Preocupa a pueblos del alto Balsas la contaminación del río que cambió de color

Preocupa a pobladores de 15 comunidades del alto Balsas la contaminación del río que cambió de color

Los vecinos siguen utilizando el agua para regar los cultivos, para abrevaderos del ganado y en algunos pueblos para bañarse y hasta para beber y cocinar, advierten. En Tula del Río, municipio de Mártir de Cuilapan, algunos vecinos se enfermaron luego de comer peces, informan

Zacarías Cervantes San Juan Totolcintla, Mártir de Cuilapan

Pobladores nahuas de las localidades de la zona del alto Balsas, están preocupados por la contaminación del río. Desde hace dos semanas el color del agua cambió de azul a verde, y en algunas localidades como San Juan Totolcintla, municipio de Mártir de Cuilapan, murieron algunas tortugas y mojarras. Mientras que en Tula del Río, del mismo municipio, algunas personas se enfermaron luego de comer peces. Formalmente, y por escrito, el miércoles de la semana pasada representantes de las comunidades de San Juan Totolcintla, San Agustín Oxtotipan y Tula del Río, de Mártir de Cuilapan, informaron del problema y entregaron muestras del agua a la Secretaría de Salud (Ssa), pero hasta este lunes no tenían respuesta, declaró el presidente del Comisariado de Bienes Comunales de Totolcintla, Melquiades García Ríos. Los propios representantes de los pueblos han recomendado a los habitantes que tomen precauciones, pero el agua del río sigue siendo utilizada para regar los cultivos, para abrevadero del ganado, y en algunos pueblos la utilizan para bañarse y hasta para beber y cocinar. En un recorrido este lunes, en la ribera del río se pudo constatar que el agua es de color verde; el comisariado de Bienes Comunales dijo que siempre ha sido azul. Explicó que el cambio de color del agua preocupa a pobladores de cuando menos 15 comunidades que se encuentran asentadas en las orillas del río, desde Tlalcozotitlán, municipio de Copalillo, hasta Tlamamacán, municipio de Mártir de Cuilapan, aunque dijo que río abajo hay más comunidades del municipio de Eduardo Neri (Zumpango) por las que pasa el afluente, pero que no han tenido contacto con sus autoridades o representantes. Consultado a la orilla del río, la autoridad comunal de Totolcintla declaró que desde hace dos semanas están con la incertidumbre, ante el cambio de color del agua. “Por eso fuimos a la Secretaría de Salud a pedirles que investiguen y les llevamos una muestra, porque así como está no es normal, el agua siempre ha sido azul”. Explicó que comenzaron a notar el cambio del color desde el jueves 15 de marzo. Ya han padecido la contaminación del río antes, indican “A nosotros nos preocupa esta situación porque ya nos ha tocado vivir epidemias por la contaminación del agua”. Informó que en 1988 murieron en San Juan Totolcintla, San Agustín Oxtotipan y Tula del Río 30 personas por cólera. Un año después, en 1999, el agua se puso negra y entonces se murieron todos los peces, incluso reses. Recordó que esa vez las autoridades reconocieron oficialmente que el ingenio azucarero de Zacatepec, Morelos, lavó sus instalaciones y descargó los desechos al río Amacuzac, que desemboca en el Balsas. “Y ahora, otra vez nos está pasando lo mismo, cuando la variedad de especies apenas comenzaba a multiplicarse; hay bagre, mojarra, pez diablo, tortugas y hasta langostino, empezaba a haber aquí, quien sabe de dónde llegaron”, declaró. Por la ribera del río se observó a campesinos trabajando sus tierras sembradas de sandía, melón y milpa, que riegan con agua del río que extraen a base de bombeo. Por la orilla también se observaron reces y asnos que bajan a beber agua. García Ríos dijo que cuando el agua está normal, es común ver en la orilla a la gente pescando o bañándose. Ayer la orilla lucía solitaria. Contó que algunos ya no pescan por temor a que el agua tenga residuos tóxicos, y que otros no bajan a pescar porque el agua está oscura y aunque se sumergen al fondo del río no alcanzan a ver las mojarras. “Nos preocupamos porque no sabemos qué es lo que tiene el río, por eso nos reunimos los comisariados de los tres pueblos (San Juan Totolcintla, San Agustín Oxtotipan y Tula del Río), para pedir a la Ssa que investigue, que haga un estudio porque no es normal que esté así el agua”, insistió. El escrito que entregaron a la Ssa el miércoles de la semana pasada fue firmado por el comisariado de Bienes Comunales de Totolcintla, García Ríos; el de Tula del Río, Rogelio Vicario, y el de San Agustín Oxtotipan, Ignacio Morales Mundo. “Lo que pedimos es para evitar alguna tragedia en esta región, pero les llevamos la muestra y hasta hoy no nos han dado una respuesta, no nos han dicho por qué el cambio de color”, se quejó. El problema más grave ocurrió en Tula del Río, en donde a algunos pobladores “les dolió el estómago” después de que comieron pescado la semana pasada. Otras familias guardaron el pescado seco, pero al día siguiente “ya no servía”. Sin embargo en este pueblo no se encontró al comisariado Rogelio Vicario, quien fue el que alertó a su vecino de Totolcintla sobre el problema. García Ríos informó que el sábado llegó a estas tres comunidades una brigada de la Ssa, pero no como respuesta al escrito que entregaron a la dependencia, sino que fue un recorrido de rutina del personal, según les dijo a los pobladores Alfredo Duque Vélez, quien encabezaba al grupo. Los integrantes de esta brigada repartieron entre los pobladores frascos de cloro para desinfectar las verduras y purificar el agua que consumen; asimismo, se llevaron muestras de agua del río a petición de la gente de los pueblos. “Nosotros les dijimos que eso ya lo hacemos, porque las mujeres tienen talleres en los centros de salud, en donde les dicen cómo van a desinfectar el agua, cuantas gotas le tiene que echar al agua de tomar, y ahora lo que queremos es que nos digan qué es lo que tiene el agua para evitarnos problemas o una tragedia”, insistió. Aunque ayer no se encontraron peces muertos, García Ríos aseguró que la semana pasada unos pescadores encontraron tortugas muertas y vieron peces “que venían flotando en el agua”. Admitió que, si bien esta vez el problema no es tan grave como en 1998 y 1999, la gente está preocupada y quiere que las autoridades les dé una explicación del cambio de color del agua. Dijo que el agua del río es vital para los pobladores, porque la usan para el riego de sus cultivos de sandía, maíz y melón. También baja el ganado a beber agua. Aseguró que en algunas comunidades asentadas cuesta abajo, como Analco, San Agustín Oapan y San Miguel Tecuiciapan, San Marcos Oacatzingo y Tlamamacán utilizan el agua del río para consumo humano, debido a que no cuentan con manantiales. Informó que cuando menos en San Juan Totolcintla les han pedido a los habitantes que tomen precauciones y que si sienten algún síntoma, de inmediato vayan al centro de salud. “Les hemos dicho, pero siguen viniendo algunos vecinos, sobre todo a pescar. Ayer estuvimos en San Agustín Oxtotipan y vimos que llegaron gentes a pesar”, dijo. Informó que para los habitantes es difícil saber de dónde se está descargado el agua verde y lo que tiene, porque en el Balsas se juntan cuatro ríos, el que baja de Amacuzac, Morelos; el de Tlapa, de Puebla y otro que viene de La Esperanza, de Mártir de Cuilapan. “Por eso le estamos pidiendo a los gobiernos estatal y federal que intervengan, que hagan un estudio, que nos escuchen como pueblos indígenas, les estamos haciendo un llamado para no después lamentar alguna tragedia, porque ya han sucedido aquí. No tenemos grandes cosas, sólo el río que para nosotros es un tesoro, algunos tienen ganado y de allí toman agua, y estamos haciendo la petición para evitar que se mueran otra vez los animales”, declaró. Después advirtió, “que nos escuchen, les estamos pidiendo sensibilidad, no estamos tomando ahorita ninguna medida de presión, solamente les estamos pidiendo que intervengan en esto”. Al gobernador, Héctor Astudillo Flores, le demandó concretamente que instruya a sus secretarios para que hagan algo, “que vengan y que vean esto”, dijo señalando el caudal verdoso. Informó que al no tener respuesta al oficio que entregaron a la Ssa dirigido, esta semana van a entregar otro al gobernador Astudillo, “para que nos informen qué está pasando y no estemos con la duda, con la incertidumbre”. El comisariado ejidal también denunció que estas comunidades no cuentan con el apoyo para el saneamiento permanente del afluente del río y que son los propios habitantes los que se encargan de la limpieza. Aseguró que se integran comisiones y que cada domingo una de ellas se encarga de recoger la basura para que no vaya a dar al río. Asimismo informó que actualmente están trabajando en un proyecto de reforestación de 100 hectáreas cerca de la comunidad para proteger los mantos acuíferos. En las 100 hectáreas van a plantar tepehuaje, guaje, guamúchil y maguey, que son variedades propias de la región.

