Preocupa a pueblos del alto Balsas la contaminación del río que cambió de color

Preocupa a pobladores de 15 comunidades del alto Balsas la contaminación del río que cambió de color

Los vecinos siguen utilizando el agua para regar los cultivos, para abrevaderos del ganado y en algunos pueblos para bañarse y hasta para beber y cocinar, advierten. En Tula del Río, municipio de Mártir de Cuilapan, algunos vecinos se enfermaron luego de comer peces, informan

Zacarías Cervantes San Juan Totolcintla, Mártir de Cuilapan

Pobladores nahuas de las localidades de la zona del alto Balsas, están preocupados por la contaminación del río. Desde hace dos semanas el color del agua cambió de azul a verde, y en algunas localidades como San Juan Totolcintla, municipio de Mártir de Cuilapan, murieron algunas tortugas y mojarras. Mientras que en Tula del Río, del mismo municipio, algunas personas se enfermaron luego de comer peces. Formalmente, y por escrito, el miércoles de la semana pasada representantes de las comunidades de San Juan Totolcintla, San Agustín Oxtotipan y Tula del Río, de Mártir de Cuilapan, informaron del problema y entregaron muestras del agua a la Secretaría de Salud (Ssa), pero hasta este lunes no tenían respuesta, declaró el presidente del Comisariado de Bienes Comunales de Totolcintla, Melquiades García Ríos. Los propios representantes de los pueblos han recomendado a los habitantes que tomen precauciones, pero el agua del río sigue siendo utilizada para regar los cultivos, para abrevadero del ganado, y en algunos pueblos la utilizan para bañarse y hasta para beber y cocinar. En un recorrido este lunes, en la ribera del río se pudo constatar que el agua es de color verde; el comisariado de Bienes Comunales dijo que siempre ha sido azul. Explicó que el cambio de color del agua preocupa a pobladores de cuando menos 15 comunidades que se encuentran asentadas en las orillas del río, desde Tlalcozotitlán, municipio de Copalillo, hasta Tlamamacán, municipio de Mártir de Cuilapan, aunque dijo que río abajo hay más comunidades del municipio de Eduardo Neri (Zumpango) por las que pasa el afluente, pero que no han tenido contacto con sus autoridades o representantes. Consultado a la orilla del río, la autoridad comunal de Totolcintla declaró que desde hace dos semanas están con la incertidumbre, ante el cambio de color del agua. “Por eso fuimos a la Secretaría de Salud a pedirles que investiguen y les llevamos una muestra, porque así como está no es normal, el agua siempre ha sido azul”. Explicó que comenzaron a notar el cambio del color desde el jueves 15 de marzo. Ya han padecido la contaminación del río antes, indican “A nosotros nos preocupa esta situación porque ya nos ha tocado vivir epidemias por la contaminación del agua”. Informó que en 1988 murieron en San Juan Totolcintla, San Agustín Oxtotipan y Tula del Río 30 personas por cólera. Un año después, en 1999, el agua se puso negra y entonces se murieron todos los peces, incluso reses. Recordó que esa vez las autoridades reconocieron oficialmente que el ingenio azucarero de Zacatepec, Morelos, lavó sus instalaciones y descargó los desechos al río Amacuzac, que desemboca en el Balsas. “Y ahora, otra vez nos está pasando lo mismo, cuando la variedad de especies apenas comenzaba a multiplicarse; hay bagre, mojarra, pez diablo, tortugas y hasta langostino, empezaba a haber aquí, quien sabe de dónde llegaron”, declaró. Por la ribera del río se observó a campesinos trabajando sus tierras sembradas de sandía, melón y milpa, que riegan con agua del río que extraen a base de bombeo. Por la orilla también se observaron reces y asnos que bajan a beber agua. García Ríos dijo que cuando el agua está normal, es común ver en la orilla a la gente pescando o bañándose. Ayer la orilla lucía solitaria. Contó que algunos ya no pescan por temor a que el agua tenga residuos tóxicos, y que otros no bajan a pescar porque el agua está oscura y aunque se sumergen al fondo del río no alcanzan a ver las mojarras. “Nos preocupamos porque no sabemos qué es lo que tiene el río, por eso nos reunimos los comisariados de los tres pueblos (San Juan Totolcintla, San Agustín Oxtotipan y Tula del Río), para pedir a la Ssa que investigue, que haga un estudio porque no es normal que esté así el agua”, insistió. El escrito que entregaron a la Ssa el miércoles de la semana pasada fue firmado por el comisariado de Bienes Comunales de Totolcintla, García Ríos; el de Tula del Río, Rogelio