17 septiembre,2021 4:38 am

Pide Astudillo a la sociedad ayudar al gobierno de Evelyn Salgado y reitera que no va a “estorbar”

Acapulco, Guerrero, 17 de septiembre de 2021. El gobernador Héctor Astudillo Flores pidió unidad de todos los sectores de la sociedad para el nuevo gobierno que encabezará Evelyn Salgado Pineda, y afirmó que el tema que más preocupa es la violencia, pero lo fundamental por las crisis generada por la pandemia de Covid-19 es la economía.

El gobernador asistió este miércoles como invitado a la sesión del Grupo ACA, donde también acudió el ex gobernador Ángel Aguirre Rivero, y el recién galardonado con la presea Sentimientos de la Nación, Eduardo López Betancourt.

A un mes de dejar el gobierno, Astudillo Flores realizó una reseña de lo que hizo durante estos seis años, también habló de su relación con el presidente Andrés Manuel López Obrador, de cómo él llegó al poder, cómo se comportó y de cómo se comportará como ex gobernador, además del peor momento como gobernador, e informó que no vivirá en Chilpancingo una vez que termine su mandato.

En su mensaje final ante los asistentes a la sesión realizado en un salón abierto en el hotel Dreams, recordó que hubo muchos los pleitos entre los gobiernos que se iban y los que llegaban y se trenzaban.

Por eso llamó a que en Guerrero se tiene que construir una ruta de unidad, que no se trata de que desaparezcan los partidos, sino de privilegiar el interés general, “ahí es donde se debe de centrar el objetivo, el tema de Guerrero es que requiere unidad”, y pidió al grupo Aca ayudar al nuevo gobierno porque va  necesitar el respaldo social.

Recordó que algunos pensaron que las elecciones iban a ser terribles, pero él confió en que saldrían bien, e insistió que no hubo un solo problema importante. Deseo que le vaya bien a Guerrero, a la gobernadora electa, Evelyn Salgado Pineda a quien se lo ha dicho de manera directa.El mandatario esperó que la etapa de entrega recepción sea la más correcta.

Durante su intervención dijo que el estado ideal como gobernador es “cuando uno es gobernador electo” porque lo invitan a muchos lugares “y uno está muy contento y presenta uno muchas cosas, y el corazón está radiante, y uno está contando los días, y en un estado como Guerrero la responsabilidad es muy grande”.

Recordó que un periodista le preguntó cuándo ganó la elección, “¿ser gobernador de Guerrero no es como sacarse la rifa a un tigre?”. Y él respondió “de dos tigres, y en una jaula chica y sin látigo. No hay manera de cómo espantar al tigre”.

Expresó que asumió la responsabilidad de su gobierno ante un pueblo que desde su historia suele ser exigente, tiene una historia de rebeldía y una historia de inconformidad derivado de las condiciones de pobreza en las que se distingue Guerrero, pero a pesar de esto el estado es noble, de gente trabajadora, entregada, y entiende sus circunstancias.

Dijo que llegó a ser gobernador en un momento difícil y complejo, “pasó el momento aquel de ser gobernador electo, a ser gobernador, traté de asumir mi responsabilidad con una gran determinación, ánimo y voluntad”. Dijo que su primer reto fue cómo tratar de trabajar y establecer la ruta de gobernabilidad.

Recordó que cuando llegó a rendir protesta como gobernador habína tomado 32 Ayuntamientos, y edificios de gobierno que no podían operar, (sin hacer referencia a la razón de las protestas, los 43 normalista desaparecidos de Ayotzinapa), dijo que la propia Casa Guerrero que estaba destinada a otra actividad, “un museo que no funcionó”.

El mandatario sostuvo que buscó experiencia en su gabinete por eso muchos ex secretarios que ya habían sido repitieron en el cargo, como el secretario de Salud, Carlos de la Peñas Pintos, el secretario de Educación José Luis González de la Vega, el secretario de gobierno Florencio Salazar Adame, el secretario de Turismo, Ernesto Rodríguez Escalona, y con ese equipo se ayudó para dejar de ser el primer lugar de todo lo malo y el último de todo lo bueno.

El gobernador presumió que deja un estado con una baja incidencia de homicidios dolosos, aunque hay días que calificó como difíciles como este martes, cuando se registraron seis asesinatos en el estado. Rememoró que de estar en los primero lugares hoy el estado se encuentra en la décima posición en crímenes dolosos.

Habló de que el tema de la gobernabilidad no se da en automático, pero él lo resume en “tener menos problemas y tener más soluciones”, sustentado en el diálogo y el acercamiento además de estar en los problemas. Indicó que él mismo desactivó el bloqueo de la carretera federal  en Xaltianguis luego del sismo, y afirmó que lo peor que debe de ser un gobernante es no ir a donde hay problemas.

Ante los asistentes recordó la frase que dijo en su sexto informe de gobierno de que “en Guerrero un problema que no se le atiende se puede convertir en un incendio”. Insistió que los problemas de Guerrero se generan por la violencia, y dijo que eso es lo que se tiene que cuidar y “cuidarnos de los violentos”, qué causan impacto mediático, pero que no todos los guerrerenses son así.

Respecto a la pandemia destacó que a pesar de la enfermedad el Inegi reportó que el estado estaba en los lugares con menos desempleados, porque hay muchas personas trabajando en la informalidad, aunque hubo 15 mil personas que perdieron sus trabajos. También que en 2014 y 2015 el estado se ubicó con el mayor movimiento económico por las inversiones que provocó la desgracia del paso del huracán Ingrid y la tormenta Manuel.

Expresó que afrontar el virus que provoca Covid-19 ha sido muy complejo, “ha sido muy duro” porque han fallecido una gran cantidad de personas, adultos mayores, jóvenes y algunos casos de niños. Pero también pasaron cosas como la mucha solidaridad que se observó.

