Salvador Alanís aclara que su organización no aceptó la propuesta del gobierno del estado de retirarse de Filo de Caballos. Dice que en una asamblea, la población de esta comunidad rechazó el regreso de las familias refugiadas en Chichihualco, porque “es gente involucrada en la delincuencia”, señala.
Chilpancingo, Guerrero, 21 de noviembre de 2018. El vocero del Frente de Policías Comunitarias del Estado de Guerrero, Salvador Alanís, declaró vía telefónica que la Policía Comunitaria de Heliodoro Castillo, que se encuentra en Filo de Caballos, municipio de Leonardo Bravo, rechazó la petición del gobierno del estado de retirarse a Tlacotepec.
Aseguró que comisarios de cinco comunidades, entre éstas Filo de Caballos, les dieron el respaldo para que se quedaran en una reunión en la que estuvieron el subsecretario de Gobierno para Asuntos Políticos del gobierno estatal, Martín Maldonado del Moral y ciudadanos de los pueblos.
El representante de ese Frente, al que pertenece la Policía Comunitaria de Heliodoro Castillo (Tlacotepec), negó también que hayan sido miembros de esa organización los que dispararon el sábado cerca de Los Morros cuando pasaba la caravana de desplazados que pretendían regresas a sus pueblos.
Agregó que fue gente armada de ese pueblo la que realizó los disparos para provocar un enfrentamiento entre el Ejército y la Policía Estatal que resguardaban a los desplazados con la Policía Comunitaria.
El viernes pasado el subsecretario Maldonado del Moral ofreció a los desplazados de Filo de Caballos y de otros pueblos que se encuentran refugiados en el auditorio municipal de Chichihualco que al día siguiente el Ejército y la Policía Estatal resguardarían su regreso a sus pueblos. También les dijo que el gobierno pediría el repliego de los policías comunitarios que están en Filo de Caballos a su municipio, Heliodoro Castillo, con cabecera en Tlacotepec.
Al día siguiente, el sábado, salió la caravana de desplazados hacia Los Morros y Filo de Caballos, sin embargo, por la tarde-noche regresaron a Chichihualco ante la falta de garantías de seguridad pues el subsecretario de Gobierno, el Ejército y la Policía estatal pretendían dejarlos solos en Los Morros.
Además, el gobierno estatal incumplió su compromiso de replegar a los comunitarios a Tlacotepec.
Salvador Alanís declaró ayer que recibieron la petición de parte del subsecretario de Gobierno, Maldonado del Moral, para que se retiraran de Filo de Caballos a Tlacotepec, pero que la respuesta fue “no”.
El vocero de las policías comunitarias informó que ante la respuesta negativa, el funcionario estatal les pidió “humanidad” para que permitieran que regresaran los desplazados a sus comunidades y que eso sí lo aceptaron, “les dijimos que incluso nos responsabilizábamos de la integridad de todo aquél que regresara y que fuera gente de bien”.
Explicó que el problema fue que cuando la caravana ya había pasado Los Morros, gente armada que está en esa población hizo disparos al aire y se espantaron y ya no quisieron quedarse.
Mencionó que después el gobierno estatal quería que la Comunitaria se hiciera responsables de la seguridad de todos los desplazados, pero que, previamente, habían realizado reuniones con los comisarios de Campo de Aviación, La Escalera, Filo de Caballos, Puentecillas y El Ranchito para preguntar a los pobladores si estaban de acuerdo en que regresaran.
Informó que en Campo de Aviación la población aceptó que regresaran sin ningún problema, en Puentecillas les dijeron que no tenían desplazados, y que en El Ranchito tampoco.
Sin embargo agregó que en Filo de Caballos, la asamblea determinó que “de ninguna manera aceptarían que regresaran los desplazados porque es gente involucrada en la delincuencia”.
Informó que en ese pueblo, el sábado pasado la asamblea estuvo esperando desde las 12 del día al subsecretario de Gobierno Maldonado del Moral y a los desplazados para notificarles el acuerdo, pero que por la tarde solamente llegó el subsecretario quien escuchó la queja de los comisarios y de los pobladores sobre la gente que “supuestamente” está desplazada.
Aseguró que frente a Maldonado, “y en decisión unánime”, con 200 votos a favor y ninguno en contra la gente de Filo de Caballos se manifestó en contra del regreso de las 17 familias desplazadas que ya regresaban en la caravana.
“El comisario leyó en la asamblea el nombre de cada una de las personas que están desplazadas, y el pueblo votó en contra de que regresen”, aseguró Salvador Alanís.
Añadió que, incluso, le dijeron al subsecretario que si regresaban esas 17 familias, todo el pueblo se iba a salir porque llevan cinco años recibiendo maltrato de esas familias, “ese acuerdo fue el que se tomó y fue el que se llevó Martín Maldonado a decírselo a los de la caravana”.
Sin embargo, declaró que el funcionario ya no regresó ni envió a ningún representante a informarles si se quedarían o no las 17 familias desplazadas, “y ya no hubo respuesta de nadie”.
Informó que de los cinco pueblos donde ya tiene presencia la Policía Comunitaria, (Campo de Aviación, La Escalera, Filo de Caballos, Puentecillas y El Ranchito), sólo hay 17 familias desplazados de Filo de Caballos y 30 personas de Campo de Aviación.
Sin embargo, mencionó que al gobierno del estado le llevaron una lista de 272 personas desplazadas pero que muchas no son de los pueblos en donde tiene presencia la Policía Comunitaria, “y lógicamente les dijimos que si hay gente que no es de estos pueblos, que los reinstale el gobierno en sus comunidades y que les den seguridad, porque nosotros únicamente les vamos a dar seguridad a la gente que regrese a los pueblos donde tenemos presencia”.
El vocero del Frente de Policías Comunitarias del Estado de Guerrero deslindó también a la Policía Comunitaria de Heliodoro Castillo de los disparos realizados el sábado cuando la caravana de los desplazados había pasado por Los Morros.
Dijo que quienes dispararon fue “gente armada que está en ese pueblo, porque querían echarnos a pelear al Ejército y la Policía Estatal con la Policía Comunitaria”.
Declaró que “fue una provocación del grupo armado de Chichihualco que está resguardando el pueblo de Los Morros para que los soldados y policías estatales pensaran que fuimos los de la Policía Comunitaria y se vinieran en contra de nosotros”.
Explicó que si de verdad les hubieran querido hacer daño a los desplazados les hubieran disparado de manera directa, “pero sólo fueron disparos al aire”.
Informó que antes, él había informado al Ejército y a la Policía Estatal que en Los Morros había 40 gentes de Chichihualco armados y les aclaró que “ese es un pueblo en el que nosotros no tenemos presencia”.
Texto: Zacarías Cervantes / Foto: Jesús Guerrero
