóloga no sabe, pues entonces que la cambien”, concluyó el padre.