Vicario, y el de San Agustín Oxtotipan, Ignacio Morales Mundo. “Lo que pedimos es para evitar alguna tragedia en esta región, pero les llevamos la muestra y hasta hoy no nos han dado una respuesta, no nos han dicho por qué el cambio de color”, se quejó. El problema más grave ocurrió en Tula del Río, en donde a algunos pobladores “les dolió el estómago” después de que comieron pescado la semana pasada. Otras familias guardaron el pescado seco, pero al día siguiente “ya no servía”. Sin embargo en este pueblo no se encontró al comisariado Rogelio Vicario, quien fue el que alertó a su vecino de Totolcintla sobre el problema. García Ríos informó que el sábado llegó a estas tres comunidades una brigada de la Ssa, pero no como respuesta al escrito que entregaron a la dependencia, sino que fue un recorrido de rutina del personal, según les dijo a los pobladores Alfredo Duque Vélez, quien encabezaba al grupo. Los integrantes de esta brigada repartieron entre los pobladores frascos de cloro para desinfectar las verduras y purificar el agua que consumen; asimismo, se llevaron muestras de agua del río a petición de la gente de los pueblos. “Nosotros les dijimos que eso ya lo hacemos, porque las mujeres tienen talleres en los centros de salud, en donde les dicen cómo van a desinfectar el agua, cuantas gotas le tiene que echar al agua de tomar, y ahora lo que queremos es que nos digan qué es lo que tiene el agua para evitarnos problemas o una tragedia”, insistió. Aunque ayer no se encontraron peces muertos, García Ríos aseguró que la semana pasada unos pescadores encontraron tortugas muertas y vieron peces “que venían flotando en el agua”. Admitió que, si bien esta vez el problema no es tan grave como en 1998 y 1999, la gente está preocupada y quiere que las autoridades les dé una explicación del cambio de color del agua. Dijo que el agua del río es vital para los pobladores, porque la usan para el riego de sus cultivos de sandía, maíz y melón. También baja el ganado a beber agua. Aseguró que en algunas comunidades asentadas cuesta abajo, como Analco, San Agustín Oapan y San Miguel Tecuiciapan, San Marcos Oacatzingo y Tlamamacán utilizan el agua del río para consumo humano, debido a que no cuentan con manantiales. Informó que cuando menos en San Juan Totolcintla les han pedido a los habitantes que tomen precauciones y que si sienten algún síntoma, de inmediato vayan al centro de salud. “Les hemos dicho, pero siguen viniendo algunos vecinos, sobre todo a pescar. Ayer estuvimos en San Agustín Oxtotipan y vimos que llegaron gentes a pesar”, dijo. Informó que para los habitantes es difícil saber de dónde se está descargado el agua verde y lo que tiene, porque en el Balsas se juntan cuatro ríos, el que baja de Amacuzac, Morelos; el de Tlapa, de Puebla y otro que viene de La Esperanza, de Mártir de Cuilapan. “Por eso le estamos pidiendo a los gobiernos estatal y federal que intervengan, que hagan un estudio, que nos escuchen como pueblos indígenas, les estamos haciendo un llamado para no después lamentar alguna tragedia, porque ya han sucedido aquí. No tenemos grandes cosas, sólo el río que para nosotros es un tesoro, algunos tienen ganado y de allí toman agua, y estamos haciendo la petición para evitar que se mueran otra vez los animales”, declaró. Después advirtió, “que nos escuchen, les estamos pidiendo sensibilidad, no estamos tomando ahorita ninguna medida de presión, solamente les estamos pidiendo que intervengan en esto”. Al gobernador, Héctor Astudillo Flores, le demandó concretamente que instruya a sus secretarios para que hagan algo, “que vengan y que vean esto”, dijo señalando el caudal verdoso. Informó que al no tener respuesta al oficio que entregaron a la Ssa dirigido, esta semana van a entregar otro al gobernador Astudillo, “para que nos informen qué está pasando y no estemos con la duda, con la incertidumbre”. El comisariado ejidal también denunció que estas comunidades no cuentan con el apoyo para el saneamiento permanente del afluente del río y que son los propios habitantes los que se encargan de la limpieza. Aseguró que se integran comisiones y que cada domingo una de ellas se encarga de recoger la basura para que no vaya a dar al río. Asimismo informó que actualmente están trabajando en un proyecto de reforestación de 100 hectáreas cerca de la comunidad para proteger los mantos acuíferos. En las 100 hectáreas van a plantar tepehuaje, guaje, guamúchil y maguey, que son variedades propias de la región.

