Claman familiares de los cuatro desaparecidos de Chilpancingo a sus captores que los liberen

Un elemento de la Marina resguarda el estacionamiento de la tienda Aurrerá sur en Chilpancingo para inhibir los hechos de violencia Foto: Jose? Luis de la Cruz

Zacarías Cervantes

Chilpancingo

La madre de Elizabeth Catalán Olalde de 39 años y abuela de Diego Gael Peralta Catalán de 17, ambos desaparecidos la madrugada del sábado en el trayecto de Palo Blanco a Chilpancingo, Guadalupe Olalde envió ayer un mensaje a quienes los tienen, les pidió: “de todo corazón les pido que se apiaden de nuestro dolor y nos regresen a nuestros hijos. No queremos nada contra nadie, sólo que nos los entreguen”.
Elizabeth y su hijo Diego Gael están desparecidos desde hace cinco días junto con Eloy Peralta de 38 años, esposo de Elizabeth y padre de Diego Gael, así como Brithany Castro Santiago de 16 años, novia de Diego Gael.
Ayer los familiares de los desaparecidos recorrieron los pueblos de Quechultenango y Colotlipa en donde entregaron volantes, repartieron sus fotos y pidieron a los vecinos que aporten información si los han visto o tienen datos de dónde podrían ser localizados.
Por su parte, Ciri Santiago, Madre de Brithany Castro Santiago, la estudiante de segundo grado de la escuela Preparatoria Número Uno de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), pidió a la población que le ayuden a encontrar a su hija.
“Estoy desesperada por tener a mi hija en mis brazos. Le pido de todo corazón a la gente que la tiene que la entreguen, yo no quiero nada contra nadie, sólo que me entreguen a mi hija, es lo único que yo pido”, dijo en declaraciones por teléfono.
A cinco días de la desaparición de las cuatro personas, ayer, los familiares recorrieron acompañados por militares, agentes de la Guardia Nacional y policías ministeriales de la Fiscalía General del Estado (FGE) los pueblos de Quechultenango y Colotlipa para repartir volantes y fotografías de los desaparecidos, como parte de las jornadas de búsqueda.
Ciri Santiago explicó que cuando desaparecieron regresaban de Palo Blanco a Chilpancingo, “y como en Petaquillas hay una entrada para estos lugares pensamos que posiblemente por acá pudieran estar”, dijo.
Reiteró que Brithany salió el viernes aproximadamente a las 10 de la noche a la casa de su pareja Diego Gael, “y como vivimos cerca me dormí confiada que todo estaría bien”.
Por su parte, el papá de la adolescente, Miguel Alberto Castro Juárez aseguró que su hija no había tenido algún conflicto con alguien o alguna amenaza, “nada que mi hija me haya contado, por eso andaban paseando sin precaución en la calle, y no me explico qué haya pasado, qué esté pasando o por qué pasaron las cosas”.
Explicó que la relación de su hija con su novio iba bien, “y yo estaba a gusto con su relación”, contó Miguel Alberto, quien se dedica a la construcción.
Guadalupe Olalde, madre de Elizabeth Catalán y abuela de Diego Gael, dijo que ya van cinco días y no saben absolutamente nada, y volvió a pedir a las autoridades que los apoyen con la búsqueda.
“Sólo esperamos que nuestros hijos estén bien, que regresen sanos y salvos, no queremos nada contra nadie, simplemente queremos a nuestros hijos de vuelta”.
Hasta ayer no se había localizado ni la camioneta en la que regresaban los cuatro de Palo Blanco: Eloy Peralta, su esposa Elizabeth Catalán, su hijo Diego Gael y la novia de éste, Brithany.
Ayer se supo que los cuatro fueron a dejar a Palo Blanco a una persona a quien los adolescentes le dicen “padrino”, porque en diciembre pasado fue a “pedir la mano” de Brithany y sólo esperaban tener la mayoría de edad para que se casaran.
La Madre de Elizabeth explicó que, incluso, los adolescentes ya viven juntos en la casa de la mamá de Brithany y que llevan una relación normal.
Informó que le hablaron a la persona que fueron a dejar a Palo Blanco y les aseguró que conforme lo dejaron en su casa se regresaron a Chilpancingo.
Ciri Santiago contó que la última comunicación que tuvieron con ellos sería aproximadamente a las 2:50 de la madrugada del sábado, cuando su nieto Diego Gael se comunicó por teléfono con su hermana y le dijo: “estamos bien, ya vamos para allá”, pero no le precisó en qué punto iban.
A partir de entonces perdieron contacto con ellos, “no volvimos a saber nada porque se apagaron los celulares y ya no supimos absolutamente nada hasta la fecha”.
Ciri Santiago supone que les quisieron robar la camioneta, una Toyota Hilux blanca de doble cabina, modelo 2015 sin rotulación y con placas de Guerrero, propiedad de la empresa para la que trabaja su yerno, quien está muy apegado a la familia de su esposa Elizabeth, debido a que desde pequeño quedó huérfano y le dieron el respaldo.
La madre de Elizabeth contó que esa noche Eloy Peralta llevaba en la caja de la camioneta dos tambos con Diesel porque muy temprano se iba a ir a su trabajo, “pero ya no volvieron”.
Aseguró: “nunca había tenido algún problema, mi hija tampoco, trabaja en Coopel y Liverpool, por eso yo pido que se apiaden de esta madre que está sufriendo mucho”.
Bernardo Ignacio Catalán Olalde, hermano de Elizabeth y tío de Diego Gael, llamó a quienes se los llevaron a que los entreguen y prometió que no van a proceder en su contra, incluso ni por la camioneta, “lo que nos interesa es que nuestros familiares regresen con bien”.
Insistió: “el mensaje es que únicamente queremos a las personas, no nos interesa lo material, queremos a nuestros familiares”.
Aseguró que ninguna de las victimas había recibido alguna amenaza o que haya tenido algún problema con alguien, “simplemente dejamos de tener contacto con ellos desde la madrugada del sábado, no hemos sabido nada, simplemente desaparecieron”.
La ruta donde desaparecieron, Palo Blanco-Chilpancingo, así como los lugares que recorrieron ayer, es una zona controlada por el grupo delictivo Los Ardillos, sin embargo, los familiares no han señalado o responsabilizado a alguien o a algún grupo por la desaparición.
Las dos familias convocaron ayer a organizaciones sociales, a organismos de derechos humanos y a familias que tengan desaparecidos a una marcha que partirá a las 8 de la mañana del parque Margarita Maza de Juárez, ubicado al norte de Chilpancingo.