Alto a la discriminación y la salida del Ejército de las comunidades, exigen

* Foro de mujeres indígenas

* Analizan los problemas de la mujer en todos los sectores * Demandan instancias especializadas para resolver la violencia ejercida contra las mujeres por parte de los militares, paramilitares, esposos o familiares

Teresa de la cruz, corresponsal, Chilpancingo * En dos foros distintos efectuados ayer, mujeres indígenas de Guerrero, Oaxaca, Veracruz, estado de México y Distrito Federal exigieron el cese a la discriminación económica, política y social, respeto a la forma en que la mujer decida parir, y porque termine la persecución política y el hostigamiento, y la salida del Ejército mexicano de las comunidades.

El primer acto, denominado Foro Regional de Mujeres Indígenas Rumbo al Foro Permanente de las Naciones Unidas, fue inaugurado al mediodía del sábado 6 de marzo, con la asistencia de unas 90 mujeres, quienes, según la coordinadora de la Asociación Nacional Indígena Plural por la Autonomía (ANIPA), Martha Sánchez Néstor, debían emitir un pronunciamiento para sumarlo a las propuestas que emanaran de los cuatro foros que se llevan a cabo en el país.

Pero también –dijo– se elegiría a la representante que asistirá a la tercera sesión del Foro Permanente de Cuestiones Indígenas, en mayo de este año en la ciudad de Nueva York, en el cual se abordará como un “tema especial” el de las mujeres indígenas, a partir del desarrollo económico y social, la cultura, el medio ambiente, la educación, salud y los derechos humanos.

Allí, en la sala José Francisco Ruiz Massieu del Congreso del Estado, las mujeres expusieron sus problemas, de los cuales resaltó el caso de la integrante del Frente de Comunidades Agrarias Indígenas Mixtecas de Oaxaca, Zoila Reyes Hernández, quien narró que su esposo Fabián López Díaz está secuestrado desde el 24 de noviembre del año pasado, y que a partir de las denuncias que ha interpuesto es hostigada.

Le siguieron cada una de las representantes de las mujeres, quienes expresaron que sufren de hostigamiento por su participación. Hablaron sobre violaciones a sus derechos, mientras que las parteras exigieron capacitación, y otras se quejaron sobre el trato que “recibimos por parte de los de corbata”, los cuales –precisaron– no son más que los funcionarios de quienes “nunca obtenemos solución”.

Los acuerdos

Luego de participar las representantes en tres mesas de trabajo: sobre Derechos Humanos, Salud, Derechos Sociales y Ambientales, demandaron en relación al primer punto que los distintos gobiernos “cumplan con las medidas necesarias para que las mujeres dejemos de ser discriminadas en todos los niveles de nuestra vida, económica, política, social”.

También demandaron, por medio de un documento, que “la legislación a nivel nacional, en especial en el artículo 27, incluya sin restricciones a las mujeres con derecho a posesión de la tierra y su homologación en las distintas leyes de los diferentes gobiernos estatal, municipal y local”.

Luego se demandaron que los gobiernos “respeten las leyes que reconocen nuestros derechos, como es la salud, decidir con quién casarnos, la tierra, trabajo remunerado, opinar, poseer bienes, decidir, manejar nuestra propia sexualidad y así evitar que los maridos sigan matando a sus esposas”.

Luego pidieron “que haya instancias especializadas para resolver la violencia ejercida contra las mujeres por parte de los militares, paramilitares, esposos o familiares. Esta no es una violencia que sea exclusiva de los pueblos indios, es una realidad que se vive a nivel nacional e internacional, que hunde sus raíces en el machismo”.

En el caso de la mesa que abordó el tema de salud (integrada en su mayoría por parteras) exigieron capacitación y profesionalización permanente, así como un estímulo económico, como reconocimiento de su aportación histórica.

Llamaron a las distintas autoridades para que respeten “las formas propias en que la mujer decida parir, además de que las parteras tengan el derecho de entrar el centro de salud y hospitales para atender en conjunto con el médico”.