Vecinos han enfermado por consumir agua del Balsas, informa el alcalde de Zumpango

El alcalde de Eduardo Neri (Zumpango), Pablo Higuera Fuentes confirmó que hay quejas de los pobladores de Amatitlán, Mazapa, Carrizalillo y Mezcala sobre la contaminación del río Balsas, al que llegan desechos de la mina Los Filos, ubicada en su municipio. Confirmó asimismo que, en su municipio se registraron casos de vecinos que han enfermado tras consumir el agua del río Balsas, por lo que pidió a la Secretaría de Salud municipal un monitoreo del agua. Este lunes, el alcalde perredista asistió a la firma del convenio de Ayuntamientos para la entrega de fertilizante del programa Más Maíz, en Casa Guerrero, donde indicó que, derivado de las denuncias de pobladores, la Secretaría de Salud municipal monitoreó la calidad de agua. “Hace tres meses, platicamos con la empresa minera que trabaja en Carrizalillo, ante las enfermedades que han presentado los pobladores, y las medidas que tomaron fueron llevarles agua en cada casa”, agregó. Detalló que, los casos de personas enfermas por consumir agua del río se han registrado en las comunidades de Mezcala y Mazapa, que se ubican dentro del rango de operación de la minera, que se señala como generadora de contaminación. Confirma que grupos de la delincuencia operan en la Autopista del Sol También durante la consulta se le preguntó por el asunto de la inseguridad en el tramo de la Autopista de Sol que cruza su municipio, y confirmó que ahí operan grupos de la delincuencia organizada. Informó que, sobre estos hechos y el incremento de la operación de grupos del crimen organizado en asaltos a turistas, fue informada la Secretaría de Seguridad Pública del estado. Detalló que los crímenes contra turistas en la Autopista del Sol la generan grupos que llegan de las comunidades de Plan de Liebres y de Huiziltepec. “Son grupos que vienen de la parte norte, es decir, de Tlacotepec, se meten por varias vías, algunas brechas en esa zona”, agregó. Reconoció que durante los últimos días se han incrementado los problemas de asaltos, pero que desde hace un año y medio se ha reportado a la Secretaría se Seguridad Pública del estado del aumento de los asaltos. Señaló que los asaltos en la carretera federal y en la autopista del Sol han sido recurrentes, e informó que su director de Obras Públicas fue asaltado en el tramo de Zumpango-Iguala cerca de Casa Verde, donde le quitaron su camioneta. (Anarsis Pacheco Pólito / Chilpancingo).

Insiste la alcaldesa de Apango en un proyecto alternativo para abastecerse de agua potable

La alcaldesa de Mártir de Cuilapan, Felícitas Muñiz Gómez informó que unos 5 mil habitantes de la cabecera municipal, Apango, tienen problemas para acceder al servicio público de agua potable, y se espera que un proyecto alternativo resuelva permanentemente el suministro. Este lunes al mediodía, la alcaldesa asistió al acto protocolario de firma de convenio en Casa Guerrero, donde señaló que ante el conflicto entre habitantes de la comunidad de Zotoltitlán y la cabecera municipal, se insiste al gobierno del estado que cree un proyecto que ayude a abastecer de agua potable. Reconoció que la tensión entre las dos comunidades permanece tras el asesinato de comisario y su hijo el jueves pasado. “La falta de agua está desde hace unos 30 años que hemos vivido este tipo de situación, ahora tenemos poco agua para solventar el problema”, agregó. La alcaldesa insistió en que hace más de dos años se trabaja en un proyecto con el gobierno del estado para cumplir el abasto de agua para la cabecera municipal, y así evitarse una constante confrontación con los habitantes de Zotoltitlán. Señaló que, inclusive se logró acceder a dinero a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), con el programa nacional de Fonoregion, con el que se asigna dinero para la construcción de dos pozos profundo con el que se plantea trabajar con dos constructoras. Recordó que, en enero de este año inició además la construcción de un pozo profundo para saber la cantidad de agua que se pueda extraer. “Ya teníamos otro pozo, uno está ubicado en Xacalco y otro en la parte norte de Apango”, afirmó. Dijo que para este proyecto, la Comisión de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento del Estado Guerrero (CAPASEG) hizo la licitación para el proyecto, con lo que se espera que se garantice la resolución del problema de una vez. En cuanto al conflicto con la comunidad de Zototitlán, señaló que se han replegado, por lo que de facto inició una tregua, como ocurre cada dos años luego de presentarse un enfrentamiento. “Se les ocurre pedir una minuta donde prometen no volver a hacer sus movilizaciones, cumplen los acuerdos y llega otro presidente y vuelven a recurrir a la misma movilización, nunca cumplen su palabra”, agregó. La alcaldesa dio a conocer que habitantes Tula del Río y San Agustín Ostotitla han reportado que el agua del río Balsas está contaminada y ha provocado diversas enfermedades entre los pobladores. (Anarsis Pacheco Pólito / Chilpancingo).

La violencia en ciudades del estado no inhibe la llegada de turistas, celebra Astudillo

Es prioritario para su gobierno que reabra la Coca Cola en Altamirano, reitera. Durante un acto de entrega de fertilizante gratuito, llama a sus funcionarios a procurar que el proceso electoral “salga bien

Anarsis Pacheco Chilpancingo El gobernador Héctor Astudillo Flores celebró que la violencia que se vive en ciudades del estado, incluidas las turísticas, no inhibe la llegada de visitantes y reiteró que es prioridad de su gobierno que la Coca Cola reabra pronto su bodega en Ciudad Altamirano que cerró tras amenazas y ataques armados de un grupo delictivo. Durante la mañana en Casa Guerrero se realizó la firma de convenios municipales del programa de fertilizantes a través del programa Más Maíz, en donde durante su discurso reiteró su convocatoria a que todos los funcionarios y alcaldes pongan de su parte para que el proceso electoral en ciernes “salga bien”. Insistió en que todos deben de ser respetuosos de la ley, para que cada uno haga lo que le corresponda y el día de la elección salga de la manera correcta. “Siempre que hay elecciones, cuando se van acercando las elecciones se empieza a decir que en Guerrero no hay condiciones de hacer elecciones. No es la primera ocasión, en Guerrero se tendrán que hacer elecciones y salir bien en las elecciones”, agregó. Indicó que durante este periodo confía en la madurez de todos, para colaborar en que se realice conforme a lo adecuado las elecciones, además de que los alcaldes que hayan dejado su cargo para participar en este proceso electoral sean suplidos conforme a la ley por los sus suplentes. “Sepan ustedes que al gobernador le interesa mucho la gobernabilidad, le interesa mucho que los ayuntamientos todos cumplan con sus responsabilidades que están establecidas en la Constitución”. Subrayó que “el gobernador” es compañero de los alcaldes, por lo que está interesado en ayudar a los municipios, y aseguró no tener ningún interés confrontarse con algún municipio. “Quien piense que el gobernador tiene conflicto con algún municipio o con algún presidente está equivocado, al gobernador le interesa la buena relación, le interesa la comunicación”. Pidió que no se confundan ninguno, ya que él tiene claro que entre todos se debe de salir adelante, por lo que espera que se continúe con el trabajo. Hacer análisis en el río Balsas Al concluir el acto protocolario fue abordado por reporteros, quienes le preguntaron sobre si ya tuvo un acercamiento con empresarios de Coca Cola, grupo Femsa. Respondió: “Es un asunto que le interesa muchísimo al gobierno y que lo vamos atender pronto”. Se le insistió sobre qué pasará con el empleo de los 160 trabajadores que dependían de la bodega de Tierra Caliente: “Vamos hacer lo que me corresponde, yo les daré mas información posteriormente”. También se le preguntó sobre el inicio de la Semana Santa en medio de una ola de ejecuciones cometidos en diferentes partes del estado: “La violencia no inhibe, y lo digo con toda la responsabilidad, la violencia que está ubicada y radicada en algunos lugares específicos, entre actores específicos, no inhibe. La ocupación fue muy buena y va ir creciendo a partir de mañana, seguramente”. De la preocupación que hay entre los habitantes del Alto Balsas, quienes temen la contaminación del río Balsas, ya que cambió de color: “Hay que revisarlo, yo creo que debemos hacer los análisis correspondientes”. Se suministrará el abono a más de 320 mil productores Este lunes en la Sala de la República de Casa Guerrero se realizó la firma de convenios con los municipios para el ciclo agrícola del 2018, en donde el gobernador dijo que por tercer año se entregaría el fertilizante de manera gratuita para más de 320 mil productores, que se utilizarán en 454 mil hectáreas a través del programa Más Maíz. Durante se intervención, Astudillo subrayó que el programa de fertilizante es de las cosas positivas de su gobierno. Enfatizó que en medio de la situación que se vive en el estado de Guerrero sería muy complejo que iniciara el año y que el programa de fertilizante desapareciera o se modificara. Por su parte, el secretario de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural, Juan José Castro Justo, señaló que con ese programa federal se pretende lograr el mayor desarrollo para el campo, y para esta primera ministración es por el monto de 42.5 millones de pesos. Detalló que la aportación estatal y en especie sería por parte del gobierno de 340 millones de pesos para beneficiar a más de 330 mil productores de 7 mil localidades y la firma de convenio con los alcaldes es para la operación del programa que contempla la forma de cómo atender a los productores.