Vecinos han enfermado por consumir agua del Balsas, informa el alcalde de Zumpango

El alcalde de Eduardo Neri (Zumpango), Pablo Higuera Fuentes confirmó que hay quejas de los pobladores de Amatitlán, Mazapa, Carrizalillo y Mezcala sobre la contaminación del río Balsas, al que llegan desechos de la mina Los Filos, ubicada en su municipio. Confirmó asimismo que, en su municipio se registraron casos de vecinos que han enfermado tras consumir el agua del río Balsas, por lo que pidió a la Secretaría de Salud municipal un monitoreo del agua. Este lunes, el alcalde perredista asistió a la firma del convenio de Ayuntamientos para la entrega de fertilizante del programa Más Maíz, en Casa Guerrero, donde indicó que, derivado de las denuncias de pobladores, la Secretaría de Salud municipal monitoreó la calidad de agua. “Hace tres meses, platicamos con la empresa minera que trabaja en Carrizalillo, ante las enfermedades que han presentado los pobladores, y las medidas que tomaron fueron llevarles agua en cada casa”, agregó. Detalló que, los casos de personas enfermas por consumir agua del río se han registrado en las comunidades de Mezcala y Mazapa, que se ubican dentro del rango de operación de la minera, que se señala como generadora de contaminación. Confirma que grupos de la delincuencia operan en la Autopista del Sol También durante la consulta se le preguntó por el asunto de la inseguridad en el tramo de la Autopista de Sol que cruza su municipio, y confirmó que ahí operan grupos de la delincuencia organizada. Informó que, sobre estos hechos y el incremento de la operación de grupos del crimen organizado en asaltos a turistas, fue informada la Secretaría de Seguridad Pública del estado. Detalló que los crímenes contra turistas en la Autopista del Sol la generan grupos que llegan de las comunidades de Plan de Liebres y de Huiziltepec. “Son grupos que vienen de la parte norte, es decir, de Tlacotepec, se meten por varias vías, algunas brechas en esa zona”, agregó. Reconoció que durante los últimos días se han incrementado los problemas de asaltos, pero que desde hace un año y medio se ha reportado a la Secretaría se Seguridad Pública del estado del aumento de los asaltos. Señaló que los asaltos en la carretera federal y en la autopista del Sol han sido recurrentes, e informó que su director de Obras Públicas fue asaltado en el tramo de Zumpango-Iguala cerca de Casa Verde, donde le quitaron su camioneta. (Anarsis Pacheco Pólito / Chilpancingo).

