Karina Contreras

El director de la Facultad de Turismo, de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Héctor Tomás Pastor Durán, informó que la deserción escolar al año en ese plantel es de alrededor de 80 jóvenes, de los 800 matriculados, que se van por diversas causas, como tener un trabajo, estrés, problemas de inseguridad o emocionales.
Indicó que la deserción ocurre en mayor medida cuando van en segundo o tercer año por varios motivos, pues influye mucho “el ambiente y el entorno social en que vivimos”. Añadió que no son una escuela que tenga fuertes problemas de deserción, que es algo que se dio en todas las escuelas de la UAG.
Este martes, la facultad cumplió 53 años de fundada y se llevó a cabo un evento, donde el director aseguró que el plan de estudios de la facultad está enfocado en las necesidades del sector y adelantó que se trabaja en un proyecto para crear una extensión de la facultad en Copala, en la región Costa Chica.
Indicó que una vez elaborado y si es aprobado por el Consejo Universitario, el próximo ciclo escolar, que inicia en agosto de 2024, ya se tendrá para cubrir esa necesidad que existe en la región y con un nuevo enfoque, que no se contraponga con las carreras que ya hay en otras universidades de la zona.
Indicó que después de la pandemia se han incluido muchos protocolos sanitarios y de sustentabilidad que se deben llevar a cabo.
Añadió que el plan de estudios incluye una especialidad en hotelería, una especialidad en desarrollo de proyectos de turismo sustentable y un área de gastronomía; es decir, más especializados y de acorde a las necesidades de cada región y atender las necesidades del sector.
Indicó que se tiene una buena vinculación con las empresas, con más de 280 convenios nacionales e internacionales que permite a los estudiantes tener un mejor desarrollo.
Al director se le preguntó si dan seguimientos a sus egresados, para saber si están en el sector turismo, y respondió que sí y han encontrado que casi el 35 por ciento de ellos están ubicados en diversos destinos turísticos, como Cancún, Puerto Vallarta y Los Cabos.
Manifestó que la emigración es parte de la formación profesional de sus egresados, por eso la apertura de la movilidad estudiantil y los convenios nacionales e internacionales, por lo que ese “porcentaje sí lo tenemos planificado dentro de nuestro plan de estudios, porque a los estudiantes hay que ofrecerlos a otros destinos”.
El director dijo que en Acapulco hay muchas ofertas de trabajo, pero en niveles operativos y los estudiantes se han ido preparando desde primer semestre para que inicien en espacios operativos, pero cuando ellos egresan, deben tener una carrera profesional dentro del sector turístico haciendo estancias, prácticas profesionales y cuando egresen, al menos aspirar a las gerencias intermedias o las oportunidades que haya en otros destinos turísticos.
Pastor Durán se le preguntó sobre el turismo de autobús que llega, que según los empresarios del ramo no dejan dinero, a lo que respondió que, efectivamente, son de medianos o bajos recursos, sin embargo, para “poder cambiar esta tendencia se ha hablado mucho de que Acapulco se tiene que modernizar, tiene que generar nuevos atractivos, nuevas ofertas”.
El director dijo que, sin duda, la inseguridad afecta mucho en la imagen, en lo que un turista decide que sus próximas vacaciones en qué destino la va pasar.