17 septiembre,2017 11:15 am

No han recibido ayuda del gobierno damnificados de las inundaciones del jueves en Petatlán

 

Ante las inundaciones por el desbordamiento del río y cuatro arroyos, familias esperan apoyo para bombear el lodo y agua estancada en sus viviendas

Brenda Escobar

Petatlán

Ante las inundaciones causadas el jueves por el desbordamiento del río y cuatro arroyos que cruzan la cabecera municipal de Petatlán, familias damnificadas esperan la llegada de algún tipo de apoyo de las autoridades de los tres niveles de gobierno que no se dan abasto para atender los llamados de auxilio, principalmente de ayuda para bombear el lodo y agua estancada en sus viviendas.

Este viernes, en la colonia Vicente Guerrero, una de las más afectadas por la crecida del arroyo El Mesón, las familias damnificadas se afanaban en rescatar algunas de sus pertenencias, pero lo perdieron casi todo, pues el agua alcanzó un nivel de casi 2 metros de profundidad.

La vecina, Flor Azucena Méndez Solís dijo que el torrente entró intempestivamente por la pequeña ventana de su dormitorio, y en cuestión de minutos “el agua subió hasta acá (señala una altura de más de un metro y medio), nomás alcanzamos a agarrar al bebé y nos tuvimos que salir, todo se nos echó a perder; nadie ha venido ver en qué nos pueden ayudar, sólo mi esposo y yo estamos sacando el agua, pero es mucha”, relató.

Su vecina de al lado, una adulta mayor conocida en la colonia como doña Villo, cuenta que no pudieron rescatar nada porque el arroyo se desbordó, “como nunca; era nuestra vida, nuestra seguridad o las cosas que hemos comprado con tanto sacrificio”.

Sentada frente a su casa mientras observa cómo algunos vecinos y familiares sacan grandes cantidades de lodo de su vivienda, llamó al gobierno municipal para que les envíe agua limpia para lavar su casa, “no tenemos agua, no hay agua en la colonia, es lo que nos urge, y una máquina para que nos ayude a quitar el lodo y la tierra que está en las calles”.

Ayudan padres a limpiar la primaria Justo Sierra que se inundó tras desbordarse un arroyo

Pocos metros más adelante, está la escuela primaria Justo Sierra turno matutino; ahí decenas de madres de familia y niños acudieron al llamado del director del plantel, Samuel Gil, y de los maestros; con escobas, carretillas y palas sacan el lodo que dejó el paso del arroyo.

El director platica que, cada vez que llueve el arroyo crece; sin embargo, dice que esta vez, se desbordó y creció “como nunca se había visto; el agua inundó por completo ocho salones, dos bodegas que estaban llenas de material didáctico, los salones de educación especial y educación física, así como también los sanitarios y los bebederos que quedaron dañados y las tuberías tapadas”.

Cuando se le preguntó a cuánto ascienden los daños en el plantel, el joven profesor dijo que en ese momento era difícil hacer un cálculo, “porque se echó a perder muchísimo material didáctico, libros, material deportivo, butacas, escritorios, sillas, se perdió demasiado”.

Habló de su preocupación por desinfectar de manera urgente toda la escuela, “porque todo este lodo que ven aquí no es sólo de tierra, sino que trae residuos fecales y otras bacterias; necesitamos mucha ayuda y ese es mi llamado a las autoridades, por el bien y la salud de más de 450 alumnos que estudian tan sólo en el turno matutino”.

Una de las madres de familia que con sus hijos barría el lodo de la cancha de la escuela, comentó que en su casa también se metió el agua, pero que allá dejó a su esposo, y ella vino a ayudar a limpiar la escuela, “porque es muy importante la educación para que mis hijos salgan adelante, es lo único que les podemos dar”.

Al mediodía llegaron a la escuela trabajadores del DIF municipal con cazuelas y ollas de comida para repartir a quienes estaban ayudando en la labor de limpieza del plantel; los maestros agradecieron a las mamás y papás su trabajo, pero les pidieron que no continuaran, porque pasarían funcionarios del gobierno municipal y estatal a ver en qué condiciones se encuentra la escuela y apoyarían para terminar de limpiarla.

El presidente municipal perredista, Arturo Gómez Pérez dio a conocer que ante el saldo de las afectaciones, el comité municipal de Protección Civil y el Cabildo sesionarían para hacer una declaratoria de emergencia y declarar zona de desastre no sólo la cabecera municipal, sino también el resto del municipio, para de esa manera solicitar ayuda al gobierno estatal y federal para apoyar a las familias afectadas, a través del Fondo Nacional de Desastres (Fonden).

Dijo que la lluvia que cayó la tarde y la noche del jueves fue una tromba, “que trajo tal cantidad de agua, más que todo lo que ha llovido de la temporada junto”.