Refuerza Apango el bloqueo en la carretera a Zotoltitlán para que el gobierno resuelva el problema del agua

Integrantes de la Comisión Ciudadana del Agua, en Apango, acordaron este lunes reforzar los bloqueos en la carretera que va hacia Zotoltitlan y nuevas acciones para presionar al gobierno del estado para que resuelva el problema de la escasez de agua, a 24 días de que pobladores de Zotoltitlán les cerraron las válvulas de la red. Además, adelantaron que se reunirían anoche para determinar las acciones, luego de que extraoficialmente se enteraron de que este martes el Congreso local aprobará la solicitud de licencia presentada por la alcaldesa, Felícitas Muñíz Gómez, quien busca reelegirse en el cargo. El síndico, Benito Sánchez Ayala informó que había un acuerdo con el gobierno estatal y con diputados del Congreso local, en el sentido de que no le autorizarían su solicitud en tanto no rindiera un informe financiero. Sánchez Ayala informó que, desde este lunes los pobladores reforzaron los bloqueos en la carretera que va hacia Zotoltitlan, y que en las próximas horas reforzarán sus acciones, porque el gobierno estatal no ha intervenido para resolver el conflicto entre la alcaldesa Muñiz Gómez y Zotoltitlán, que derivó en el cierre de las válvulas de agua a la cabecera municipal. La semana pasada, los integrantes de la comisión, que funcionan como enlace con las autoridades estatales, determinaron, asimismo, desconocer como intermediaria a la delegada de gobierno en la zona centro, Norma Yolanda Armenta Domínguez, “por carecer de capacidad, poder de decisión y no cumplir con la minuta de acuerdos en la que el punto principal es la reconexión del suministro de agua de la comunidad de Zotoltitlán a la cabecera de Apango”, dice el acta que elaboraron en la asamblea en la que la desconocieron. Los representantes de la cabecera municipal, que encabeza el ex alcalde perredista Gerardo Celino Flores, determinaron que sólo aceptaran una negociación con el gobernador, Héctor Astudillo Flores, o con el secretario de Gobierno, Florencio Salazar Adame. Los integrantes de la comisión también se manifestaron en contra de que el Congreso local apruebe la solicitud de licencia a la alcaldesa, sin que antes rinda cuentas al pueblo de su municipio, “porque fuera de normatividad realizó obras, tirando dinero del pueblo de Apango, y no sabemos con exactitud qué cantidad es, porque no conocemos los proyectos ni los costos”, dice el acta de la asamblea. A su vez, el integrante de la Comisión, Gerardo Celino Flores dijo que siempre ha habido opacidad en el manejo de los recursos de la alcaldesa, y que no se puede ir así, sin informar al pueblo y dejando en un absoluto desorden al municipio. Celino Flores informó que el problema principal del municipio sigue, porque la comunidad de Zotoltitlán no les libera el agua por culpa de la presidenta, mientras que ésta ya está solicitando licencia para reelegirse. Informaron que anoche habría una asamblea en la que determinarían las acciones en caso de que el Congreso local le apruebe la solicitud de licencia a la alcaldesa, que llegó por el partido Movimiento Ciudadano.

Preocupa a pobladores de 15 comunidades del alto Balsas la contaminación del río que cambió de color