Dijo que cuando llegó la tercera ola de contagios, que así como apareció en el estado, así se está combatiendo y esperó que para cuando termine su gobierno en octubre esté estabilizado. “La pandemia ha sido un tema que ha tenido gran afectación, no hay que cantar victoria”, y donde se han invertido mil 500 millones de pesos.

Sostuvo estar convencido que cuando acabe la pandemia el turismo va a renacer, porque es una actividad que no va a desaparecer y que le gusta al ser humano. El gobernador llamó a cuidar a Acapulco para que siga siendo el mejor polo turístico.

Y en este apartado indicó que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha estado atento a las afectaciones que dejó el sismo de 7.1 y después puso un audio del presidente. Informó que hay 8 mil 700 viviendas afectadas y anunció que desde este miércoles comenzaría el censo de afectados por parte del gobierno federal.

Le preocupa la situación financiera del estado

Astudillo Flores también dijo que le preocupa mucho la situación financiera del estado “porque hay que decirlo, que el tema financiero de Guerrero no es exclusivo de Guerrero, los 15 estados que concluyen administraciones, están igual o mucho peor que Guerrero”.

Presumió que Guerrero es el tercer estado con menos deuda del país, y expuso las deudas de otros estados como Nuevo León que es de 80 mil millones, Coahuila de 60 mil millones, Colima de 6 mil millones, Michoacán de 40 mil millones, Oaxaca de 12 mil millones, Tabasco de 6 mil millones, y Guerrero de mil 400 millones” deuda que atribuyó a lo que el estado aportó para la construcción de la Autopista del sol.

El gobernador reconoció que hay problemas económicos, y dijo que este año se han recrudecido porque las participaciones federales disminuyeron, y el estado dejó de recibir mil 400 millones de pesos, y que otro problema que agravó las finanzas del país fue la desaparición del fondo de estabilización.

Informó que para paliar estos problemas en diciembre de 2020 se pidió dinero a los bancos y en vez de pagarlos en 12 meses se pagaron en 6 meses, 400 millones por mes, “no le debemos un peso a ningún banco”.

Astudillo Flores afirmó que no hay observaciones al estado ante la Función Pública y la Auditoría Superior del Estado, y que una vez terminado su gobierno estará pendiente de estos asuntos. Indicó que el Acabus lo acabó la pandemia, pero que es una obra socialmente maravillosa.

Sin referirse de manera directa a la protestas de los últimos días expresó que “Guerrero es el estado del bono”, que tiene muchos bonos para los trabajadores, “pero hay algunos bonos que van hacer muy difíciles pagarlos a futuro” y que lo que se va a tener que buscar es cómo invertir en el estado y recaudar. Advirtió que ya no hay empleos en el gobierno, porque la nómina es muy amplia.

Después atajó que “los que van a hablar mal de uno, son muchas veces a los que les hiciste un favor. Yo estoy preparado para todo eso, para defenderme de manera correcta y puntual y las que no sean verdad sencillamente las dejaré pasar”.

Su relación con el presidente

El gobernador también habló de su relación con el presidente y dijo que él le hizo caso a una encuesta donde la ciudadanía expresó que no debería de pelearse con el presidente López Obrador y así lo hizo, “yo creo que más o menos la llevé bien, y eso trajo como consecuencias que el gobernador no se convirtiera un problema para el presidente de la República”.

“Yo seguí la regla, esta que leí hace mucho tiempo, mide bien tus fuerzas, fíjate con quien te peleas. Hay que medir con quién se puede uno enfrentar y con quién se puede complicarse la vida, y yo estoy convencido que yo no estaba en condiciones de ponerme a pelear con el presidente, pero sí de llevar una relación correcta, sensata, digan y yo espero haberlo medianamente logrado”. Después agregó “no me gusta estorbar, no me gusta incomodar”.

Dijo que ha leído mucho el libro El Arte de la prudencia de Baltasar Gracián (escritor jesuita español), y afirmó que ha tratado de no ofender, no lastimar, y tratar de ser empático y no caer gordo, porque los políticos luego cuando tienen el poder piensan que se convierten en seres extraterrestres lo que es un gran error, y dijo que el ser gobernador tiene un tiempo y un límite.

“No pienso vivir en Chilpan-cingo”, reveló y dijo que desde su departamento en Acapulco o en su casa en la Ciudad de México va a tratar de ser siempre alguien que ayude y que colabore, que construya. Afirmó que tratará de ser un ex gobernador tratando de actuar de la misma manera en cómo fue gobernador.

Dijo que el “peor” momento de ser gobernador fue cuando se infectó de Covid-19, porque encerrado, deprimido, y con tos, estaba preocupado por el estado, y sin saber qué hacer respecto a la pandemia que desnudó la situación del sector salud y por eso el sector salud merece un reconocimiento porque muchos trabajadores de la salud fallecieron.

Astudillo Flores también dijo que el tema que más le preocupa de Guerrero es la inseguridad pero el tema fundamental es la economía y qué se va a tener que hacer, para atraer la inversión.

Agradeció a su esposa Mercedes Calvo, quien lo frenó para no cometer errores y a quien le manifestó su reconocimiento por su trabajo frente al DIF. También lamentó la muerte del diputado federal y su amigo René Juárez.

Afirmó que según las encuestas “tengo mejor aceptación de cuando llegué a ser gobernador”.

A pregunta de una de las integrantes del Grupo ACA, respondió: “¿Hay más orden y paz? Sí, el orden está en la estabilidad de las instituciones y la paz está en los indicadores”.

Texto: Jacob Morales/ Foto: El Sur