Agregó que, “en menos de dos horas y media”, el nivel del río y los cuatro arroyos que cruzan la cabecera municipal crecieron y se desbordaron, por lo que tuvieron que evacuar a las familias de las colonias más susceptibles de sufrir inundaciones.

Señaló que, aunque hay muchas afectaciones materiales, no hubo ninguna pérdida humana qué lamentar; enseguida, informó que el recuento de los daños hasta la mañana de este viernes era de 424 viviendas inundadas en 13 colonias, entre las más afectadas están la Vicente Guerrero, Centro, La Pintada, Cayuco, Barrio de la Hoja y La Esmeralda.

De igual forma, adelantó que en el transcurso del día esperaba la llegada de funcionarios del gobierno del estado para hacer un recorrido conjunto por las colonias afectadas para que “con sus propios ojos” supieran de los daños causados por la tromba.

Añadió que funcionarios de la administración municipal ya trabajaban para hacer un recuento “completo y puntual” de los daños en la zona rural del municipio en caminos, escuelas, agricultura y ganadería, los cuales, dijo, son cuantiosos.

Recorre Bravo Abarca la zona afectada para llevarse el censo de afectados

El jefe de la oficina del gobernador, Alejandro Bravo Abarca hizo un recorrido en el municipio de Petatlán para llevarse el censo total de los afectados.

En compañía del presidente municipal de Petatlán, Arturo Gómez Pérez, soldados de la Secretaria de la Defensa Nacional y marinos que participan en el Plan DN-III, Bravo Abarca se reunió con directivos y padres de familia de escuelas afectadas en la primaria Justo Sierra, donde informó que, “para las viviendas afectadas, de un censo de 132, el gobernador instruyó que apoyemos por lo menos con un colchón y una estufa para los que fueron afectados, que estaremos entregando para este lunes o martes, dependiendo de la capacidad de respuesta de las mueblerías locales”.

En cuanto a las afectaciones a la escuela Justo Sierra, que tuvo pérdidas en mobiliario y equipo, el compromiso del funcionario, en representación del gobernador, fue que el Instituto Guerrerense de la Infraestructura Física Educativa (IGIFE) recupere el mobiliario y levante un portón que tiró la corriente del agua.

Del jardín de niños Miguel Alemán, ubicado en una zona de alto riesgo a la orilla del río, se pidió que el IGIFE repare las instalaciones nuevas que la escuela que ya tienen en otra parte, a la que no se han mudado porque los padres argumentan que presenta daños estructurales.

Bravo Abarca dijo que sólo falta ver si Petatlán, con la alerta de emergencia califica como zona de desastre, principalmente en infraestructura de viviendas totalmente dañadas.

Por su parte, el alcalde, Arturo Gómez Pérez informó que de 424 viviendas que resultaron inundadas, 132 son las que requieren apoyo por pérdidas materiales, y que también mil 200 techos fueron levantados por el viento.

Presentó una lista de obras que se necesitan para prevenir inundaciones futuras; dijo que han solicitado desde hace mucho tiempo a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) un proyecto de desazolve y canalización del arroyo del Mesón, para que el agua tenga desfogue y no afecte las viviendas.

Otra obra es el desazolve y canalización del río con material pétreo, y que en la parte baja se haga el dragado, así como construir canales pluviales en la colonia La Pintada, una de las más afectadas.

En la reunión con el funcionario estatal, un vecino, Miguel Ángel Gutiérrez, lamentó que, el gobierno federal nunca apoyó a los damnificados del sismo de 2014; le recordó a Bravo Abarca que, desde hace cuatro años, con las tormentas Ingrid y Manuel y el sismo de 2014, muchas casas quedaron afectadas, y hasta la fecha siguen dañadas, “aquí estuvo Jorge Carlos Ramírez Marín, el que era secretario federal de la Sedatu, declaró mi casa en pérdida total y no llegó nada, y no nomás a mí, a mucha gente”. El alcalde informó que de ese sismo se tiene un censo de 434 personas afectadas.

Dijo que saben que el material ya está “embodegado en Chilpancingo, y sólo necesitamos que nos lo manden, no es mucho solo es cemento y lámina… Ya los expedientes los entregamos, ya está todo, nos pidieron que rentáramos un bodega; tengo dos meses pagando la renta y no llega”, lamento el presidente municipal.

Después de la reunión, se dispusieron a revisar los daños en las colonias Arroyo del Mesón y La Pintada, y en la calle Matamoros, donde constataron la pérdida total de bienes materiales en algunas viviendas.

En este recorrido también estuvieron el jefe de la jurisdicción sanitaria 05 de la región Costa Grande, Juan Manuel Álvarez Barajas, y el delegado de los Servicios Educativos de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), Fernando Leyva Sotelo.