Pobladores nahuas de las localidades de la zona del alto Balsas, están preocupados por la contaminación del río. Desde hace dos semanas el color del agua cambió de azul a verde, y en algunas localidades como San Juan Totolcintla, municipio de Mártir de Cuilapan, murieron algunas tortugas y mojarras. Mientras que en Tula del Río, del mismo municipio, algunas personas se enfermaron luego de comer peces. Formalmente, y por escrito, el miércoles de la semana pasada representantes de las comunidades de San Juan Totolcintla, San Agustín Oxtotipan y Tula del Río, de Mártir de Cuilapan, informaron del problema y entregaron muestras del agua a la Secretaría de Salud (Ssa), pero hasta este lunes no tenían respuesta, declaró el presidente del Comisariado de Bienes Comunales de Totolcintla, Melquiades García Ríos. Los propios representantes de los pueblos han recomendado a los habitantes que tomen precauciones, pero el agua del río sigue siendo utilizada para regar los cultivos, para abrevadero del ganado, y en algunos pueblos la utilizan para bañarse y hasta para beber y cocinar. En un recorrido este lunes, en la ribera del río se pudo constatar que el agua es de color verde; el comisariado de Bienes Comunales dijo que siempre ha sido azul. Explicó que el cambio de color del agua preocupa a pobladores de cuando menos 15 comunidades que se encuentran asentadas en las orillas del río, desde Tlalcozotitlán, municipio de Copalillo, hasta Tlamamacán, municipio de Mártir de Cuilapan, aunque dijo que río abajo hay más comunidades del municipio de Eduardo Neri (Zumpango) por las que pasa el afluente, pero que no han tenido contacto con sus autoridades o representantes. Consultado a la orilla del río, la autoridad comunal de Totolcintla declaró que desde hace dos semanas están con la incertidumbre, ante el cambio de color del agua. “Por eso fuimos a la Secretaría de Salud a pedirles que investiguen y les llevamos una muestra, porque así como está no es normal, el agua siempre ha sido azul”. Explicó que comenzaron a notar el cambio del color desde el jueves 15 de marzo. Ya han padecido la contaminación del río antes, indican “A nosotros nos preocupa esta situación porque ya nos ha tocado vivir epidemias por la contaminación del agua”. Informó que en 1988 murieron en San Juan Totolcintla, San Agustín Oxtotipan y Tula del Río 30 personas por cólera. Un año después, en 1999, el agua se puso negra y entonces se murieron todos los peces, incluso reses. Recordó que esa vez las autoridades reconocieron oficialmente que el ingenio azucarero de Zacatepec, Morelos, lavó sus instalaciones y descargó los desechos al río Amacuzac, que desemboca en el Balsas. “Y ahora, otra vez nos está pasando lo mismo, cuando la variedad de especies apenas comenzaba a multiplicarse; hay bagre, mojarra, pez diablo, tortugas y hasta langostino, empezaba a haber aquí, quien sabe de dónde llegaron”, declaró. Por la ribera del río se observó a campesinos trabajando sus tierras sembradas de sandía, melón y milpa, que riegan con agua del río que extraen a base de bombeo. Por la orilla también se observaron reces y asnos que bajan a beber agua. García Ríos dijo que cuando el agua está normal, es común ver en la orilla a la gente pescando o bañándose. Ayer la orilla lucía solitaria. Contó que algunos ya no pescan por temor a que el agua tenga residuos tóxicos, y que otros no bajan a pescar porque el agua está oscura y aunque se sumergen al fondo del río no alcanzan a ver las mojarras. “Nos preocupamos porque no sabemos qué es lo que tiene el río, por eso nos reunimos los comisariados de los tres pueblos (San Juan Totolcintla, San Agustín Oxtotipan y Tula del Río), para pedir a la Ssa que investigue, que haga un estudio porque no es normal que esté así el agua”, insistió. El escrito que entregaron a la Ssa el miércoles de la semana pasada fue firmado por el comisariado de Bienes Comunales de Totolcintla, García Ríos; el de Tula del Río, Rogelio Vicario, y el de San Agustín Oxtotipan, Ignacio Morales Mundo. “Lo que pedimos es para evitar alguna tragedia en esta región, pero les llevamos la muestra y hasta hoy no nos han dado una respuesta, no nos han dicho por qué el cambio de color”, se quejó. El problema más grave ocurrió en Tula del Río, en donde a algunos pobladores “les dolió el estómago” después de que comieron pescado la semana pasada. Otras familias guardaron el pescado seco, pero al día siguiente “ya no servía”. Sin embargo en este pueblo no se encontró al comisariado Rogelio Vicario, quien fue el que alertó a su vecino de Totolcintla sobre el problema. García Ríos informó que el sábado llegó a estas tres comunidades una brigada de la Ssa, pero no como respuesta al escrito que entregaron a la dependencia, sino que fue un recorrido de rutina del personal, según les dijo a los pobladores Alfredo Duque Vélez, quien encabezaba al grupo. Los integrantes de esta brigada repartieron entre los pobladores frascos de cloro para desinfectar las verduras y purificar el agua que consumen; asimismo, se llevaron muestras de agua del río a petición de la gente de los pueblos. “Nosotros les dijimos que eso ya lo hacemos, porque las mujeres tienen talleres en los centros de salud, en donde les dicen cómo van a desinfectar el agua, cuantas gotas le tiene que echar al agua de tomar, y ahora lo que queremos es que nos digan qué es lo que tiene el agua para evitarnos problemas o una tragedia”, insistió. Aunque ayer no se encontraron peces muertos, García Ríos aseguró que la semana pasada unos pescadores encontraron tortugas muertas y vieron peces “que venían flotando en el agua”. Admitió que, si bien esta vez el problema no es tan grave como en 1998 y 1999, la gente está preocupada y quiere que las autoridades les dé una explicación del cambio de color del agua. Dijo que el agua del río es vital para los pobladores, porque la usan para el riego de sus cultivos de sandía, maíz y melón. También baja el ganado a beber agua. Aseguró que en algunas comunidades asentadas cuesta abajo, como Analco, San Agustín Oapan y San Miguel Tecuiciapan, San Marcos Oacatzingo y Tlamamacán utilizan el agua del río para consumo humano, debido a que no cuentan con manantiales. Informó que cuando menos en San Juan Totolcintla les han pedido a los habitantes que tomen precauciones y que si sienten algún síntoma, de inmediato vayan al centro de salud. “Les hemos dicho, pero siguen viniendo algunos vecinos, sobre todo a pescar. Ayer estuvimos en San Agustín Oxtotipan y vimos que llegaron gentes a pesar”, dijo. Informó que para los habitantes es difícil saber de dónde se está descargado el agua verde y lo que tiene, porque en el Balsas se juntan cuatro ríos, el que baja de Amacuzac, Morelos; el de Tlapa, de Puebla y otro que viene de La Esperanza, de Mártir de Cuilapan. “Por eso le estamos pidiendo a los gobiernos estatal y federal que intervengan, que hagan un estudio, que nos escuchen como pueblos indígenas, les estamos haciendo un llamado para no después lamentar alguna tragedia, porque ya han sucedido aquí. No tenemos grandes cosas, sólo el río que para nosotros es un tesoro, algunos tienen ganado y de allí toman agua, y estamos haciendo la petición para evitar que se mueran otra vez los animales”, declaró. Después advirtió, “que nos escuchen, les estamos pidiendo sensibilidad, no estamos tomando ahorita ninguna medida de presión, solamente les estamos pidiendo que intervengan en esto”. Al gobernador, Héctor Astudillo Flores, le demandó concretamente que instruya a sus secretarios para que hagan algo, “que vengan y que vean esto”, dijo señalando el caudal verdoso. Informó que al no tener respuesta al oficio que entregaron a la Ssa dirigido, esta semana van a entregar otro al gobernador Astudillo, “para que nos informen qué está pasando y no estemos con la duda, con la incertidumbre”. El comisariado ejidal también denunció que estas comunidades no cuentan con el apoyo para el saneamiento permanente del afluente del río y que son los propios habitantes los que se encargan de la limpieza. Aseguró que se integran comisiones y que cada domingo una de ellas se encarga de recoger la basura para que no vaya a dar al río. Asimismo informó que actualmente están trabajando en un proyecto de reforestación de 100 hectáreas cerca de la comunidad para proteger los mantos acuíferos. En las 100 hectáreas van a plantar tepehuaje, guaje, guamúchil y maguey, que son variedades propias de la región.

Insiste la alcaldesa de Apango en un proyecto alternativo para abastecerse de agua potable

La alcaldesa de Mártir de Cuilapan, Felícitas Muñiz Gómez informó que unos 5 mil habitantes de la cabecera municipal, Apango, tienen problemas para acceder al servicio público de agua potable, y se espera que un proyecto alternativo resuelva permanentemente el suministro. Este lunes al mediodía, la alcaldesa asistió al acto protocolario de firma de convenio en Casa Guerrero, donde señaló que ante el conflicto entre habitantes de la comunidad de Zotoltitlán y la cabecera municipal, se insiste al gobierno del estado que cree un proyecto que ayude a abastecer de agua potable. Reconoció que la tensión entre las dos comunidades permanece tras el asesinato de comisario y su hijo el jueves pasado. “La falta de agua está desde hace unos 30 años que hemos vivido este tipo de situación, ahora tenemos poco agua para solventar el problema”, agregó. La alcaldesa insistió en que hace más de dos años se trabaja en un proyecto con el gobierno del estado para cumplir el abasto de agua para la cabecera municipal, y así evitarse una constante confrontación con los habitantes de Zotoltitlán. Señaló que, inclusive se logró acceder a dinero a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), con el programa nacional de Fonoregion, con el que se asigna dinero para la construcción de dos pozos profundo con el que se plantea trabajar con dos constructoras. Recordó que, en enero de este año inició además la construcción de un pozo profundo para saber la cantidad de agua que se pueda extraer. “Ya teníamos otro pozo, uno está ubicado en Xacalco y otro en la parte norte de Apango”, afirmó. Dijo que para este proyecto, la Comisión de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento del Estado Guerrero (CAPASEG) hizo la licitación para el proyecto, con lo que se espera que se garantice la resolución del problema de una vez. En cuanto al conflicto con la comunidad de Zototitlán, señaló que se han replegado, por lo que de facto inició una tregua, como ocurre cada dos años luego de presentarse un enfrentamiento. “Se les ocurre pedir una minuta donde prometen no volver a hacer sus movilizaciones, cumplen los acuerdos y llega otro presidente y vuelven a recurrir a la misma movilización, nunca cumplen su palabra”, agregó. La alcaldesa dio a conocer que habitantes Tula del Río y San Agustín Ostotitla han reportado que el agua del río Balsas está contaminada y ha provocado diversas enfermedades entre los pobladores. (Anarsis Pacheco Pólito / Chilpancingo).