Insiste la alcaldesa de Apango en un proyecto alternativo para abastecerse de agua potable

La alcaldesa de Mártir de Cuilapan, Felícitas Muñiz Gómez informó que unos 5 mil habitantes de la cabecera municipal, Apango, tienen problemas para acceder al servicio público de agua potable, y se espera que un proyecto alternativo resuelva permanentemente el suministro. Este lunes al mediodía, la alcaldesa asistió al acto protocolario de firma de convenio en Casa Guerrero, donde señaló que ante el conflicto entre habitantes de la comunidad de Zotoltitlán y la cabecera municipal, se insiste al gobierno del estado que cree un proyecto que ayude a abastecer de agua potable. Reconoció que la tensión entre las dos comunidades permanece tras el asesinato de comisario y su hijo el jueves pasado. “La falta de agua está desde hace unos 30 años que hemos vivido este tipo de situación, ahora tenemos poco agua para solventar el problema”, agregó. La alcaldesa insistió en que hace más de dos años se trabaja en un proyecto con el gobierno del estado para cumplir el abasto de agua para la cabecera municipal, y así evitarse una constante confrontación con los habitantes de Zotoltitlán. Señaló que, inclusive se logró acceder a dinero a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), con el programa nacional de Fonoregion, con el que se asigna dinero para la construcción de dos pozos profundo con el que se plantea trabajar con dos constructoras. Recordó que, en enero de este año inició además la construcción de un pozo profundo para saber la cantidad de agua que se pueda extraer. “Ya teníamos otro pozo, uno está ubicado en Xacalco y otro en la parte norte de Apango”, afirmó. Dijo que para este proyecto, la Comisión de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento del Estado Guerrero (CAPASEG) hizo la licitación para el proyecto, con lo que se espera que se garantice la resolución del problema de una vez. En cuanto al conflicto con la comunidad de Zototitlán, señaló que se han replegado, por lo que de facto inició una tregua, como ocurre cada dos años luego de presentarse un enfrentamiento. “Se les ocurre pedir una minuta donde prometen no volver a hacer sus movilizaciones, cumplen los acuerdos y llega otro presidente y vuelven a recurrir a la misma movilización, nunca cumplen su palabra”, agregó. La alcaldesa dio a conocer que habitantes Tula del Río y San Agustín Ostotitla han reportado que el agua del río Balsas está contaminada y ha provocado diversas enfermedades entre los pobladores. (Anarsis Pacheco Pólito / Chilpancingo).

La violencia en ciudades del estado no inhibe la llegada de turistas, celebra Astudillo

Es prioritario para su gobierno que reabra la Coca Cola en Altamirano, reitera. Durante un acto de entrega de fertilizante gratuito, llama a sus funcionarios a procurar que el proceso electoral “salga bien

