Óscar Ricardo Muñoz Cano
Pese a estar negada la entrada al público desde hace meses, el Museo Fuerte de San Diego sí abrió sus puertas la noche del sábado anterior, pero para una fiesta privada.
Realizada en la plaza de armas, dicha fiesta fue para celebrar los cien años de la empresa de transportes Estrella de Oro y a ella asistió el secretario de Turismo federal Miguel Torruco Marqués y el de Turismo estatal Santos Ramírez Cuevas.
Asimismo, estuvieron en el sitio el presidente municipal de Taxco, Mario Figueroa, y el de Iguala, David Gama Pérez, así como directivos de la empresa celebrada.
Fue pasadas las 8 de la noche que alrededor de un centenar de personas se dio cita en el lugar, en donde se ofreció una cena y más tarde un espectáculo musical y otro de fuegos artificiales.
De lo anterior, hay constancia en las redes sociales donde personajes invitados como Susana Palazuelos presumieron de su asistencia al evento en el sitio histórico que depende del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), que dirige Diego Prieto Hernández.
“Estrella de Oro tiene el honor de invitarte con mucha emoción y cariño al cierre de campaña por su 100 aniversario, en una rueda de prensa con un cocktail inolvidable. Contaremos con la presencia de directivos de la marca y autoridades de gobierno”, dice la invitación de la empresa de transportes enviada a distintas personalidades.
No obstante, a decir del propio personal de vigilancia apostado en la entrada del Fuerte, no hay actividades públicas ni se puede acceder a la Plaza de Armas.
En una breve visita ayer por la mañana se pudieron observar las puertas cerradas al tiempo que los guardias informaban que el lugar no estaba abierto al público.
–¿Está cerrado el museo al público? –se les preguntó.
–Sí, está cerrado, no hay paso.
–¿Ni a la Plaza de Armas?
–No, no hay paso a ningún lado, está cerrado el museo.
–¿Saben si está la directora, para platicar con ella?
–No, no sabría decirle.
Fue a mediados de diciembre del año pasado que la directora del Fuerte, Laura García-Lascurain Vargas, anunció que el 28 de diciembre se abriría al público el lugar pero no las 13 salas del museo. (El Sur, edición del 16 de diciembre, 2021).
Han pasado casi cinco meses y las puertas han permanecido cerradas desde entonces, manteniéndose negado el acceso a la gente.