Ejecutan en Zotoltitlán a ex comisario y a su hijo en la zona del manantial en conflicto con Apango

 

El cuerpo del ex comisario de Zotoltitlán, Ricardo Fiscal, quien fue ejecutado por hombres armados, en la zona del manantial y las válvulas de la red de agua que surte a la cabecera municipal, Apango. Foto: El Sur

Un comando de sicarios atacó a vecinos de Zotoltitlán, municipio de Mártir de Cuilapan, y mató al ex comisario municipal Ricardo Fiscal Estrada y a su hijo, el niño Ricardo Fiscal Saltillo, en la zona donde se encuentra el manantial y las válvulas de la red de agua que surten a ese pueblo y a Apango, la cabecera municipal.
“Nos estaban venadeando desde el cerro, dijo uno de los pobladores que fue golpeado y abandonado amarrado por dos de los hombres armados, uno de ellos con un rifle AK-47 o cuerno de chivo.
El pueblo de Zotoltitlán cerró las válvulas de la red de agua que surte a la cabecera municipal desde el 2 de marzo como protesta porque la presidenta municipal Felícitas Muñiz Gómez, no cumplió una minuta de acuerdos de compromisos de obras para esa localidad.
En respuesta los habitantes de Apango bloquearon la carretera Apango-Zotoltitlán desde el 11 de marzo.
Ayer pobladores de Zotoltitlán fueron atacados por unos 12 hombres armados que llegaron a las orillas del pueblo, donde se encuentra el manantial del agua en conflicto y a unos 100 metros las válvulas de la red de agua que surte a la cabecera municipal.
En el ataque que ocurrió aproximadamente a las 2 y media de la tarde murió el ex comisario y su hijo Ricardo, otros dos pobladores fueron golpeados y abandonados amarrados en la zona.
A la hora del ataque se encontraban cerca de la zona del manantial seis pobladores, dos fueron asesinados, otros dos fueron golpeados y amarrados y dos más escaparon ilesos, informó la fuente.
Uno de los golpeados consultado vía telefónica informó que él y su acompañante andaban arreglando los corrales cerca del manantial del agua cuando dos hombres armados los agarraron por sorpresa, los golpearon y los dejaron amarrados. Contó que después atacaron a balazos al ex comisario y a su hijo cerca de la zona.
Enseguida llegaron unos 10 hombres armados a bordo de una camioneta roja con quienes se fueron los dos agresores, rumbo a la comunidad de La Esperanza por el lado oriente de Zotoltitlán.
Dijo que los agresores no son de la zona y que no tenían aspecto de campesinos o indígenas, y que suponen que vienen de las comunidades de Chilapa.
El síndico municipal, Benito Sánchez Ayala confirmó el ataque y dijo que los pobladores impidieron que los cuerpos fueran trasladados al Servicio Médico Forense de Chilpancingo.
Informó que él se encontraba circunstancialmente en el Palacio de Gobierno cuando le notificaron de los hechos y que solicitó de manera urgente una audiencia con el secretario de gobierno, Florencio Salazar Adame y que el funcionario intervino para que enviaran a esa localidad a soldados del Ejército y a la Policía Estatal.
Sánchez Ayala informó que algunos pobladores de Apango estaban proponiendo al gobierno estatal que intervinieran el Ejército y la Policía Estatal para abrir las válvulas de la red de agua, pero que a raíz de estos acontecimientos no hay condiciones para que se tome una medida así.

En enero pidieron seguridad ante la presencia de hombres armados, pero no les hicieron caso

El 27 de enero vecinos de ese lugar denunciaron la presencia en ese pueblo de un grupo de al menos 25 hombres armados que recorrían las calles y pretendían asumir el control del pueblo. Entonces el comisario municipal Sabino Sevilla Rodríguez demandó a los gobiernos del estado y federal que enviaran fuerzas de seguridad para resguardar al pueblo, pero no fue atendida su petición.
En una reunión el 7 de marzo habitantes de la localidad denunciaron que la presidenta municipal mal informó al gobierno estatal, en el sentido de que no era verdad la presencia de ese grupo armado.
Ayer uno de los pobladores responsabilizó a los gobiernos federal, estatal y municipal de las muertes del comisario municipal y su hijo debido a que no atendieron su petición de seguridad.
Declaró que los dos asesinatos son consecuencia del conflicto por el agua que no han querido resolver los gobiernos estatal y municipal.
Aseguró que uno de los atacantes antes de disparar al ex comisario y de su hijo gritó: “venimos de parte de la presidenta municipal”.
Tras los asesinatos los pobladores acordaron reforzar los retenes en las entradas del pueblo, y advirtieron que van a actuar en contra de toda persona extraña que llegue al pueblo.

Ya se investiga el doble homicidio, dice el vocero

El vocero del Grupo de Coordinación Guerrero, Roberto Álvarez Heredia dijo que la Policía del Estado “reforzó la seguridad en Apango” después de los homicidios del excomisario de Zotoltitlán y su hijo, ocurridos alrededor de las 3 de la tarde de este jueves, mientras agentes de la Fiscalía General del Estado hacían las diligencias de ley.
Dijo que al lugar acudió el comisario Sabino Sevilla Rodríguez, quien confirmó que los cuerpos correspondían a Ricardo de 65 años, y su hijo Antonio de 18. Los familiares de ambos no permitieron su traslado a las instalaciones del Servicio Médico Forense para que se les practicara la necropsia de ley.
Álvarez Heredia añadió que poco después de las 4 de la tarde una comisión de vecinos de Apango encabezada por el síndico Benito Sánchez, acudió a Palacio de Gobierno donde solicitaron una investigación a fondo y el reforzamiento de la seguridad en esa población, por lo que elementos de la Policía Estatal acudieron a esa cabecera municipal, “sumándose a las acciones de búsqueda de los responsables del doble asesinato”.

 

Matan a ex comisario y a su hijo en la zona del manantial en conflicto con Apango

Ejecutan en Zotoltitlán a ex comisario y a su hijo en la zona del manantial en conflicto con Apango

Fueron atacados por unos 12 hombres armados con cuernos de chivo, informan. “Nos estaban venadeando desde el cerro”, dijo un vecino, de dos que fueron golpeados y amarrados

Un comando de sicarios atacó a vecinos de Zotoltitlán, municipio de Mártir de Cuilapan, y mató al ex comisario municipal Ricardo Fiscal Estrada y a su hijo, el niño Ricardo Fiscal Saltillo, en la zona donde se encuentra el manantial y las válvulas de la red de agua que surten a ese pueblo y a Apango, la cabecera municipal.
“Nos estaban venadeando desde el cerro, dijo uno de los pobladores que fue golpeado y abandonado amarrado por dos de los hombres armados, uno de ellos con un rifle AK-47 o cuerno de chivo.
El pueblo de Zotoltitlán cerró las válvulas de la red de agua que surte a la cabecera municipal desde el 2 de marzo como protesta porque la presidenta municipal Felícitas Muñiz Gómez, no cumplió una minuta de acuerdos de compromisos de obras para esa localidad.
En respuesta los habitantes de Apango bloquearon la carretera Apango-Zotoltitlán desde el 11 de marzo.
Ayer pobladores de Zotoltitlán fueron atacados por unos 12 hombres armados que llegaron a las orillas del pueblo, donde se encuentra el manantial del agua en conflicto y a unos 100 metros las válvulas de la red de agua que surte a la cabecera municipal.
En el ataque que ocurrió aproximadamente a las 2 y media de la tarde murió el ex comisario y su hijo Ricardo, otros dos pobladores fueron golpeados y abandonados amarrados en la zona.
A la hora del ataque se encontraban cerca de la zona del manantial seis pobladores, dos fueron asesinados, otros dos fueron golpeados y amarrados y dos más escaparon ilesos, informó la fuente.
Uno de los golpeados consultado vía telefónica informó que él y su acompañante andaban arreglando los corrales cerca del manantial del agua cuando dos hombres armados los agarraron por sorpresa, los golpearon y los dejaron amarrados. Contó que después atacaron a balazos al ex comisario y a su hijo cerca de la zona.
Enseguida llegaron unos 10 hombres armados a bordo de una camioneta roja con quienes se fueron los dos agresores, rumbo a la comunidad de La Esperanza por el lado oriente de Zotoltitlán.
Dijo que los agresores no son de la zona y que no tenían aspecto de campesinos o indígenas, y que suponen que vienen de las comunidades de Chilapa.
El síndico municipal, Benito Sánchez Ayala confirmó el ataque y dijo que los pobladores impidieron que los cuerpos fueran trasladados al Servicio Médico Forense de Chilpancingo.
Informó que él se encontraba circunstancialmente en el Palacio de Gobierno cuando le notificaron de los hechos y que solicitó de manera urgente una audiencia con el secretario de gobierno, Florencio Salazar Adame y que el funcionario intervino para que enviaran a esa localidad a soldados del Ejército y a la Policía Estatal.
Sánchez Ayala informó que algunos pobladores de Apango estaban proponiendo al gobierno estatal que intervinieran el Ejército y la Policía Estatal para abrir las válvulas de la red de agua, pero que a raíz de estos acontecimientos no hay condiciones para que se tome una medida así.

