11 mayo,2024 5:50 am

Racha global de temperaturas récord

Octavio Klimek Alcaraz

 

El Servicio de Cambio Climático Copérnico (C3S) a través del conjunto de datos meteorológicos de ERA5 del Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Plazo Medio (ECMWF acrónimo en inglés), ha informado de una serie de récords de temperatura global en abril de 2024 (https://climate.copernicus.eu/copernicus-global-temperature-record-streak-continues-april-2024-was-hottest-record).

Abril de 2024 fue el abril más cálido a escala mundial desde que hay registros, con una temperatura media del aire en superficie de 15.3 grados, 0.67 grados por encima de la media de 1991-2020 para ese mes y 0.14 por encima de la temperatura de abril de 2016, que hasta la fecha ostentaba el récord de temperatura del cuarto mes del año. El mes fue 1.58 grados más cálido que la media estimada para abril de 1850-1900, el periodo de referencia preindustrial

La serie de récords ya dura 11 meses. En mayo de 2023, hace exactamente un año, las temperaturas medias en todo el mundo comenzaron a superar significativamente todos los máximos anteriores, tanto en tierra como en el océano. La temperatura media mundial de los últimos 12 meses (de mayo de 2023 a abril de 2024) es la más alta desde que hay registros, al situarse 0.73 grados por encima de la media de 1991-2020 y 1.61 por ciento por encima de la media preindustrial, de 1850-1900.

La temperatura media europea en abril de 2024 se situó 1.49 grados por encima de la media de abril en el periodo 1991-2020, lo que convierte al mes en el segundo abril más cálido registrado en el continente. Fuera de Europa, las temperaturas fueron más elevadas respecto a la media en el norte y noreste de Norteamérica, Groenlandia, este de Asia, noroeste de Oriente Medio, zonas de Sudamérica y la mayor parte de África.

La temperatura mundial de la superficie del mar (TSM) dentro de las coordenadas 60 grados sur-60 grados norte alcanzó en abril de 2024 una media de 21.4 grados centígrados el valor más alto de los registros para este mes y ligeramente inferior a los 21.7 grados de marzo de 2024. Se trata del decimotercer mes consecutivo en el que se registra la temperatura más alta en los registros del ERA5 del mes respectivo.

Uno de los factores que impulsan el aumento de la temperatura en los océanos del mundo es el fenómeno de El Niño en el Este del Pacífico ecuatorial, que se produjo en el Pacífico el año pasado. El Niño continuó debilitándose hacia condiciones neutrales, si bien las temperaturas del aire marino se mantuvieron en líneas generales en un nivel inusualmente elevado. Actualmente no está claro qué está impulsando este calentamiento en particular. Detrás de esto podrían estar efectos de retroalimentación entre el océano y la atmósfera que aún no se comprenden en detalle.

Respecto a las precipitaciones, abril de 2024 fue más húmedo que la media en regiones del centro, este y sur de Norteamérica, en la mayor parte del noroeste, centro y noreste de Europa en Asia Central, los países del golfo Pérsico, el extremo oriental de Asia, el este de Australia y el sur de Brasil. Las fuertes precipitaciones provocaron con frecuencia inundaciones. Asimismo, se observaron condiciones más secas de lo normal en zonas del norte de México, alrededor del mar Caspio y en la meseta tibetana. También fue un abril más seco que la media en la mayor parte de Australia.

En relación con el hielo marino, se comunica que la extensión del hielo marino en el Ártico se situó en torno a un 2.0 por ciento por debajo de la media, una anomalía negativa relativamente pequeña en comparación con las anomalías del mes de abril registradas en los últimos 10 años. Al igual que en marzo, las anomalías en la concentración de hielo marino mostraron distinto signo en todo el océano Ártico. Las concentraciones se mantuvieron por encima de la media en el mar de Groenlandia, una característica persistente desde el pasado octubre.

En el sur, la extensión del hielo marino del Antártico fue un 9.0 por ciento inferior a la media en abril, convirtiéndose en la décima extensión más baja para ese mes en el registro de datos por satélite, continuando así la serie de frecuentes y grandes anomalías negativas que se observan desde 2017. Las concentraciones de hielo marino más inferiores a la media se registraron en el norte del mar de Weddell y en el sector del mar de Ross-Amundsen, como ya ocurrió en febrero y marzo.

Articulado a este reporte de Servicio de Cambio Climático Copérnico, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) presentó su informe sobre el Estado del Clima en América Latina y el Caribe 2023 (https://library.wmo.int/viewer/68895/download?file=1351_State_of_the_Climate_in_LAC_2023_es.pdf&type=pdf&navigator=1). Sus 10 mensajes principales, que se citan de manera textual son reveladores de nuestros avatares:

1.- En América Latina y el Caribe, 2023 fue el año más cálido del que se tiene constancia.

2.- El nivel del mar siguió subiendo a un ritmo superior a la media mundial en gran parte de la costa atlántica de la región, lo que amenaza el litoral de varios países y pequeños Estados insulares en desarrollo.

3.- El huracán Otis tocó tierra como ciclón de categoría 5 cerca de Acapulco (México), lo que ocasionó una gran pérdida de vidas e infraestructuras. De todos los huracanes que habían tocado tierra en la cuenca del Pacífico oriental, fue el más potente jamás registrado y uno de los que más rápidamente se intensificó.

4.- Las crecidas y deslizamientos de tierra provocados por las intensas precipitaciones causaron multitud de víctimas mortales y pérdidas económicas en toda la región. En São Sebastião (Brasil) se acumularon 683 milímetros de lluvia en 15 horas, lo que produjo un corrimiento de tierras que se saldó con el fallecimiento de al menos 65 personas.

5.- Los servicios climáticos son esenciales para mejorar la adopción de medidas y decisiones en diversos sectores. A pesar de los avances recientes y de varias iniciativas fructuosas, solamente el 38.0 por ciento de los Miembros de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) en la región indicaron que ofrecían productos climáticos adaptados al sector de la salud.

6.- El calor extremo y las olas de calor tuvieron durante todo el año consecuencias para la salud, como el exceso de mortalidad. Entre 2000 y 2019 se produjo anualmente en promedio un exceso de mortalidad en la región, debido al calor, del orden de 36 mil 695 defunciones.

7.- Una sequía severa e intensa, agudizada por las olas de calor, asoló vastas extensiones de América Latina en 2023. Hacia finales de año, el 76 por ciento de México había padecido sequía en cierta medida.

8.- El caudal del río Negro en la Amazonia alcanzó un nivel excepcionalmente bajo, sin precedentes desde que comenzaron las observaciones en 1902. En el canal de Panamá, el tráfico marítimo se vio restringido desde agosto por el bajo nivel de agua.

9.- Las temperaturas, inusualmente altas, y las condiciones secas afectaron asimismo a la flora y la fauna silvestres. En el lago Tefé, en la Amazonia brasileña, la temperatura del agua alcanzó un máximo histórico, lo que se saldó con la muerte de más de 150 delfines de río (Boto-cor-de-rosa).

10.- Muchos países de la región sufrieron pérdidas agrícolas debido a fenómenos meteorológicos y climáticos extremos, lo que agravó la inseguridad alimentaria, especialmente en las comunidades que dependían de la agricultura para subsistir.

En conclusión, más allá de la enorme responsabilidad por la crisis del cambio climático de los gobiernos de los países desarrollados, que son compartidas con los demás gobiernos de los países menos desarrollados de manera diferenciada, no queda más que adaptarse a esta realidad en lo local y buscar en lo posible la mayor resiliencia en nuestras comunidades.