En la tercera mesa de Derechos Sociales y Ambientales denunciaron que debido su participación enfrentan una persecución política, pero también “hay piratería de nuestros conocimientos sobre plantas curativas”

De igual manera llamaron a los gobiernos municipales, estatales y federales a “incluir los proyectos productivos de las mujeres, o que en el caso de los ya establecidos las mujeres decidamos si los aceptamos o no”.

Finalmente destacaron que una de las cuatro             representantes (cuyos foros se realizarán la próxima semana: dos en el DF y uno en Chihuahua) que asistirán al Foro Permanente de Cuestiones Indígenas a realizarse en mayo de este año en Nueva York, será Zoila Reyes Hernández, y quedó establecida una comisión para afinar más la propuesta del foro efectuado en la entidad.

Voces de mujeres indígenas

El segundo acto, titulado Segundo Foro: Voces de Mujeres Indígenas, se inauguró este domingo con una exposición artesanal y con una serie de ponencias, una de las cuales estuvo a cargo del coordinador del Centro de Derechos Humanos de La Montaña Tlachinollan, Abel Barrera, quien dijo que para garantizar el respeto pleno de las mujeres se deben “adoptar medidas para eliminar la discriminación contra ellas en la esfera de sus derechos económicos, sociales y culturales”.

Expusieron Ema Cerón, del Colectivo Nosotras; Consuelo Sánchez, de la Escuela Nacional de Antropología e Historia, así como el integrante del Foro Permanente en Naciones Unidas, Marcos Matías Alonso. Ellos coincidieron en que las mujeres indígenas están dando la lucha para ser tomadas en cuenta, no sólo como banco de votos, sino dentro de las agendas de gobierno.

También participaron representantes de la Organización de Pueblos Indígenas Me’phaa, quienes denunciaron que una de sus integrantes, Otilia Eugenio Manuel (traductora de las indígenas que fueron violadas por el Ejército, Valentina Rosendo Cantú, de Barranca Bejuco, municipio de Acatepec; e Inés Fernández Ortega, de Barranca Tecoani, municipio de Ayutla,) es “hostigada por el Ejército, patean su puerta y recibe anónimos con amenazas de muerte” .

Demandan empleos y salario

Entre los principales acuerdos de este segundo foro están llegar a oídos de las autoridades competentes.

Exigieron además empleo, salario justos para que haya un desarrollo de los pueblos.

Además dentro de la autonomía aseguran que han jugado un papel fundamental en su construcción en todos los niveles, regional, nacional.

Luego pidieron que la lucha de las mujeres indígenas “se debe situar en el marco de la lucha de nuestros pueblos, e insertar en la reivindicación que tienen como objetivo las demandas de tierras, recursos”.

Y en el caso de la presencia del Ejército en los pueblos, señalan que “ellos no tienen porqué tener injerencia en nuestras comunidades, bastante tenemos con nuestra pobreza, pedimos que salgan, que no haya militares porque no hacen justicia en nuestros             pueblos, no queremos que estén allí”.

Entre las organizaciones que asistieron se encontraban, por Guerrero, el Consejo de la Nación Amuzga, la Unión de Comuneros Nahuas, Me’phaa Savi, la Organización de Pueblos Indígenas Me’phaa de Ayutla, la Coordinadora Regional de Médicas Indígenas Tradicionales, Ndu Na Ñu Savi, la Asociación Nacional Indígena Plural por la Autonomía, el Consejo Guerrerense 500 Años de Resistencia Indígena.

Por Veracruz acudieron Tepaluia Macehual Zihuame; de Oaxaca, el Frente de Comunidades Agrarias Indígenas Mixtecas; del estado de México, Alianza de Pueblos de la Sierra Oriente del Valle de Toluca, la Asociación de Mexicana de Mujeres Organizadas en Red (Amor-Unorca), Católicas por el Derecho a Decidir; del Distrito Federal, Mazahua San Antonio Pueblo Nuevo, Axale.