Suspende Profeco una escuela en Chilpancingo que cobraba recargos en las colegiaturas

El delegado de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Saúl Montúfar Mendoza inauguró la Feria Regreso a Clases que se instaló en el Zócalo de Acapulco, y dijo que la dependencia colocó un sello de suspensión a una escuela particular en Chilpancingo por cobrar recargos en colegiaturas.
Acompañado de funcionarios y representantes de cámaras empresariales de Acapulco, Saúl Montúfar dijo que la dependencia supervisa que las escuelas no condicionen a los padres para que compren los útiles escolares en los planteles educativos.
Un usuario de la feria contó que gastará 3 mil pesos para comprar el material que van ocupar sus dos hijos: cuadernos, lápices, colores y mochilas.
De las verificaciones en las escuelas el delegado dijo, “estamos realizando varias verificaciones por este tema de regreso a clases, hasta el día de hoy hemos colocado sello de suspensión a una escuela particular de Chilpancingo porque está cobrando el recargo a las colegiaturas después del quinto día, cuando la ley dice que pueden cobrar recargos al cobro de colegiatura después de 10 días”.
Además dijo que se colocaron sellos de suspensión a un centro comercial en Tlapa porque no exhibía los precios en los artículos que tienen que ver con el regreso a clases.
Agregó que además se revisa que las escuelas particulares cumplan con el Reconocimiento de Validez Oficial, y en caso de que no lo tengan colocarán sellos de suspensión y lo darán a conocer, y “hasta hoy no hemos encontrado alguna que incumpla”.
La feria es la tercera de seis que se instalaran en el estado, estará en el Zócalo de nueve a ocho de la noche hasta el próximo domingo, son más de 50 proveedores los que participan que dan del 10 al 30 por ciento de descuento.
En tanto la señora Jazmín Suástegui dijo que tiene dos niños y que el presupuesto que tiene previsto para comprar material para ambos es de 3 mil pesos, sin contar los 250 pesos que pagará de inscripción.
“Se ve todo muy accesible, muy bonito y de buen material”, dijo la señora que mencionó que desconocía de la instalación de la feria, que se dio cuenta porque acudió al centro a un mandado y aprovechó para comprar una mochila para su hijo que le costó 200 pesos.
Informó que gastará 3 mil pesos, “entre libretas cocidas, colores y siempre piden libretas cocidas, porque los niños arrancan las hojas y cuando son cocidas tardan más”.