En enero pidieron seguridad ante la presencia de hombres armados, pero no les hicieron caso

El 27 de enero vecinos de ese lugar denunciaron la presencia en ese pueblo de un grupo de al menos 25 hombres armados que recorrían las calles y pretendían asumir el control del pueblo. Entonces el comisario municipal Sabino Sevilla Rodríguez demandó a los gobiernos del estado y federal que enviaran fuerzas de seguridad para resguardar al pueblo, pero no fue atendida su petición.
En una reunión el 7 de marzo habitantes de la localidad denunciaron que la presidenta municipal mal informó al gobierno estatal, en el sentido de que no era verdad la presencia de ese grupo armado.
Ayer uno de los pobladores responsabilizó a los gobiernos federal, estatal y municipal de las muertes del comisario municipal y su hijo debido a que no atendieron su petición de seguridad.
Declaró que los dos asesinatos son consecuencia del conflicto por el agua que no han querido resolver los gobiernos estatal y municipal.
Aseguró que uno de los atacantes antes de disparar al ex comisario y de su hijo gritó: “venimos de parte de la presidenta municipal”.
Tras los asesinatos los pobladores acordaron reforzar los retenes en las entradas del pueblo, y advirtieron que van a actuar en contra de toda persona extraña que llegue al pueblo.

Ya se investiga el doble homicidio, dice el vocero

El vocero del Grupo de Coordinación Guerrero, Roberto Álvarez Heredia dijo que la Policía del Estado “reforzó la seguridad en Apango” después de los homicidios del excomisario de Zotoltitlán y su hijo, ocurridos alrededor de las 3 de la tarde de este jueves, mientras agentes de la Fiscalía General del Estado hacían las diligencias de ley.
Dijo que al lugar acudió el comisario Sabino Sevilla Rodríguez, quien confirmó que los cuerpos correspondían a Ricardo de 65 años, y su hijo Antonio de 18. Los familiares de ambos no permitieron su traslado a las instalaciones del Servicio Médico Forense para que se les practicara la necropsia de ley.
Álvarez Heredia añadió que poco después de las 4 de la tarde una comisión de vecinos de Apango encabezada por el síndico Benito Sánchez, acudió a Palacio de Gobierno donde solicitaron una investigación a fondo y el reforzamiento de la seguridad en esa población, por lo que elementos de la Policía Estatal acudieron a esa cabecera municipal, “sumándose a las acciones de búsqueda de los responsables del doble asesinato”.

 

Insisten pobladores de Apango en que resuelva el gobierno estatal el corte de agua de Zotoltitlán

En el conflicto entre pobladores de Apango, cabecera municipal de Mártir de Cuilapan, y la comunidad de Zotoltitlán, sigue latente el riesgos de violencia, debido a que las autoridades estatales han resuelto a medias el problema que inició cuando vecinos de Zotoltitlán cortaron el servicio de agua a los habitantes de Apango, mientras que éstos les bloquearon su carretera.
El ex presidente municipal perredista e integrante del movimiento de la cabecera municipal, Gerardo Celino Flores declaró, vía telefónica, que los pobladores de la cabecera municipal insisten en que el gobierno estatal intervenga para que sus vecinos de Zotoltitlán abran las llaves de la red que viene de ese pueblo.
Desde el 2 de marzo pasado los pobladores de Zotoltitlán mantienen cerradas las válvulas de la red de agua que surte a Apango. En respuesta, los habitantes de Apango bloquearon la carretera de ese pueblo a partir del 11 de marzo.
El miércoles, unos 500 habitantes de Apango se trasladaron en caravana a Chilpancingo y bloquearon el carril de norte a sur del bulevar del río Huacapa frente al Palacio de Gobierno, para pedir la intervención del gobierno estatal en el conflicto, ante la desesperación de los pobladores de Apango por la falta de agua.
Ese día, una comisión de ciudadanos se reunió con la delegada en la región Centro del gobierno del estado, Norma Yolanda Armenta Domínguez, y con el director de la Comisión de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento del Estado de Guerrero (CAPASEG), Arturo Palma Carro con quien firmaron varios acuerdos para resolver la escasez de agua en la cabecera municipal.
Consultado ayer por teléfono, el integrante de la comisión negociadora, Gerardo Celino Flores informó que los acuerdos se han cumplido parcialmente y que sigue latente el riesgo de un enfrentamiento entre los dos pueblos.
Dijo que la demanda central es que el gobierno estatal intervenga para que los pobladores de Zotoltitlán abran las válvulas de la red que surte a la cabecera municipal y que es una petición que no se ha cumplido.
“El movimiento sigue igual, la gente de Zotoltitlán siguen con el corte del agua y nosotros con el bloqueo a su carretera”, declaró, e insistió: “seguimos pidiendo al gobierno del estado que intervenga, ellos son los únicos que pueden mediar para destrabar y resolver la problemática”.
El ex alcalde e integrante de la comisión negociadora añadió que es el gobierno estatal el que tiene que intervenir ante los pobladores de Zotoltitlán para que abran las válvulas de agua, “tiene que ocuparse del caso, tienen que cumplir como intermediarios y convocar a ambas partes para establecer los canales de diálogo y llegar a acuerdos”, insistió.
Dijo que lo que buscan los pobladores de Apango, es que el acuerdo se establezca por la vía jurídica para que el problema se resuelva “para siempre, de lo contrario el problema se va a repetir en los próximos años y no queremos dejarles un problema a nuestros hijos, tenemos que sentar las bases para que esa comunidad entienda que los de la cabecera municipal no podemos seguir siendo sus rehenes cada vez que tengan problemas con las autoridades municipales”.
Insistió que quieren que las autoridades estatales resuelvan definitivamente y para siempre el conflicto y que ya no vuelva a ocurrir que los de Zotoltitlán les corten el agua cuando se les antoje.
“No queremos llegar a otros extremos, nosotros hemos estado calmando a los paisanos, porque si fuera de parte de ellos ya se hubieran hecho justicia por su propia mano, la gente está muy insistente y ha querido actuar de otra forma; la verdad, mucha gente está desesperada, sin agua”, insistió Celino Flores.
Explicó que a raíz de su protesta de la semana pasada en Chilpancingo, la CAPASEG conectó al sistema la red que viene de Oxtotitlán que fue uno de los acuerdos pero dijo que el agua es insuficiente porque apenas surte a 40 por ciento de los aproximadamente 8 mil habitantes de la cabecera municipal.
Detalló que mediante esa red están recibiendo 3 litros por segundo, cuando necesitan 9 litros por segundo.
Agregó que otro acuerdo fue que recibirían el agua en pipas y que la CAPASEG recuperaría tres pipas que están en poder de la presidenta municipal, Felícitas Muñiz Gómez; sin embargo, este acuerdo no se ha cumplido y la alcaldesa sigue a cargo del reparto de agua, pero está sucia y las familias la utilizan sólo para regar sus plantas o para los sanitarios, explicó.
Celino Flores dijo que la CAPASEG se comprometió a prestar a la población una planta para tratar el agua que se distribuye en pipas, pero que es una planta portátil que no resuelve el problema, “no está cumpliendo la necesidad que se requiere en el pueblo”, dijo.
Declaró que de todos los acuerdos sólo se están cumpliendo el de la conducción del manantial de Oxtotitlán, pero que está apenas en su primera etapa, y faltan otras dos etapas para ello dijo que se están buscando más captaciones de agua por el mismo punto de Oxtotitlan para bajar más agua.
Explicó que, mediante ese sistema pretenden llevar a la cabecera municipal 6 pulgadas pero que el proyecto es a largo plazo, informó.