Anarsis Pacheco Chilpancingo El gobernador Héctor Astudillo Flores celebró que la violencia que se vive en ciudades del estado, incluidas las turísticas, no inhibe la llegada de visitantes y reiteró que es prioridad de su gobierno que la Coca Cola reabra pronto su bodega en Ciudad Altamirano que cerró tras amenazas y ataques armados de un grupo delictivo. Durante la mañana en Casa Guerrero se realizó la firma de convenios municipales del programa de fertilizantes a través del programa Más Maíz, en donde durante su discurso reiteró su convocatoria a que todos los funcionarios y alcaldes pongan de su parte para que el proceso electoral en ciernes “salga bien”. Insistió en que todos deben de ser respetuosos de la ley, para que cada uno haga lo que le corresponda y el día de la elección salga de la manera correcta. “Siempre que hay elecciones, cuando se van acercando las elecciones se empieza a decir que en Guerrero no hay condiciones de hacer elecciones. No es la primera ocasión, en Guerrero se tendrán que hacer elecciones y salir bien en las elecciones”, agregó. Indicó que durante este periodo confía en la madurez de todos, para colaborar en que se realice conforme a lo adecuado las elecciones, además de que los alcaldes que hayan dejado su cargo para participar en este proceso electoral sean suplidos conforme a la ley por los sus suplentes. “Sepan ustedes que al gobernador le interesa mucho la gobernabilidad, le interesa mucho que los ayuntamientos todos cumplan con sus responsabilidades que están establecidas en la Constitución”. Subrayó que “el gobernador” es compañero de los alcaldes, por lo que está interesado en ayudar a los municipios, y aseguró no tener ningún interés confrontarse con algún municipio. “Quien piense que el gobernador tiene conflicto con algún municipio o con algún presidente está equivocado, al gobernador le interesa la buena relación, le interesa la comunicación”. Pidió que no se confundan ninguno, ya que él tiene claro que entre todos se debe de salir adelante, por lo que espera que se continúe con el trabajo. Hacer análisis en el río Balsas Al concluir el acto protocolario fue abordado por reporteros, quienes le preguntaron sobre si ya tuvo un acercamiento con empresarios de Coca Cola, grupo Femsa. Respondió: “Es un asunto que le interesa muchísimo al gobierno y que lo vamos atender pronto”. Se le insistió sobre qué pasará con el empleo de los 160 trabajadores que dependían de la bodega de Tierra Caliente: “Vamos hacer lo que me corresponde, yo les daré mas información posteriormente”. También se le preguntó sobre el inicio de la Semana Santa en medio de una ola de ejecuciones cometidos en diferentes partes del estado: “La violencia no inhibe, y lo digo con toda la responsabilidad, la violencia que está ubicada y radicada en algunos lugares específicos, entre actores específicos, no inhibe. La ocupación fue muy buena y va ir creciendo a partir de mañana, seguramente”. De la preocupación que hay entre los habitantes del Alto Balsas, quienes temen la contaminación del río Balsas, ya que cambió de color: “Hay que revisarlo, yo creo que debemos hacer los análisis correspondientes”. Se suministrará el abono a más de 320 mil productores Este lunes en la Sala de la República de Casa Guerrero se realizó la firma de convenios con los municipios para el ciclo agrícola del 2018, en donde el gobernador dijo que por tercer año se entregaría el fertilizante de manera gratuita para más de 320 mil productores, que se utilizarán en 454 mil hectáreas a través del programa Más Maíz. Durante se intervención, Astudillo subrayó que el programa de fertilizante es de las cosas positivas de su gobierno. Enfatizó que en medio de la situación que se vive en el estado de Guerrero sería muy complejo que iniciara el año y que el programa de fertilizante desapareciera o se modificara. Por su parte, el secretario de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural, Juan José Castro Justo, señaló que con ese programa federal se pretende lograr el mayor desarrollo para el campo, y para esta primera ministración es por el monto de 42.5 millones de pesos. Detalló que la aportación estatal y en especie sería por parte del gobierno de 340 millones de pesos para beneficiar a más de 330 mil productores de 7 mil localidades y la firma de convenio con los alcaldes es para la operación del programa que contempla la forma de cómo atender a los productores.

Preocupa a pobladores de 15 comunidades del alto Balsas la contaminación del río que cambió de color

