28 mayo,2020 5:06 am

Por sexto día sigue el hospital del ISSSTE sin camas para pacientes con Covid-19

Denuncian reporteros de distintos medios que elementos de la Guardia Nacional les impidieron cubrir la situación del nosocomio

 Acapulco, Guerrero, 28 de mayo de 2020. El hospital general del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) en Acapulco sigue saturado por sexto día consecutivo.

Reporteros de distintos medios locales, entre ellos El Sur, denunciaron que elementos de la Guardia Nacional les impidieron cumplir con su labor al pedirles que se retiraran de la banqueta.

En un recorrido ayer afuera del nosocomio, ubicado en la avenida Ruiz Cortines, todavía se observó el letrero en el que se lee: “Informamos hospital saturado, disculpen las molestias, no hay camas disponibles para Covid-19”.

El Sur publicó el pasado sábado la denuncia de los trabajadores del hospital sobre la saturación de camas para casos Covid-19, y la falta de insumos.

Se le llamó al director del hospital, Guillermo Velázquez Gaona, para obtener información sobre el problema, pero contestó que no da entrevistas por teléfono y que para solicitar una en persona “tendría que hacerlo a través de la subdelegación porque nosotros dependemos de la subdelegación médica”.

El fotorreportero de El Sur, Carlos Alberto Carbajal, contó que en la cobertura que hizo ayer junto con cuatro compañeros de La Jornada Guerrero, Quadratín y Novedades, elementos de la Guardia Nacional les pidieron que se retiraran.

Narró que a las 11:30 de la mañana llegó a la entrada del hospital. Una hora después vio que llegó una carroza que ingresó al estacionamiento para transportar a un fallecido.

Al empezar a tomar fotos, los guardias de la entrada del estacionamiento intentaron tapar la escena. Uno de ellos avisó por radio: “ya están de nuevo aquí”, a quien después salió por la entrada principal del hospital, “camisa manga larga, cuadrada”, sin vestimenta de doctor o enfermero, posiblemente un “directivo”.

El susodicho empezó a hablar por teléfono en el área donde están estacionadas las ambulancias “y en menos de diez minutos”, indicó Alberto Carbajal, llegó una patrulla de la Guardia Nacional.

Cuatro elementos de este cuerpo policiaco se acercaron al fotorreportero de El Sur y le dijeron: “no puedes estar tomando fotos aquí”, a lo que contestó: “soy reportero, soy fotógrafo, estoy trabajando y estoy en la vía pública”.

A pesar de que los cinco reporteros enseñaron las identificaciones de los medios donde laboran y argumentaron lo mismo, los elementos de la Guardia Nacional insistieron por unos minutos de que no podían estar ahí, a lo que éstos decidieron desistir y cruzaron la avenida.

Carlos Alberto Carbajal dijo que el hombre que hizo las llamadas “se quedó hablando con la Guardia Nacional y estuvo señalándonos”.

Como a la 1 de la tarde, los reporteros decidieron irse del lugar y vieron que la Guardia Nacional se quedó estacionada afuera del hospital.

El fotorreportero de El Sur especificó que ésta es la primera vez que sucede esto en cuatro días de cobertura que realiza sobre la saturación en el hospital que han denunciado trabajadores: “nunca hemos tenido ningún reclamo, sobre todo de los familiares que están ahí esperando y han sido entrevistados”.

Tres guardias ubicados en la entrada principal y cubiertos con caretas deciden quién entra al hospital. Dos trabajadoras de la salud salieron y antes de entrar a su automóvil se rociaron una a la otra con un líquido por todo el cuerpo utilizando aún su careta.

Afuera esperan grupos de tres o cuatro familiares, todas con cubrebocas, unos minutos. Algunos entran y otros se van. A pesar de que su cara está cubierta casi en su totalidad, se pueden observar ojos que están a punto de llorar.

A la 1:30 de la tarde una señora salió por el estacionamiento del hospital y abrazó a sus tres familiares que esperaban en la banqueta; todos empezaron a llorar.

Otra cartulina colocada en la entrada del hospital anuncia las medidas tomadas por la contingencia como la suspensión temporal de la consulta externa, con excepción de la “onco-quirúrgica, gineco-onco y hematología”, la visita de un solo familiar y usar “estrictamente” el cubrebocas.

Texto: Ramón Gracida Gómez / Foto: Carlos Alberto Carbajal