Protestan padres en Acapulco contra una planta recicladora; pone en peligro a sus hijos, aseguran

Argenis Salmerón

Unos 200 padres de familia de la primaria Pedro Moreno, ubicada en la colonia Jardín Mangos, bloquearon una hora de manera intermitente la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo, para exigir el retiro de una planta recicladora de plástico, porque aseguraron que representa un peligro para los estudiantes.
Después de las 8 de la mañana, unos 200 inconformes cerraron los dos sentidos de la vialidad, afuera de la iglesia católica Virgen de Fátima.
Los manifestantes dijeron que el personal de la planta recicladora recarga su material en la barda de la escuela, que está a punto de colapsar por el peso y hay riesgo para los niños, que mañana regresan a clases.
Manifestaron que las autoridades educativas realizaron la medición de la barda, de unos 30 metros, para hacerla de nuevo.
Sin embargo, dijeron que la dueña de la recicladora, con hombres armados retiro a las autoridades educativas, que realizaban la medición de la barda.
En declaraciones a reporteros, la madre de familia Guadalupe de Jesús pidió a las autoridades retirar a la recicladora de plásticos del costado de la primaria Pedro Moreno, porque aseguró que representa un peligro para los alumnos.
Explicó que esa empresa recarga su material a una barda de la escuela, misma que está a punto de colapsar por el gran peso.
Manifestó que la escuela tiene ese problema desde hace cinco años y “ahorita, por el huracán Otis, la barda quedó sensible”, y “hoy los niños regresan a clases”.
“Por la alta contaminación no debe estar cerca de la escuela. Es un gran peligro. ¿Dónde están las autoridades?”, cuestionó.
Afirmó que ya buscaron a la dueña de la empresa recicladora, para solicitarle que retire las “toneladas” de plástico, pero “nos mandó a gente armada para amenazarnos”.
Indicó que la barda de atrás de la escuela tiene 200 metros de largo y el material reciclado recargado ocupa alrededor de 30 metros.
Sostuvo que la empresa recicladora obstruye la vialidad y ocupa la banqueta de los peatones, que es “un lugar público, una empresa privada, sin permiso de nadie”.
Criticó que los efectivos de la Guardia Nacional no hace nada, a pesar de que están de manera permanente en la iglesia de la Virgen de Fátima, “no ayudan a la población, a pesar de la petición”.
Informó que en el turno de la mañana de la primaria hay 600 estudiantes y en la tarde 150.

 

Mantienen cerrada la primaria de El Coacoyul, Zihuatanejo; no han demolido aulas dañadas

Padres de familia de la escuela primaria Francisco I. Madero, ubicada en la colonia Villahermosa (Las Pozas) de la comunidad El Coacoyul, en Zihuatanejo, acordaron que no enviarán a clases a sus hijos en tanto el gobierno del estado no dé una fecha para la demolición y reconstrucción de tres aulas y los sanitarios, que están deteriorados y en riesgo de colapsarse.
Este jueves, el director del plantel, Martín Maldonado Arcos dio a conocer el resultado del dictamen del director responsable de obra que evaluó las instalaciones de la escuela ante los padres de familia, que mantienen desde la semana pasada cerrada la escuela y demandan que Protección Civil del estado haga una revisión estructural del inmueble.
Según el experto, hay tres aulas que deben ser demolidas y reconstruidas, así como los sanitarios de la escuela, y recomienda que estas instalaciones no sean utilizadas, ante el deterioro en que se encuentran.
Los padres de familia cuestionaron al director sobre la respuesta que ha dado el Ayuntamiento a la solicitud que la semana pasada le hizo llegar al alcalde perredista, Gustavo García Bello, para que los ayude con aulas provisionales, y el profesor contestó que no ha tenido contestación.
Los papás comentaron que si en el Ayuntamiento no les dan respuesta, se van a organizar para buscar otras alternativas, pues señalaron que los niños que toman clases en la cancha techada, lo hacen con incomodidades, y propusieron acudir a organizaciones, “o a quien nos quiera ayudar”, para construir los salones temporales.
Asimismo, preguntaron cuándo empezará la demolición de los salones y sanitarios el Instituto Guerrerense de la Infraestructura Física Educativa (IGIFE), pero el director dijo que están en la espera de que ese organismo dé respuesta a la solicitud que envió por escrito, y ante la situación, los padres determinaron que no enviarán a sus hijos a clases en tanto el IGIFE no responda a la petición de que sean demolidos y reconstruidos los salones, por lo que la escuela seguirá cerrada.

No terminan obras iniciadas en marzo de 2016 en un kínder de la misma comunidad, denuncian

La directora encargada del jardín de niños Francisco González Izazaga, de la colonia Lomas de Sotelo, en la comunidad El Coacoyul, Zihuatanejo, Adibey Mariles Cabrera, denunció que el Instituto Guerrerense de la Infraestructura Física Educativa (IGIFE), no ha terminado la construcción de tres aulas, la dirección y sanitarios, y por eso disminuyó la matrícula escolar y con ello, el cambio de centro de trabajo de varias maestras.
Mariles Cabrera contó que la construcción se inició en marzo de 2016, cuando el IGIFE otorgó la obra al empresario constructor Arnoldo Bonales Bustos, quien se comprometió a concluir la obra en cuatro meses, “sin embargo, ha pasado un año y siete meses y la obra presenta un avance estimado en un 40 por ciento”.
Agregó que la obra inconclusa es un peligro para los niños, por lo que padres de familia han dado de baja a sus hijos, “en el ciclo escolar 2016-2017 teníamos una matrícula de más de 100 alumnos, y en actual ciclo escolar, 2017-2018, tenemos 35 niños, de los cuales 20 están en tercer grado y 15 fusionados en el primero y segundo grado”.
Señaló que, ante la evidente disminución de la matrícula escolar, la Secretaría de Educación Pública (SEP) ordenó la reubicación de dos maestras, con el argumento de que la cantidad de alumnos no amerita que haya tantas profesoras y que recientemente las autoridades educativas plantearon el cambio del profesor de educación física.
“Los alumnos toman clases frente a la construcción, la cual, además de ser un distractor, representa un riesgo latente para los niños, así lo han expresado algunos padres de familia, por lo que hemos buscado al constructor, el señor Arnoldo Bonales, y se comprometió a que el trabajo se va a reanudar a partir del 26 de octubre próximo, con el argumento de que fueron suspendidos por el temporal de lluvias desde septiembre pasado”.
La directora encargada llamó al director del IGIFE, Jorge Alcocer Navarrete, para que supervise la obra que ese mismo organismo otorgó al empresario constructor, “los trabajos han sido lentos y únicamente han traído problemas a la escuela”, señaló.