21 septiembre,2018 7:50 am

Arrojan bombas molotov al cuartel del Ejército en Iguala para exigir la presentación de los 43

 
Desalojan el Ayuntamiento y el Palacio de Justicia ante el temor de una protesta. Los manifestantes llegaron en 13 autobuses con alrededor de 500 estudiantes de Ayotzinapa y de otras normales rurales y padres de familia de los desaparecidos
Redacción
Iguala
Estudiantes de Ayotzinapa y de otras normales rurales integrados a la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM) lanzaron bombas molotov y petardos y pintaron la fachada del 27 Batallón de Infantería en esta ciudad, para exigir la presentación con vida de los 43 estudiantes desaparecidos la noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre de 2014, así como justicia para los tres estudiantes asesinados.
En 13 autobuses con alrededor de 500 estudiantes y padres de familia de los desaparecidos de la Normal de Ayotzinapa, llegaron cerca de las 12:30 del día a la ciudad de Iguala. Informaron que harían un mitin en el monumento a los asesinados en el Periférico Norte y la calle Juan Álvarez, programado para las 10 de la mañana como parte de la jornada de lucha denominada A cuatro años sin verdad ni justicia.
Previo a la llegada de los autobuses y estudiantes al Palacio de Justicia de Iguala a la salida de la ciudad, al que le han arrojado piedras en ocasiones anteriores porque de ahí desaparecieron videos que documentaron la desaparición de los normalistas, fueron desalojados todos los trabajadores del inmueble desde las 10 de la mañana.
Sin embargo, los 12 autobuses con casi 500 estudiantes y padres de familia de los 43 desaparecidos siguieron de largo su camino por la autopista Iguala-Taxco y desviaron su camino al periférico Norte, al 27 Batallón de Infantería.
Afuera del cuartel militar estudiantes y padres se colocaron en la entrada con las fotografías de los 43 estudiantes desaparecidos, mantas con leyendas como “Soy el rostro de Julio César”, “Ángel Aguirre Rivero Asesino”, al tiempo que un equipo de sonido lanzaba gritos de justicia para los estudiantes como “vivos se los llevaron, vivos los queremos”.
Debido a que los cerca de 500 estudiantes se dispersaron en toda la parte frontal de la entrada del 27 de Batallón cubiertos de la cara, negocios cercanos y el centro comercial Galerías Tamarindo –construido en terreno cedido por el Ejército y propiedad del ex alcalde José Luis Abarca Velázquez y que también ha sido vandalizado- cerraron sus puertas y evacuaron al personal.
“Exigimos que sean investigados todos los militares que participaron esa noche”, dice Felipe de la Cruz
En la protesta el vocero de los padres de familia, Felipe de la Cruz dijo, “exigimos verdad y justicia a casi cuatro años de la desaparición forzada de los jóvenes estudiantes, sabemos y hemos hecho la denuncia de la participación directa del 27 Batallón en esa noche lluviosa de Iguala, por eso estamos aquí parados para decirles que ni perdón ni olvido, que la llaga sigue abierta y que exigimos que sean investigados todos los militares que participaron esa noche”.
Mencionó que fueron soldados del Ejército mexicano quienes desalojaron a los jóvenes de la clínica Cristina y les exigieron sus credenciales y nombres completos, “porque si no (se las entregaban) nunca los iban a encontrar, esa fue la frase que dijeron a nuestros jóvenes, hoy entendemos el mensaje, hoy sabemos cuál era la misión que llevaban los militares esa noche”.
También dijo que no van a descansar hasta que sean investigados y castigados los responsables de esa noche del 26 y madrugada del 27 de septiembre, “en esta ciudad cuna de la bandea y que hoy es cuna de asesinos y delincuentes, porque así lo han demostrado durante este tiempo, el color que ha mostrado respeto y admiración a los mexicanos, hoy da vergüenza verlos transitar por nuestras calles, intimidando a la población, eso es lo que ocasiona hoy el Ejército mexicano, sabemos de antemano que recibieron órdenes, por eso Enrique Peña Nieto sigue insistiendo en su ‘verdad histórica’ y protegiendo a los responsables, pero no nos van a callar, ni siquiera nos van a detener”.
Agregó que el Tribunal Colegiado de Tamaulipas ordenó reponer la investigación, lo que “viene a hacer pedazos la verdad histórica”.
Advirtió que seguirán en pie las madres y padres de familia, con dignidad, coraje y valor, porque son cuatro años de tormento psicológico, físico y emocional, “y aquí estamos parados para decirles a los militares que van a pagar sus crímenes”.
Concluyó con un mensaje al gobierno del presidente electo Andrés Manuel López Obrador, quien rendirá protesta este 1 de diciembre, “hoy sabemos que quieren premiar a Saavedra (el comandante Alejandro Saavedra Hernández) que en su momento era el encargado de este cuartel y forma parte de los candidatos a la Secretaría de la Defensa Nacional, pero nosotros exigimos que sea investigado y que pague sus crímenes de esa noche, porque vivos se los llevaron, vivos los queremos”.
En otro lugar de la ciudad y debido a la movilización de estudiantes de la FECSM, trabajadores del Ayuntamiento de Iguala desalojaron el Palacio Municipal aproximadamente a la 1 de la tarde, debido a que un mes después de los ataques del 26 y 27 de septiembre, el inmueble fue atacado y quemado, incluso algunas tiendas fueron saqueadas por vecinos de la ciudad que aprovecharon las protestas.
En algunas oficinas y ante el temor de que se repitieran estos sucesos desalojaron a todo el personal, incluso a las comisiones de entrega-recepción de la administración entrante del alcalde electo por Morena, Antonio Jaimes Herrera.