 

Protestan vecinos de Apango en Palacio de Gobierno; exigen solución al conflicto con Zotoltitlán por el agua

Unos 500 pobladores de Apango, cabecera municipal de Mártir de Cuilapan, llegaron el mediodía de este miércoles en una caravana de varios vehículos a Chilpancingo y bloquearon el carril de norte a sur, frente al Palacio de Gobierno, donde exigieron la intervención del gobierno del estado para resolver su conflicto con la comunidad de Zotoltitlán, que les cortó el servicio de agua el 2 de marzo pasado.
Denunciaron que desde entontes, por falta del agua todas las escuelas de la cabecera municipal cerraron y que a 13 días de que dejó de llegarles el agua algunos vecinos han comenzado a enfermarse, porque tienen que usas agua sucia.
Los manifestantes responsabilizaron de la escasez del agua a la presidenta municipal, Felícitas Muñiz Gómez. La acusaron de incumplir promesas de campaña a los pobladores de Zotoltitlán y dijeron que, en represalia, éstos les cortaron el agua a los aproximadamente 8 mil habitantes de la cabecera municipal.
El vocero del movimiento, Alejandro Moctezuma Rodríguez declaró que la propuesta de solución que les llevó el lunes la delegada de Gobierno en la región Centro, Norma Yolanda Armenta Domínguez, respecto a que la Comisión de Agua Potable Alcantarillado y Saneamiento del Estado de Guerrero (CAPASEG) terminará una línea de conducción alterna, no resuelve el problema, puesto que no les dijo cuándo se va a terminar la obra, además de que no es suficiente para toda la población y es de mala calidad.
Tras la protesta, una comisión de vecinos se reunió en las oficinas de la CAPASEG con la delegada Armenta Domínguez, y con el director de CAPASEG, Arturo Palma Carro.
Unos 500 manifestantes llagaron a las 11 de la mañana a la entrada norte de la capital en unas 40 Urvan y carros compactos; en los parabrisas escribieron con tinta blanca, “Señor gobernador, solución al problema del agua en Apango”.
La caravana recorrió lentamente las calles de Chilpancingo hasta el Palacio de Gobierno; allí los habitantes de Apango mostraron pancartas en las que se leía, “Zotoltitlán, agua que no has de beber déjala correr”, “Apango tiene sed”, “respeto al derecho al agua”.
Los manifestantes bloquearon el carril del bulevar de norte a sur, frente al Palacio de Gobierno, mientras que una comisión se trasladó a dialogar con las autoridades estatales.
El vocero del movimiento, Alejandro Moctezuma Rodríguez, denunció que la presidenta municipal, Felícitas Muñiz Gómez, se ha desentendido del problema y ha dejado solos a los habitantes de la cabecera municipal, a pesar de que la acusó de ser la responsable, pues dijo que incumplió promesas de campaña a los pobladores de Zotoltitlán y en una minuta de acuerdos ofreció obras que no hizo y que para presionar la gente del pueblo vecino cortó el agua a todo Apango.
Añadió que ahora la alcaldesa quiere reducir el problema a un asunto de partidos, pues ha argumentado que quienes se manifiestan en demanda de agua son de Movimiento Ciudadano, y que se están aprovechando del problema con fines electorales, pero afirmó que quienes se manifestaron ayer son de partidos distintos, que se unieron porque están desesperados ante la escasez de agua.
Aseguró que, a 13 días de que sus vecinos de Zotoltitlán les cerraron las válvulas de la red que baja de su núcleo agrario, cerraron los dos jardines de niños, dos primarias, una secundaria y el Colegio de Bachilleres, porque no pueden trabajar sin agua, y desde entonces mil 500 niños se quedaron sin clases.
Informó que muchas personas han comenzado a tener problemas gastrointestinales y enfermedades de la piel porque tienen que usar agua sucia que compran en pipas o que van a recoger de algunos pozos cercanos a la cabecera municipal.
Otro manifestante informó que la presidenta municipal recibió de la CAPASEG tres pipas para repartir el agua a la población, pero denunció que Muñiz Gómez la distribuye gratuitamente a sus seguidores y al resto de la población se la vende, además de que a éstos les entrega el agua sucia.
El conflicto inició cuando los pobladores de Zotoltitlán citaron en dos ocasiones a la presidenta municipal a su pueblo para que les explicara por qué no había cumplido acuerdos que firmó con ellos en febrero de 2016, pero sólo recibieron una llamada telefónica del subsecretario para Asuntos Políticos del gobierno del estado, Martín Maldonado del Moral, quien les dijo que no podían citar a la alcaldesa porque ella es la máxima autoridad en el municipio, y que en todo caso se organizaran y fueran a verla a la presidencia municipal.
Los pobladores volvieron a citar a la alcaldesa el 2 de marzo, pero nuevamente los dejó plantados y ese día cerraron las válvulas de la red de agua que surte a la cabecera municipal. Sin embargo, la presidenta y el gobierno del estado no intervinieron para resolver el conflicto.
En respuesta, los pobladores de Apango, la tarde del domingo pasado acordaron bloquear la carretera Apango-Zotoltitlán para presionar a sus vecinos para que les abran la red, lo cual no ocurría hasta ayer, cuando los de Apango se manifestaron en la capital para exigir al gobierno estatal que intervenga en el conflicto.
Tras la protesta, una comisión de vecinos se reunió con la delegada de Gobierno en la región Centro, Armenta Domínguez, y con el director de CAPASEG, Palma Carro, en las oficinas de este último.
La comisión de ciudadanos y los funcionarios asumieron tres acuerdos; que se va a terminar la línea de conducción alterna, que se surte de un manantial diferente al de Zotoltitlán; que se va a resolver el problema de escasez mediante el reparto de agua en pipas, pero para ello la comisión de habitantes pidió al gobierno que recupere de la alcaldesa las tres pipas que tiene en su poder para que el agua se distribuya equitativamente.
Asimismo, los funcionarios propusieron que para el reparto en pipas integren un comité de vigilancia que se encargue de verificar que el agua se distribuya equitativamente.
El tercer acuerdo es buscar de manera conjunta nuevos pozos o fuentes de abastecimiento para que los habitantes de la cabecera municipal ya no dependan del agua que traen de Zotoltitlán.
Al respecto uno de los vecinos ofreció a la CAPASEG un pozo que se encuentra en su terreno a condición de que se le de mantenimiento para que sea una fuente más de abastecimiento.
En la reunión, el director de CAPASEG Palma Carro reconoció que Apango es la tercera cabecera municipal que está considerada como “foco rojo” por la falta de agua; los otros dos son Copalillo y Teloloapan.

 

 

Ofrece el gobierno estatal terminar una línea alterna de agua para Apango ante la escasez