Pobladores nahuas de las localidades de la zona del alto Balsas, están preocupados por la contaminación del río. Desde hace dos semanas el color del agua cambió de azul a verde, y en algunas localidades como San Juan Totolcintla, municipio de Mártir de Cuilapan, murieron algunas tortugas y mojarras. Mientras que en Tula del Río, del mismo municipio, algunas personas se enfermaron luego de comer peces. Formalmente, y por escrito, el miércoles de la semana pasada representantes de las comunidades de San Juan Totolcintla, San Agustín Oxtotipan y Tula del Río, de Mártir de Cuilapan, informaron del problema y entregaron muestras del agua a la Secretaría de Salud (Ssa), pero hasta este lunes no tenían respuesta, declaró el presidente del Comisariado de Bienes Comunales de Totolcintla, Melquiades García Ríos. Los propios representantes de los pueblos han recomendado a los habitantes que tomen precauciones, pero el agua del río sigue siendo utilizada para regar los cultivos, para abrevadero del ganado, y en algunos pueblos la utilizan para bañarse y hasta para beber y cocinar. En un recorrido este lunes, en la ribera del río se pudo constatar que el agua es de color verde; el comisariado de Bienes Comunales dijo que siempre ha sido azul. Explicó que el cambio de color del agua preocupa a pobladores de cuando menos 15 comunidades que se encuentran asentadas en las orillas del río, desde Tlalcozotitlán, municipio de Copalillo, hasta Tlamamacán, municipio de Mártir de Cuilapan, aunque dijo que río abajo hay más comunidades del municipio de Eduardo Neri (Zumpango) por las que pasa el afluente, pero que no han tenido contacto con sus autoridades o representantes. Consultado a la orilla del río, la autoridad comunal de Totolcintla declaró que desde hace dos semanas están con la incertidumbre, ante el cambio de color del agua. “Por eso fuimos a la Secretaría de Salud a pedirles que investiguen y les llevamos una muestra, porque así como está no es normal, el agua siempre ha sido azul”. Explicó que comenzaron a notar el cambio del color desde el jueves 15 de marzo. Ya han padecido la contaminación del río antes, indican “A nosotros nos preocupa esta situación porque ya nos ha tocado vivir epidemias por la contaminación del agua”. Informó que en 1988 murieron en San Juan Totolcintla, San Agustín Oxtotipan y Tula del Río 30 personas por cólera. Un año después, en 1999, el agua se puso negra y entonces se murieron todos los peces, incluso reses. Recordó que esa vez las autoridades reconocieron oficialmente que el ingenio azucarero de Zacatepec, Morelos, lavó sus instalaciones y descargó los desechos al río Amacuzac, que desemboca en el Balsas. “Y ahora, otra vez nos está pasando lo mismo, cuando la variedad de especies apenas comenzaba a multiplicarse; hay bagre, mojarra, pez diablo, tortugas y hasta langostino, empezaba a haber aquí, quien sabe de dónde llegaron”, declaró. Por la ribera del río se observó a campesinos trabajando sus tierras sembradas de sandía, melón y milpa, que riegan con agua del río que extraen a base de bombeo. Por la orilla también se observaron reces y asnos que bajan a beber agua. García Ríos dijo que cuando el agua está normal, es común ver en la orilla a la gente pescando o bañándose. Ayer la orilla lucía solitaria. Contó que algunos ya no pescan por temor a que el agua tenga residuos tóxicos, y que otros no bajan a pescar porque el agua está oscura y aunque se sumergen al fondo del río no alcanzan a ver las mojarras. “Nos preocupamos porque no sabemos qué es lo que tiene el río, por eso nos reunimos los comisariados de los tres pueblos (San Juan Totolcintla, San Agustín Oxtotipan y Tula del Río), para pedir a la Ssa que investigue, que haga un estudio porque no es normal que esté así el agua”, insistió. El escrito que entregaron a la Ssa el miércoles de la semana pasada fue firmado por el comisariado de Bienes Comunales de Totolcintla, García Ríos; el de Tula del Río, Rogelio Vicario, y el de San Agustín Oxtotipan, Ignacio Morales Mundo. “Lo que pedimos es para evitar alguna tragedia en esta región, pero les llevamos la muestra y hasta hoy no nos han dado una respuesta, no nos han dicho por qué el cambio de color”, se quejó. El problema