28 marzo,2020 4:39 am

Muy baja ocupación en Acapulco; llegó el viernes apenas al 9.8 %

Acapulco, Guerrero, 28 de marzo de 2020. A prácticamente una semana del inicio de la Semana Santa, ayer solamente dos de los 25 toldos colocados ayer en playa Papagayo fueron ocupados por visitantes. Meseros de restaurantes locales comentaron que fueron enviados a descansar ante el cierre de los negocios ante la baja de visitantes por la contingencia sanitaria.

La ocupación en Acapulco fue ayer del 9.8 por ciento, lo que representa mil 107 habitaciones de los 11 mil 301 cuartos que rentan los 58 hoteles que hay en las tres zonas turísticas del puerto. La zona Dorada alcanzó los 11.4 puntos porcentual, la Diamante los 8.2 por ciento y la Tradicional 6.1 puntos porcentuales.

Aunque los toldos fueron montados por los trabajadores de la Promotora y Administradora de playa, no todos tiene sillas y mesas puestas, solamente algunos tienen mobiliario de playa.

La falta de montaje de mobiliario además de ser por la poca afluencia de bañistas es por las recomendaciones de tener un espacio entre unas sillas y otras, aunque las sombrillas estaban colocadas en la distancia que normalmente se ponen, sin una separación mayor, dijeron meseros.

Ayer, en los toldos solamente un par estaba ocupado por una familia de visitantes, cuyo niños juegan en el mar bajo la supervisión de los adultos que divierten siguiendo a las gaviotas y palomas que se acercan a ellos en busca de comida.

La mayoría de los toldos y sombrillas están ocupados por vendedores informales que los ocupan para descansar después de ir de un lado a otro de la bahía sin ventas. Tatuajes temporales, inflables, camarones asados en brochetas, quesadillas, nieve, agua de sabor, campechanas, ostiones, fueron algunos de los productos que tenían los vendedores esperando un comprador.

Uno de los prestadores de deportes acuáticos estaba sentado con el salvavidas puesto pero se tenía a la vista la banana para ofrecer paseos. Ante la falta de visitantes en los últimos días, su ánimo es bajo.

Entre los pocos que llegaron a playa Papagayo estaba Daniel Ramírez con su familia. Llegaron el martes por un par de días y siguen en el puerto, no saben por cuantos días más se quedarán.

Daniel con su esposa y dos hijos llegaron de Cuautitlán, Estado de México. Consideró que pese a la recomendación de las autoridades es quedarse en sus domicilios, decidieron venir a Acapulco porque “es mi casa”.

En el puerto encontraron las medidas preventivas como en el Estado de México, de uso de gel antibacterial, pero indicó que “todo mundo agarra las cosas con las manos sucias”, por lo que considera que no es eficiente dicha acción para evitar el contagio del Covid-19.

Dos meseros platicaban respecto a la situación. El restaurante donde trabaja uno cerró la semana pasada. Les dijeron que será probable que reabran en próximos días pero todo depende de la contingencia. El otro cerrará esta semana. Les dijeron a los meseros que será por un mes y les darían apoyo económico, pero no el salario total. Esa fue la promesa. Son 12, entre meseros, cocina y demás empleados a quienes mandaron a sus casas.

“Ojala así como no nos van a pagar nos dijeran no nos cobraran la luz, el agua, Coppel, Elektra”, dijo uno.

Entre ellos comparten los rumores que hay en el sector turístico, el probable cierre de hoteles: “el Emporio solo está funcionando una torre”, “en el Kristal están trabajando nada más la mitad”. También hablaron de restaurantes, sorprendidos de que algunos sigan funcionando de manera normal y de otros que han reducido horarios. 

Había nostalgia por los periodos de Semana Santa de otros años.

Texto: Mariana Labastida / Foto: Carlos Alberto Carbajal