Acapulco, Guerrero, 22 de diciembre de 2023. En esta temporada vacacional de invierno una de las playas más visitadas es Tlacopanocha, por su bajo oleaje y su ubicación, a un costado del Zócalo de Acapulco.
Este jueves, en la arena fueron colocadas al menos unas 30 sombrillas y sillas, todas fueron ocupadas por los visitantes que a pesar de la situación en que se vive en Acapulco luego del impacto del huracán Otis, llegan de diferentes partes de la república.
Los prestadores de servicios turísticos de esa playa llamaron a las autoridades de la Secretaría de Marina a apoyarlos para retirar cuatro embarcaciones que encallaron en el área de playa, pues quieren colocar mobiliario y recibir a más familias.
El señor Ernesto Villalpando llegó la mañana de ayer de la Ciudad de México con ocho integrantes de su familia, y de inmediato quisieron salir a la playa y les recomendaron la zona del malecón donde encontraron Tlacopanocha.
El hombre dice que le impresionó ver el agua cristalina, aunque “está muy devastada la ciudad, vi mucho deterioro. Pero lo que vi ahorita es que todo los hoteles no tiene la estructura como debe de ser, no es una estructura buena”.
Comentó que se hospedaron en el hotel Ximar en Costa Azul, donde estarán hasta el sábado, y dice que tiene buenas instalaciones, y que todos los años llega ahí.
El señor, de 70 años, dijo que este diciembre no podía ser la excepción de estar en Acapulco a pesar de lo que vio en la televisión, donde se mostraron las imágenes de la devastación y la gran cantidad de escombro y basura en las calles.
Incluso afirmó que el otro año vendrán a despedir 2024 y recibir 2025 y ver la gala pirotécnica. Sobre la falta de centros comerciales y espacios de ocio, expresó que para ellos, lo más bonito es estar en la playa, disfrutar del sol, y descansar. En total la familia estimó que gastará unos 20 mil pesos, incluido el hospedaje que, por noche, le cuesta mil 200 pesos.
A unos metros del lugar estaba la señora Susana Ríos, quien llegó el martes a Acapulco, procedente de Guadalajara a visitar el puerto y a su familia que desde el impacto del huracán solo se había comunicado con ellos por teléfono.
La mujer dijo que a pesar de la situación que atravesó Acapulco, y en las condiciones en que quedó, decidió viajar porque el sueño de su papá era pasar la Navidad en familia, en la ciudad.
La mujer comentó que estaba impresionada de la rápida recuperación de la zona turística, desde el área del aeropuerto hasta el centro de Acapulco, tramo que recorrió una vez que llegó.
A pesar de que su familia vive en Acapulco, ella decidió informarse de las condiciones en que estaba la ciudad, pero nada de lo que vio en las noticias y redes sociales es parecido a lo que encontró.
“Cuando pasa el huracán estábamos indecisos en venir. Sí nos informamos por la misma contingencia que había, estábamos preocupados por la familia, obviamente allá las noticias eran mucho más exageradas”.
La mujer expresó: “lo que veo es que se está recuperando muy rápido, es complicado que sea al cien por ciento, pero a casi dos meses, a lo que yo veo está muy bien. Se ve medio destruido pero también que la gente lo está levantando”.
La playa fue la primera que abrió el servicio a los bañistas y visitantes el pasado 9 de noviembre, y desde el primer día fue visitada por vendedores ambulantes, este jueves se vio a más de cinco durante el recorrido, algunos ofreciendo frutas, recuerdos, raspados, y lentes.
Texto: Jacob Morales Antonio