El gobierno del estado, a través de la delegada de Gobierno en la región Centro, Norma Yolanda Armenta Domínguez, ofreció terminar una línea de abastecimiento de agua para Apango, alterna a la que tienen de Zotoltitlán y que les cortaron los pobladores de ese lugar el 2 de marzo. Con esa medida se pretende resolver el problema de escasez de agua en la cabecera municipal de Mártir de Cuilapan.
La funcionaria, entrevistada por teléfono ayer, dijo que, sin embargo, el bloqueo a la carretera de Zotoltitlán sigue porque los de Apango exigen que sus vecinos abran las válvulas de la red de agua.
A su vez, el comisario municipal de Zotoltitlán, Sabino Sevilla Rodríguez advirtió que el conflicto ya se complicó ante la reacción de los habitantes de Apango. Aseguró que ya habían acordado reanudar el servicio, pero como les cerraron la carretera ahora no abrirán las válvulas en tanto que la presidenta municipal Felicitas Muñiz Gómez, no cumpla al 100 por ciento la minuta de acuerdos firmada en 2016.
La delegada de Gobierno en la región Centro, Armenta Domínguez se reunió la tarde del lunes con los habitantes de Apango, y ayer declaró que el gobierno estatal se comprometió a que la Comisión de Agua Potable Alcantarillado y Saneamiento del Estado de Guerrero (CAPASEG) terminará una línea de conducción de agua que se suspendió hace dos años y que viene de una toma de Oxtotitlán, para resolver el problema de abastecimiento de agua a la cabecera municipal.
Reconoció que, en su reunión con los habitantes el lunes, constató la indignación del pueblo porque ya llevan 12 días sin agua, debido a que los pobladores de Zotoltitlán les cortaron el suministro ante un problema que tienen con la presidenta municipal, Felicitas Muñiz Gómez, dijo, en referencia a la minuta de acuerdos que dicen que no ha cumplido la alcaldesa.
“Lo que nosotros les ofrecimos con CAPASEG fue terminar el trabajo que quedó inconcluso hace dos años de la línea de conducción que viene de un manantial que está en terrenos de un habitante de Apango”, informó la funcionaria.
Informó que esa red, de hecho ya está terminada y que la tubería llega hasta la entrada del pueblo y que sólo faltan algunos tubos para hacer llegar el agua al depósito de captación.
Sin embargo, con esta línea de conducción se surtiría de agua apenas a la mitad de la cabecera municipal, “pero de alguna manera resuelve en parte el problema de falta de agua”, comentó.

Ya es un problema con la presidenta municipal, no con el estatal, dice la delegada en la región Centro

A pesar de los acuerdos a los que llegaron con los habitantes de Apango que tienen tomada la carretera a Zotoltitlán, la funcionaria admitió que éstos, ayer continuaron el bloqueo, y que el lunes le advirtieron que no la van a liberar hasta que los de Zotoltitlán no abran las válvulas del agua que viene de ese pueblo.
Norma Yolanda Armenta explicó que ese ya no es problema en el que deba intervenir el gobierno estatal, “ese ya es otro asunto que no le compete al gobierno del estado, porque es entre la presidenta municipal a quien la gente de Zotoltitlán le exigen el cumplimiento de una minuta de acuerdos firmada hace dos años”, expresó.
Además aseguró que el 90 por ciento de las peticiones de Zotoltitlán plasmadas en esa minuta que correspondía resolver al gobierno estatal, ya fueron resueltas. Informó que entre éstas están la pavimentación de calles, la ampliación de la red de agua potable en algunas colonias de Zotoltitlán, la autorización de la clave para la escuela secundaria y el arreglo de aulas escolares.
Pero insistió que los pobladores de Zotoltitlán alegan que hay compromisos no cumplidos por la presidenta municipal, “y ese es un conflicto estrictamente municipal y no le compete atenderlo al gobierno estatal, allí no podemos entrarle hasta que haya una petición de parte”, insistió.
La funcionaria confió en que al empezar a tener agua la cabecera municipal mediante la red alterna que se está terminando, el conflicto comenzará a destensarse.
La delegada de Gobierno en la región Centro, informó, asimismo, que el lunes envió un comunicado a la gente de Zotoltitlán para invitarlos a platicar con el gobierno estatal, pero que respondieron negativamente.
Mientras tanto, el síndico de Apango, Benito Sánchez Ayala confirmó vía telefónica que el bloqueo a la carretera de Zotoltitlán continuó ayer martes.
Dijo que los pobladores de la cabecera municipal resolvieron que no van a dar marcha atrás en su movimiento en tanto no se comience a ver el trabajo de la CAPASEG en la obra de la red alterna que les prometieron.
Reconoció que los trabajadores de CAPASEG comenzaron a laborar ayer en la línea de conducción, pero insistió en que los vecinos quieren ver resultados “tangentes”.
Admitió que Armenta Domínguez les dijo que los pobladores de Apango cuentan con todo el respaldo del gobernador, Héctor Astudillo Flores, y que ya vieron que ayer comenzaron los trabajos para la conexión del agua que viene de Oxtotitlán a la cabecera municipal.
Informó que, simultáneamente, tratarían de dialogar con los líderes de Zotoltitlán para llegar a acuerdos y que abran las válvulas de la red que viene de la toma ubicada en ese pueblo.
Sin embargo, el comisario de Zotoltitlán, Sabino Sevilla Rodríguez declaró, vía telefónica, que con el bloqueo a la carretera el problema se complicó para la gente de Apango, y no para los de Zotoltitlán, informó que la gente de este pueblo ya encontró otra vía de acceso hacia Hueyitlalpan para salir a la carretera Chilpancingo-Chilapa, cerca de Almolonga.
Aseguró que ya habían acordado que les abrirían las válvulas de la red de agua, “porque entendemos que el problema no es con el pueblo, sino con la presidenta municipal”.
Sin embargo, dijo que a la gente de su pueblo no le gustó la reacción de los de Apango, que les bloquearan la carretera, y ahora mantendrán las válvulas cerradas por tiempo indefinido, “porque a quien no le interesa resolver el conflicto es a la presidenta municipal, Felicitas Muñiz Gómez”.
Se quejó de que para las autoridades estatales y municipales, “nosotros no valemos nada, porque no nos han buscado para solucionar nuestras demandas y no nos han solucionado nada”.

 

Bloquea Apango por segundo día el camino a Zotoltitlán; pide restablecer el abasto de agua

 

Pobladores de Apango, cabecera del municipio de Mártir de Cuilpan, bloquearon desde la tarde del domingo la carretera Apango-Zotoltitlán, para exigir a las autoridades estatales y municipales que resuelvan el conflicto que tienen con sus vecinos, quienes les cortaron el suministro de agua desde el 2 de marzo pasado.
El conflicto provocó tensión este lunes entre los dos poblados, debido a que había los rumores de que los habitantes de Zotoltitlán irían a Apango a abrir el paso, lo que motivó que se cerraran los centros educativos en la cabecera municipal.
En respuesta, los habitantes de la cabecera municipal bloquearon desde las 7 de la noche del domingo la carretera Apango-Zotoltitlán, en la entrada de la cabecera municipal. Más adelante colocaron piedras y troncos para cerrar en otro tramo el paso, y un kilómetro más adelante bloquearon la carretera con toneladas de tierra que amontonaron con maquinaria pesada.
La mañana de ayer, lunes, más de 500 vecinos amanecieron bloqueando la carretera de Apango a Zotoltitlán. Sin embargo, entre ellos habían grupos encontrados; unos declararon que los responsables de que desde el 2 de marzo no tuvieran agua eran las autoridades municipales que encabeza la presidenta municipal, mientras que los de otro grupo reclamaban que los culpables son únicamente los habitantes de Zotoltitlán, quienes cada vez de que tienen problemas con las autoridades municipales recurren al cierre de las válvulas de la red de agua, para presionar.
La situación hasta las 3 de la tarde era tensa, pues los dos grupos pretendían imponer su criterio.
A la una de la tarde, los grupos inconformes esperaban a la comisión del gobierno del estado que acudiría a resolver el conflicto.
La comisión, se dijo, sería coordinada por la delegada en la zona centro del estado, Norma Yolanda Domínguez Armenta.
Sin embargo, los habitantes de la cabecera municipal, reclamaron en la reunión general que comenzó después de las 3 de la tarde que no había interés del gobierno del estado, para resolver de fondo el conflicto.
Después, algunos se manifestaron a favor de las propuestas de la delegada de gobierno, mientras que otros dijeron que el problema se debería resolver de fondo, es decir, garantizando el abastecimiento del agua de manera permanente a la cabecera municipal.
El conflicto, sin embargo, continuaba a las 6 de la tarde de ayer, debido a que muchos habitantes de Apango estaban inconformes con los acuerdos alcanzados con las autoridades estatales.
En la noche, los habitantes de la cabecera municipal advirtieron que el bloqueo seguiría hasta que las autoridades municipales y estatales no les garantizaran el suministro de agua y que no dependandel que les llega de sus vecinos de Zotoltitán.
Los dirigentes del movimiento, denunciaron que la responsabilidad del conflicto entre los dos pueblos es de las autoridades estatales y municipales porque no han intervenido en la solución del conflicto, a pesar de que en ambos lados pidieron con anticipación su intervención.