22 mayo,2019 7:45 am

Llegará Zoé Robledo Aburto a la Dirección General del IMSS

De acuerdo con informes que el Presidente ofreció en su conferencia matutina en Palacio Nacional, en las próximas horas se darán los detalles, pero calificó a Robledo Aburto como uno de los mejores cuadros de la administración pública federal.
Ciudad de México, 22 de mayo de 2019. El presidente Andrés Manuel López Obrador nombrará al político chiapaneco Zoé Robledo Aburto como nuevo director general del IMSS, en sustitución de Germán Martínez Cázares, quien este martes presentó su renuncia al cargo, efectiva de inmediato.
De acuerdo con los informes que López Obrador ofreció en su conferencia matutina en Palacio Nacional, en las próximas horas se darán los detalles, pero calificó a Robledo Aburto como uno de los mejores cuadros de la administración pública federal.
“Zoé Robledo será el próximo director, que le tengo toda la confianza, tiene experiencia, es un profesional, politólogo, fue diputado federal, senador, es subsecretario de Gobernación, es un hombre progresista, honesto, de modo que ya está atendido este asunto”, dijo el Mandatario federal.
López Obrador fue cuestionado sobre el tema luego de la renuncia de Martínez, la cual, aseguró, lamenta pero está en su derecho.
En su conferencia de prensa matutina, el tabasqueño dijo que mañana se informará quién sustituirá a Robledo en la Subsecretaría de Gobierno de la Secretaría de Gobernación.
Germán Martínez renunció el martes a la dirección general del Instituto y acusó a la Secretaría de Hacienda de tener una injerencia perniciosa y poner en riesgo “la vocación igualitaria, de justicia y de prestación de servicios de salud”.
Texto: Redacción
Foto: Twitter @zoerobledo
Reestructura Seguro Social su gasto

Gráfico: Agencia Reforma.

La renuncia de Germán Martínez a la Dirección General del IMSS se dio en un momento en que, dentro de los reducidos márgenes de maniobra que tienen las finanzas, parecía que el gasto del organismo iniciaba un proceso de reorientación.
Ciudad de México, 22 de mayo de 2019. Las finanzas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) han sido un dolor de cabeza para la administración pública desde hace muchos años.
La pesada losa del gasto en jubilaciones y pensiones de los asegurados fue transferida al gobierno federal para intentar sanear los estados financieros del organismo.
La renuncia de Germán Martínez Cázares a la dirección general del Instituto se dio en un momento en que, dentro de los reducidos márgenes de maniobra que tienen las finanzas, parecía que el gasto del organismo iniciaba un proceso de reorientación, según su informe financiero al primer trimestre.
Durante ese lapso, el gasto de operación destinado a medicamentos y materiales de curación registró un crecimiento de 14.5 por ciento, en términos reales, respecto al mismo periodo del año previo.
Entre 2012 y 2018, el crecimiento real de este gasto fue de 0.36 por ciento anual, y normalmente en el primer trimestre de cada año se registró un descenso respecto al mismo lapso del año anterior.
En tanto, servicios generales, que están directamente relacionados con la operación del organismo para la atención al derechohabiente, crecieron 8.8 por ciento en el primer trimestre, contra una tasa media de 0.54 por ciento anual de 2012 a 2018.
En contraste, el gasto en servicios personales (sueldos, salarios y prestaciones de los trabajadores) creció 0.7 por ciento real, respecto al mismo lapso del año previo, y alcanzó la suma de 41 mil 485.5 millones de pesos.
En los seis años previos, los recursos presupuestados para la nómina crecieron a un ritmo de 1.6 por ciento anual.
Durante el primer trimestre del año, los ingresos propios del IMSS subieron 4.7 por ciento real, contra un crecimiento promedio anual de 2.48 por ciento en los seis años previos, para colocarse en 89 mil 634 millones de pesos.
Las transferencias y subsidios federales al organismo, que constituyen el pago de pensiones en curso asumidas por el gobierno, registraron un crecimiento real de 9.4 por ciento, para alcanzar 120 mil 277 millones de pesos en el primer cuarto.
Sin embargo, el pago de pensiones a los asegurados avanzó 5.4 por ciento y se colocó en 98 mil 660.6 millones de pesos, lo que redundó en un incremento real de 16.5 del superávit primario del organismo, con lo que sumó 62 mil 342 millones de pesos, el superávit más alto para un periodo similar.
No obstante, el IMSS registró una baja de 80.5 por ciento en sus actividades de inversión física en el primer trimestre de año, la cual se ubicó en 151.6 millones de pesos, mientras que en el mismo lapso de 2018 alcanzó la suma de 778.6 millones de pesos.
En los seis años previos, la inversión física del organismo registró un decremento promedio anual de 1.08 por ciento.
Texto: Juan Carlos Orozco / Agencia Reforma
Gráfico: Agencia Reforma