24 enero,2022 10:13 am

Presentan aspirantes a secretarios del sindicato de Pemex sus propuestas en “la mañanera”

 

Ciudad de México, 24 de enero de 2022. Ricardo Aldana se puso cubrebocas rápidamente y volteó a ver a la Secretaria del Trabajo, María Luisa Alcalde, como a manera de reproche.

Lo acababan de acusar de corrupto, traidor y cacique por su labor como tesorero del sindicato petrolero y su cercanía con el ex líder del gremio, Carlos Romero Deschamps.

“Esta persona que está aquí, que no merece ni que mencione su nombre, con qué calidad moral (…) se atreve a querer representarnos si fueron ellos quienes traicionaron a México y a los petroleros”, le lanzó la candidata María Cristina Alonso García.

“Son unos traidores, esos proyectos están camuflageados para dar continuidad la corrupción de Carlos Romero Deschamps”, agregó.

La candidata también le dijo a Aldana que intenta embaucar a los petroleros para después continuar con el sometimiento a las bases.

“Traidores, destruyeron el pilar principal de la Revolución Mexicana que es nuestro petróleo. Vamos a terminar con esta era del cacicazgo y dar paso a un nuevo modelo sindical”, convocó.

“Recordemos que este es un tema de seguridad nacional (petróleo) y ellos lo pusieron en riesgo. No más de lo mismo, esto es por todos los mexicanos, por todos los trabajadores”.

Aldana, quien figuró en el expediente de corrupción del caso conocido como “Pemexgate”, sólo encogió los hombros, trenzó las manos y siguió escuchando. Después vendrían otras acusaciones.

Este lunes iniciaron en la mañanera las exposiciones de los candidatos a la secretaría del Sindicato de Trabajadores Petroleros (STPRM). Hablaron 5 de 25 aspirantes, el resto lo hará en la semana.

Ya sin la presencia del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien dio la bienvenida a los candidatos y se retiró, el primero en hablar fue precisamente Aldana.

“La transparencia será uno de los ejes centrales, si así lo deciden los trabajadores, de mi gestión”, prometió el encargado de los dineros del gremio que históricamente ha sido opaco y señalado de corrupción.

Pausado, con cierta inseguridad en la voz, Aldana también ofreció respeto absoluto a los derechos laborales y rendición de cuentas.

“Vamos a transparentar absolutamente todo el trabajo de nuestra organización sindical”, agregó el ex legislador a quien sus contrincantes acusan de ser el alfil de Romero Deschamps.

Después se puso su cubrebocas gris tal y como fue su exposición.

De biblias, rezos y silencios incómodos, la tunda para Aldana siguió.

Daniel Aranda, tercero de los candidatos en exponer, acusó al gremio de robar y saquear, y a sus líderes de enriquecerse a costa de los trabajadores y de meterse las ganancias “en la nariz”.

“Cero corrupción, (necesitamos) una rendición de cuentas que verdaderamente nunca ha existido en la historia de nuestro sindicato”, dijo en clara alusión a Aldana.

“Todo ha sido robo, saqueo, enriquecimiento, muchos de ellos para metérselo a la nariz, para tomarlo en bebidas y para con mujeres”.

Con Biblia en mano, Aranda reprochó que en toda su vida sindical nunca le han dado un reparto de utilidades los “compañeros” representantes.

En cambio, dijo, los líderes viven en casas suntuosas, poseen yates y se trasladan en aviones y helicópteros privados.

“Desafortunadamente no han tenido corazón, han sido hombres con mucha maldad, con mucho deseo de enriquecimiento ilícito.

“No podemos seguir apoyando a hombres y a mujeres que han hecho lo incorrecto, apoyemos al hombre o a la mujer que () va hacer las cosas correctamente”, urgió.

El candidato pidió votar por alguien que sí “tenga temor de Dios” y sea inteligente para apartarse de toda maldad.

“Traje mi Biblia y aquí ante la secretaria del Trabajo y todos ustedes que son guerreros, pongo mi mano para decirles a mis compañeras y compañeros que haré las cosas bajo el temor de Dios”.

Último en exponer, José Luis Cabrera caminó al atril con una enorme sonrisa, la misma que esbozó desde que entró al Salón. Incluso, posó para los camarógrafos mientras sus rivales hablaban.

“Bendecido inicio de semana. Le doy gracias a Dios, le pido tome el control de mi vida. Amén”, arrancó.

Cabrera habló de la creación del sindicato, de sus estudios y su trayectoria en Pemex, y de sus sueños como dirigente sindical hasta que se quedó en absoluto silencio durante 23 segundos.

En medio del incómodo silencio, el candidato optó por volver a sonreír y hacer un ademán con la mano izquierda. Retomó para prometer mejores salarios, prestaciones y bonos.

“Son muchas cosas las que yo sueño, pero me despido diciendo que soy un ser humano que ha cometido errores, que respeta el derecho de libertad, igualdad”.

“Respeto a todos los seres del universo, cuidando el medio ambiente, recursos naturales. Caminaremos más lejos, eaahhhh, te la sabes”, remató como haciéndose el chistoso.

Texto: Antonio Baranda / Agencia Reforma