más grave ocurrió en Tula del Río, en donde a algunos pobladores “les dolió el estómago” después de que comieron pescado la semana pasada. Otras familias guardaron el pescado seco, pero al día siguiente “ya no servía”. Sin embargo en este pueblo no se encontró al comisariado Rogelio Vicario, quien fue el que alertó a su vecino de Totolcintla sobre el problema. García Ríos informó que el sábado llegó a estas tres comunidades una brigada de la Ssa, pero no como respuesta al escrito que entregaron a la dependencia, sino que fue un recorrido de rutina del personal, según les dijo a los pobladores Alfredo Duque Vélez, quien encabezaba al grupo. Los integrantes de esta brigada repartieron entre los pobladores frascos de cloro para desinfectar las verduras y purificar el agua que consumen; asimismo, se llevaron muestras de agua del río a petición de la gente de los pueblos. “Nosotros les dijimos que eso ya lo hacemos, porque las mujeres tienen talleres en los centros de salud, en donde les dicen cómo van a desinfectar el agua, cuantas gotas le tiene que echar al agua de tomar, y ahora lo que queremos es que nos digan qué es lo que tiene el agua para evitarnos problemas o una tragedia”, insistió. Aunque ayer no se encontraron peces muertos, García Ríos aseguró que la semana pasada unos pescadores encontraron tortugas muertas y vieron peces “que venían flotando en el agua”. Admitió que, si bien esta vez el problema no es tan grave como en 1998 y 1999, la gente está preocupada y quiere que las autoridades les dé una explicación del cambio de color del agua. Dijo que el agua del río es vital para los pobladores, porque la usan para el riego de sus cultivos de sandía, maíz y melón. También baja el ganado a beber agua. Aseguró que en algunas comunidades asentadas cuesta abajo, como Analco, San Agustín Oapan y San Miguel Tecuiciapan, San Marcos Oacatzingo y Tlamamacán utilizan el agua del río para consumo humano, debido a que no cuentan con manantiales. Informó que cuando menos en San Juan Totolcintla les han pedido a los habitantes que tomen precauciones y que si sienten algún síntoma, de inmediato vayan al centro de salud. “Les hemos dicho, pero siguen viniendo algunos vecinos, sobre todo a pescar. Ayer estuvimos en San Agustín Oxtotipan y vimos que llegaron gentes a pesar”, dijo. Informó que para los habitantes es difícil saber de dónde se está descargado el agua verde y lo que tiene, porque en el Balsas se juntan cuatro ríos, el que baja de Amacuzac, Morelos; el de Tlapa, de Puebla y otro que viene de La Esperanza, de Mártir de Cuilapan. “Por eso le estamos pidiendo a los gobiernos estatal y federal que intervengan, que hagan un estudio, que nos escuchen como pueblos indígenas, les estamos haciendo un llamado para no después lamentar alguna tragedia, porque ya han sucedido aquí. No tenemos grandes cosas, sólo el río que para nosotros es un tesoro, algunos tienen ganado y de allí toman agua, y estamos haciendo la petición para evitar que se mueran otra vez los animales”, declaró. Después advirtió, “que nos escuchen, les estamos pidiendo sensibilidad, no estamos tomando ahorita ninguna medida de presión, solamente les estamos pidiendo que intervengan en esto”. Al gobernador, Héctor Astudillo Flores, le demandó concretamente que instruya a sus secretarios para que hagan algo, “que vengan y que vean esto”, dijo señalando el caudal verdoso. Informó que al no tener respuesta al oficio que entregaron a la Ssa dirigido, esta semana van a entregar otro al gobernador Astudillo, “para que nos informen qué está pasando y no estemos con la duda, con la incertidumbre”. El comisariado ejidal también denunció que estas comunidades no cuentan con el apoyo para el saneamiento permanente del afluente del río y que son los propios habitantes los que se encargan de la limpieza. Aseguró que se integran comisiones y que cada domingo una de ellas se encarga de recoger la basura para que no vaya a dar al río. Asimismo informó que actualmente están trabajando en un proyecto de reforestación de 100 hectáreas cerca de la comunidad para proteger los mantos acuíferos. En las 100 hectáreas van a plantar tepehuaje, guaje, guamúchil y maguey, que son variedades propias de la región.